Más que palabras (Heartstopper 4)

Puede que haya sido el libro que más me ha gustado de la saga por el momento. Me parece increíble y maravillosa la forma en la que la autora introduce el tema de la salud mental, y creo que es súper necesario que todo el mundo lea sobre estas cosas.

En el tercer volumen ya plantea el problema de Charlie con el tema de la alimentación y este cuarto libro se centra en él al máximo: cómo lo comenta a su entorno, cómo lo trata, cosas que puede hacer la gente de su alrededor para ayudarle, etc. de verdad que me ha encantado la forma de enfocarlo todo y, por qué no decirlo, me ha emocionado varias veces.

La salud mental es un tema duro y plantearlo con mensajes al lector bien enfocado me parece un logro enorme. Hablo desde la perspectiva de una persona que no ha vivido ningún problema de este tipo ni en familia ni en amigos (cruzo los dedos para que siga así) y me ha hecho entender cosas que ni me había planteado.

De hecho, esta historia es muy bonita porque, al final, Charlie tiene gente que le quiere y le apoya, pero me ha hecho pensar en todos los que no tienen ese apoyo y es muy duro. de la misma forma, Alice Osman también explica que no está bien creer que con amor se cura todo. No, el amor ayuda, pero hacen falta más cosas, como por ejemplo hablar con un profesional en estos casos.

De nuevo, me encanta el personaje de Tori, la hermana de Charlie, y en este volumen me encanta todo lo que hace. Además, también me gusta mucho el personaje de la madre de Nick, ya veréis por qué.

Creo que Heartstopper en general es una historia que merece ser leída y, para los que no se animen con la novela gráfica, van a sacar una serie (por favor, que esté bien 🤞). Así que todo el mundo a conocer a Nick y Charlie 😜

Cuarta entrega de esta serie juvenil que nos cuenta la historia de amor de Charlie y Nick, dos adolescentes que no solo se enfrentan a su primer amor...

Si hasta ahora la historia de Nick y Charlie se desarrollaba en cómo vivir un amor entre dos hombres en el mundo adolescente, cuando la homosexualidad aún no está del todo aceptada (por decirlo de alguna manera), en este tomo de la saga aparece un demonio peor: los trastornos alimenticios.

La autora nos muestra de forma sencilla y comprensible cómo Charlie se enfrenta a sus propios demonios y cómo Nick reacciona junto a él, al mismo tiempo que por fin decide contarle lo suyo al padre, siempre ausente.

Parece imposible, pero esta historia cada vez me gusta más.

En esta cuarta entrega de Heartstopper vamos a ver como la relación entre Charlie y Nick es cada vez más seria.
En este libro se van a abordar temas muy importantes como es el de la bulimia y patologías de carácter mental, que harán tambalear un poquito la relación entre estos dos chicos.
Es muy valioso el contenido y la enseñanza que encierra, ya que su autora nos da pistas de como salir y batallar con estas enfermedades, que por desgracia están a la orden del día y donde todo el mundo nos encontramos expuestos.
Da consejos de como tratar a las personas que se encuentren sumergidas en una batalla tan grande, pues como veremos no es nada fácil de lidiar y es un trabajo de fondo.
También, al final del libro nos regala unos cómics extras sobre los personajes principales de Heartstopper, así como unas fichas personales sobre cada uno de ellos.
Y por si a alguien le hiciese falta, también nos aporta unas direcciones de centros de salut mental donde acudir.
Para acabar, y por si alguien aún no lo sabe, esta preciosa saga va a saltar a la gran pantalla, y dentro de un tiempo la podremos ver en Netflix.

Como siempre lindos y tiernos.
Pero esta vez mucho más centrada en los problemas de salud mental, no es algo que se tome a la ligera en realidad y me gusta mucho como la autora hace que entendamos un poco de todo ese mundo, no es una llenadera de información sin sentido y el hecho de poder ver como lo llevan ambas personas (la que lo padece y la que apoya) lo hace ser más real.
He sufrido con este tomo, ver como mis dos personajes favoritos se encuentran en medio de una situación que realmente nadie quisiera tener que pasar me hace verlos de una manera diferente, más humanos.
El resto de los personajes también se están robando mi corazón, como poco a poco a pesar de no ser "los principales" conocemos más de su historia y de cómo lidian también sus propios problemas.
No quiero que esto termine nunca.

¡Guau!
Sigue siendo igual de fabuloso que siempre, te llena el corazoncito del amor que sienten y lo monos que son ❤
Me encanta que hayan tocado el tema psicológico, y que se hayan centrado en que el amor no lo cura todo y no puedes salvar a alguien solo con amor.
Es una maravilla. No puedo evitar sentir paz y amor cuando leo sus libros.
Deseando que llegue el volumen 5, aunque no quiera que se acabe.
Pd: adoro a la hermana de Charlie, Tori me representa a mi y a mucha gente. ❤

Nick y Charlie siguen siendo tan adorables como siempre. Ya le han contado a casi todo el mundo que están saliendo y su relación se va haciendo más sólida. También vamos conociendo un poco más a sus amigos, la banda de París. Pero es verano y Nick se va de vacaciones tres semanas, así que Charlie se queda solo con sus pensamientos y sus problemas.

Este cuarto volumen cambia un poco el tono con respecto a los otros tres libros. Es más duro que los anteriores y toca temas muy importantes al tratar sobre la salud mental y los trastornos alimenticios.

Me ha gustado mucho como la autora ha tratado estos temas y cómo nos muestra cómo puede afectar este tipo de trastornos tanto a la persona que lo sufre como a aquellos que lo rodean: familia, pareja, amigos. Podemos ver estos dos puntos de vista a través de Nick y Charlie y así vemos como cada uno intenta afrontarlo a su manera.

Nick y Charlie aprenden que el amor no puede curarlo todo. No hay ninguna solución mágica que cure una enfermedad metal; es un camino difícil, una lucha que se desarrolla día a día. Pero con un poco de ayuda las cosas pueden mejorar.

¡Qué ganas de leer el quinto volumen y qué pena me va a dar que se acabe la historia!

Mención especial a lo maravillosas que son Tori y la madre de Nick.

El volumen 4 de Heartstoppers es un poco más duro que los tres anteriores ya que ahonda más en la salud mental.

Nick y Charlie continúan con su relación, el verano sigue pero Nick va a irse 3 semanas con su familia y Charlie sigue dándole vueltas a todo, al miedo a decirle a Nick que lo ama y ser rechazado o no amado al mismo nivel, lo que le estresa y le afecta a su salud mental y acrecenta su TCA. Nick sigue preocupado por Charlie y en todo momento quiere ayudarle por lo que termina pidiendo el apoyo de su madre y su consejo. Poco a poco la historia sigue entre altibajos.

A pesar de lo duro que resulta este volumen por todo lo que viven los protagonistas, me ha gustado mucho como lo ha enfocado Alice, mostrando los puntos de vista de quien sufre una enfermedad mental y de quien lo vive desde fuera. Muchas personas conviven con gente que sufre ansiedad, depresión, etc, y no consiguen empatizar con la persona que lo vive, y viceversa, gente que quiere ayudar a esas personas y son malinterpretadas por culpa de la enfermedad.

He sufrido mucho con Charlie y he llorado al final del capítulo 5 porque es muy difícil dar el paso que ha dado él, pero cuenta con el apoyo de Nick, de sus amigos y de sus familias, sobre todo de Tori, un personaje que me encanta.

La historia también nos muerta un poco que la dependencia creada a veces en las parejas no es buena, que hay que buscar apoyo en más lugares.

Estoy deseando ver como sigue la historia en el próximo volumen.

Cuando pensé en leer este cuarto tomo me dije "igual cuatro ya son demasiados..." y me sorprendí devorando sus páginas en solo un par de horas, disfrutando de esta historia incluso más que en las entregas anteriores.
Alice Osman trata la adolescencia y la salud mental como deben ser tratadas, con una sensibilidad increíble y desde un punto de vista con el que es imposible no empatizar.

Charlie nunca pensó que podría gustarle a Nick, pero ahora son pareja. de forma oficial. No solo eso, también cree que está preparado para decirle esas dos palabras que le provocan vértigo: te quiero. Nick siente lo mismo que Charlie, pero también tiene un montón de pensamientos rondándole la cabeza: además de plantearse decirle a su padre que tiene novio, cree que Charlie tiene un trastorno de la alimentación. Las semanas pasan y, en este nuevo curso escolar, Charlie y Nick están a punto de aprender qué significa el amor.

Parecía imposible, pero este tomo es aún más tierno que los anteriores. La relación de Charlie y Nick continúa avanzando a pequeños pasos, a veces tan pequeños que te hacen impacientarte y provocan que el corazón te de un vuelco. Es increíble lo que la autora transmite a través de las viñetas, siendo palpable el amor entre ellos.

Me gusta mucho la natural evolución que tienen los protagonistas, así como los problemas que les rondan y los pensamientos que los confunden. Es muy adorable ver como luchan consigo mismos y como tropiezan para volver a levantarse, listos para apoyarse el uno al otro. Heartstopper es una obra muy realista capaz de comprender las dificultades que sufren los adolescentes, tanto dentro de una relación amorosa como en el día a día.

Nunca me cansaré de recomendar este comic a cualquiera, ya sea que busques una bonita historia de amor o un simple reflejo de la vida adolescente. Puede que el dibujo llegue a ser algo simple y plano, pero es capaz de reflejar todos los problemas y alegrías de este elenco de personajes tan diverso, divertido y real.

Irbis.

En esta cuarta entrega de Heartstopper, podemos observar como la trama cambia drásticamente, literalmente pasamos de un amor juvenil hacia trastornos alimenticios, incluso me atrevería a decir que podemos observar un trastorno de la autoestima por parte de Nick (eso es un spoiler, lo siento). Pero aparte de eso podemos ver discriminación hacia la comunidad LGTB, al leer todas estas discriminaciones me dio una tristeza muy grande, porque pensaba en lo horrible que debe ser el sentirse discriminados por tus pares o incluso por tu propia familia. En lo personal recomendaría este libro para jóvenes de entre 14 a 18 años.