Tony Takitani

Este es un relato sobre la soledad, al terminarlo me ha dejado una sensación de tristeza.

Este es el primer libro que leo de Haruki Murakami, su narrativa es impecable, sencilla y se lee de forma muy ágil, casi sin darte cuenta pero(....si hay un pero), no he logrado conectar con la historia ni con los personajes, así que para mí es un relato entretenido, para pasar el rato.

Lo mejor del libro indudablemente han sido las ilustraciones de Ignasi Font.

Sé que me vais a lanzar piedras pero es que no puedo con Murakami. Sigo leyendo cosas suyas pero cada vez tengo menos paciencia con él y su trato hacia la mujer y este libro es otro de esos que confirman que no escribe para mí.

Decidí leerlo por lo llamativo del nombre y de la edición, muy cuidada y con magníficas ilustraciones de Ignasi Font. Luego ya el contenido es otra cosa. Vamos al relato en sí.

El personaje de Tony ya está marcado desde su nacimiento por el nombre, pues al no ser de origen japonés de pequeño siente las burlas de sus compañeros, se creen que es un mestizo, pero no, él es japonés aunque con un nombre que no lo es y además, en un momento en el que hay muchos niños nacidos de japonesas y soldados norteamericanos... y eso está mal visto. Esa parte concretamente me ha parecido interesante, imaginar como debe ser cuando en un país asiático empiezan a nacer bebés con otros rasgos, lo que deben sentir a medida que empiezan a verse diferentes de los otros... no es el caso de nuestro protagonista pues él es japonés y así lo parece, pero el nombre es el que crea esa idea en los demás. Pero a pesar de esto y gracias a su esfuerzo, consigue triunfar, tener un trabajo que le gusta y ganarse bien la vida.

Pero, ¿qué puede enturbiar la paz de este japonés modélico? Pues sí, una mujer adicta a las compras. Ole tú.

Se ríe Murakami de las femmes fatales, aquí tenemos a una que consigue que su marido casi rompa las tarjetas de crédito de tanto comprar. No sé, me parece una burla a la mujer: Él trabajador, ahorrador, centrado en lo suyo. Ella, con un trabajo temporal, se lo gasta todo comprando y ni siquiera lo necesita. No puedo con esto.

Y sí, luego está el sentimiento de soledad del artista, como lo supera a través de la creación... pero también veo mucho egoísmo ahí, sobretodo en el caso del padre, únicamente interesado en él, sus deseos y su música.

Tony parece darle una oportunidad al amor y mira que tenía una vida deseable en -casi- todos los aspectos pero esa debilidad tiene sus consecuencias y puede devolverle de nuevo a la soledad, esta vez será incómoda, dolorosa. Y para paliar este dolor, lo hará buscando a otras mujeres que tengan las mismas medidas que su esposa. Y sí, he dicho medidas.

Basada en Tony Takitani hay una película del director japonés Jun Ichikawa, por si queréis darle una oportunidad. Por mi parte no creo, ya la historia me indignaba a medida que la leía y no sé si quiero ver lo mismo en una película de dos horas.
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Se me ha hecho muy corto.Puro Murakami tratando alguno de los temas más relevantes en sus libros:"Jazz",la "Soledad",la "Muerte";todo ello delicadamente expuesto.La edición del libro muy buena con unas preciosas Ilustraciones!!.

Este es un relato corto escrito en 1983, se encuentra en el libro de cuentos “Sauce ciego, mujer dormida” publicado en 2006. Esta nueva edición publicada en 2019 como un solo libro, acompañada del maravilloso trabajo de ilustración de Ignasi Font, crea una conexión mágica entre narrativa literaria y visual.

Ese toque tan propio del autor con el que haciendo uso de un lenguaje sencillo y cotidiano logra hacer sumir al lector en sentimientos profundos de soledad y desarraigo, sin caer en contemplaciones lastimeras, es el atractivo para que sean poco los minutos que se tarde en leer este relato, y también es el motivo para querer leerlo una y otra vez.

Tony Takitani es una historia de soledad pura, cruda y dura, pero también de una soledad abrazada de forma diferente por los rasgos de una cultura tan opuesta a la nuestra como lo es la oriental.

Por medio de sus personajes, que son muy pocos, logramos enfrentarnos a una serie de rostros muy diferentes de la soledad, la auto impuesta como forma de vivir o sobre vivir, la aceptada con naturalidad, como si no hubiese otra forma de vivir, la soledad del que se refugia en sus pasiones, la soledad inconsciente y la consciente, la soledad del que pierde la soledad, la del desarraigo, la del luto y la que deja el autoabandono.

Una historia bellamente introspectiva, como siempre acompañada de la música que con solo nombrarla se puede escuchar y que es un personaje en si misma.

Un corto relato de Murakami, como corta es la visión de la soledad, como solitaria es la percepción de ser diferente.
Una mirada diferente a la soledad, como una suerte de impronta, como una especie de destino. Como una marca de familia.
Una óptica diferente, observar a través de un lente la propia soledad, obviando lo que escapa a los márgenes del objetivo, alterada por una sombra que fugazmente transita por el para desaparecer llevándose el color y brillo, y dejando solo una más opaca sombra de la misma soledad, reducida al espacio personal.
Corto, directo y contundente, como un buen golpe de Knock-out. Reforzado por las ilustraciones ( de Ignasi Font) , que , lejos de atajar o paliar la soledad la vuelven más evidente.
Historia atípica de Murakami, sin gatos, sin comida, sin escarceos sexuales,
¿Puede haber mayor sensación de soledad y abandono ?

El tercer relato que leo de Murakami y como con todos me ha dejado pensando después de haberlo terminado. Si con Sueño sentí que el final me dejaba a medias, el de este libro me dejó con ganas de más.

Es una historia que trata algunos temas como el paso de tiempo, el consumismo, pero sobre todo habla sobre la soledad. La soledad del protagonista y como uno se acostumbra a estar solo. También nos habla de perdida y del valor que le damos a las personas cuando realmente escogemos estar con ellas. Ha sido una historia interesante, corta pero intensa. Yo os recomiendo este relato sin dudarlo.

Me gustó y las ilustraciones son bellísimas pero desde que leí Kafka en la orilla, libro que me pareció un flash, no siento el mismo chispazo con Murakami. Quizás tenga que optar por otra de sus novelas surrealistas. de todas formas, me agradó volver a leer algo de este escritor.

Un relato de Murakami que habla sobre la soledad. Lo fácil que es acostumbrarte a ella cuando no has conocido prácticamente otra cosa y lo difícil que es volver a ella cuando has estado acompañado. Una historia, como siempre, muy bien contada y con unas bellas ilustraciones.

Vais a leer un maravilloso relato increíblemente ilustrado por Ignasi Font. Escarbamos y peleamos por cosas que no tienen importancia mientras las que son importantes se nos escapan. Haruki Murakami nos dejará una brecha abierta con su narración. Intenta detenernos de vez en cuando en la lectura para que vivamos la quietud del vacío al que nos va acomodando. Antes de conocer a Tony Takitany sabremos de su padre, un japonés trompetista de jazz. Ambos viven una vida muy solitaria. Sin ellos saberlo tienen más en común de lo que creían. Pero la soledad de Tony terminará cuando se enamore de una chica amante de los vestidos.

Una historia que le da un nuevo sentido a la soledad. Contada de una forma simple, apenas necesita cien páginas. Fue directo y no alargó por alargar dejando en pocas palabras imágenes y sentimientos muy fuertes, que se quedarán retenidos durante mucho tiempo en nuestra cabeza. No hay ningún misterio, ni sorpresas, nos habla de ese vacío interior, esa melancolía a la que se podría poner remedio, pero por el motivo que sea muchas veces nos amarramos a ella. Tony, cuando se enamora, se da cuenta de la opresiva que era esa soledad en la que vivía anclado. Pero toda relación amorosa lleva un peligro y aquí comenzará un drama psicológico. Murakami mueve a sus personajes en ese estado de ensoñación tan característico suyo. En cierta forma nos mantendrá engañados, haciéndonos creer que no pasa nada, igual en los siguientes capítulos todo cambia y nosotros lo creemos. Seguiremos leyendo esperanzados porque nos está narrando dentro de una escritura realista lo absurdo de la vida, y la vida da muchas vueltas. Pero pronto sospecharemos que esto no acabará como teníamos pensado, por una tristeza de fondo que no termina de marcharse.

¿Qué nos amarra a la vida? Haruki Murakami va más allá y nos recuerda que nacemos solos y acabamos muriendo solos. Aunque pongamos a otras personas a nuestro alrededor, estas pueden marcharse bien voluntariamente o por una tragedia. ¿Y qué nos queda entonces? ¿Poner a otra en su lugar? ¿Vivir de recuerdos? Nuestro autor opta por otra salida más dura, más cruel, pero si nos detenemos fríamente a pensarlo podría ser la mejor opción. Las pertenencias son simplemente cosas, lastres que dejamos a nuestro paso, nunca seremos de nuevo nosotros, aunque allí hayamos dejado nuestra huella u olor.

El célebre escritor japonés nos invita a reflexionar que hay personas que simplemente están predestinadas a vivir solas y aunque otros vivamos en pareja, en el fondo seguimos viviendo en soledad ya que nadie nos va a conocer realmente como somos, ni nosotros a ellos. Podemos dormir en la misma cama, disfrutar de las mismas cosas, tener los mismos miedos, pero por la noche, cuando soñamos, somos nuevamente individuales. Con apenas diálogo narra una historia triste de soledad y la falta de afecto en la sociedad actual.

Leer a los maestros siempre es un placer. Leer a Murakami debería ser una obligación.

CATALÀ:

Feia temps que no llegia res del meu autor preferit i m'he decidit per aquest conte il·lustrat, inclòs dins el seu llibre de contes El salze cec i la dona adormida, i que Empúries Narrativa ha publicat per separat.

Adoro la manera de narrar de Murakami, ho sabeu, i amb la història de soledat de Tony Takitani he tornat a gaudir d'allò més. He sentit la tristesa de Tony i la seva necessitat, encara que he trobat a faltar aquella atmòsfera mig onírica, mig real, a la que ens té acostumats l'autor.

Les il·lustracions d'Ignasi Font són precioses i, tot i que no segueixen el fil de la història, la complementen amb imatges ben trobades de solitud.

Vosaltres sou dels que heu entrat al món Murakami o bé dels que no heu pogut travessar el mur? Us agrada la seva obra o no us agrada?

ESPAÑOL:

Hacía tiempo que no leía nada de mi autor preferido y me he decidido por este cuento ilustrado, incluído en su libro Sauce ciego, mujer dormida, y que Tusquets Editores a publicado por separado.

Adoro la manera de narrar de Murakami, lo sabéis, y com la historia de soledad de Tony Takitani he vuelto a disfrutar mucho. He sentido la tristeza de Tony y su necesidad, pero he hechado de menos aquella atmosfera medio onírica, medio real, a la que nos tiene acosrtumbrados el autor.

Las ilustraciones de Ignasi Font son preciosas y, aunque no siguen el hilo de la historia, la complementan con imágenes de solitud.

Vosotr@s sois de l@s que habéis entrado en el mundo Murakami o de l@s que no habéis podido cruzar el muro? Os gusta su obra o no?
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