La casa infernal

Cada año alrededor de octubre y noviembre leo libros de horror así que este fue la selección para el 2017. Llevaba mucho tiempo queriendo leer este libro y apenas ahora lo consigo.
Personaje favorito: Florence y Benjamin. Me gustó su amabilidad.
Personaje que no me gustó: el doctor Barrett, me pareció necio.
Lo que más me gustó: La manera en que todo se empieza a manifestar en la casa y como cada uno de los personajes se va involucrando.
Lo que no me gustó: el final… lo sentí… simple y un poco apresurado… no sé.
Es el primer libro de Matheson que leo. Me gustó pero al principio me recordaba mucho a La Maldición de Hill House de Shirley Jackson. Obviamente los embrujos que obran en cada libro son de una diferente naturaleza pero aún así me lo recordaba.

Lo siento, criaturas, pero no encuentro aún la novela de terror que me cause esa emoción y no me deje dormir por las noches. Pero lo voy a seguir intentando.
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Hablemos de esta novela.
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¿Qué es lo que me ha gustado?
♥ La ambientación. Creo que este guionista es muy hábil a la hora de "decorar" las situaciones y las escenas donde se van a desarrollar los acontecimientos, aunque a veces se recrea en ciertos detallitos que dices...¿era necesario?, pues no, pero bueno...
♥ La figura del científico. Cuya misión es intentar desmantelar y/o dar explicación a los supuestos sucesos paranormales de la casa. Esa contraposición siempre me ha gustado, sobre todo cuando la ciencia descubre la maquinaria de los embaucadores que quieren enriquecerse a costa de la ignorancia y fe del creyente en estos fenómenos.
♥ Las escenas violentas y de contenidos sexuales explícito. Sin tapujos. Claro, clarinete. Me ha gustado que no se anden con remilgos porque en ciertos momentos me comenzaron a resultar perturbadores y eran necesarios para conocer la vida loca de Belasco con sexo, drogas y violencia, al más puro ambiente de secta satánica.
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¿Que no me ha gustado?
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♠ En general me aburrió muchísimo. Su lectura me causó un bloqueo lector (cosa ya grave en mí). Su narrativa sosa, espesa, se me hizo imposible digerirlo. de hecho hasta me descolgué del grupo de lectura.
♠ Incongruencias, giros previsibles y un final de carambola quedaba risa en lugar de miedo. ¿Qué me estás contando? Pues me desinfló totalmente.
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Para leer este libro prefiero ver la película The haunting (La guarida, 1999), así me alegro la vista con Liam Neeson.
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Recordad que es mi percepción personal y mi opinión en el momento de lectura, con ello no digo que sea una mala novela, pero a mí no me ha llegado de la manera que tenía que hacerlo.

Hacia mucho tiempo que tenia este libro en mi lista de pendientes,por fin le he dado salida y me ha dejado con diversas sensaciones.

Por una parte ,miedo como tal,no lo he sentido,pero hay que destacar que es un libro que se escribió en 1971 y eso influye bastante.

Hay que ir por partes,la primera es que obviamente el terror o en este caso el subgénero de las casas encantadas,ha cambiado con los años,ya no es lo mismo ver según que libro o película de antes a como son las de ahora,obviamente todos cambiamos.

Seguramente si hubiera leído este libro en los 80 me hubiera dado miedo y lo hubiera disfrutado mucho,pero ahora después de tanto leído y con el pasar de los años ,pues ya no.

Aquí encontramos lo que antes se veía muchísimo tanto en terror como en otros géneros,la hipersexualización de los personajes femeninos,mucho enfoque en esos términos,donde al personaje femenino casi siempre era a quien le ocurría lo peor,una especie de castigo por ser mujer,por su sexo etc..

Ya de entrada mucho cliché en todos los personajes,esto influye en que casi predices media historia,sabes que le toca a cada uno.

La novela en si ,se deja leer,aunque me ha recordado bastante a la novela de la Maestra Shirley Jackson,"La maldición de Hill House"(salvando las distancias),incluso ciertos acontecimientos también me recordaban bastante a la película "El ente".

Me ha gustado pero obviamente si este libro lo hubiera ledo hace veinte años lo hubiera disfrutado y sufrido mucho más.

Llevaba mucho tiempo buscando un libro que me diese miedo y creo que por fin puedo añadir el primer candidato a mi lista del terror; “𝗟𝗮 𝗰𝗮𝘀𝗮 𝗶𝗻𝗳𝗲𝗿𝗻𝗮𝗹” de 𝗥𝗶𝗰𝗵𝗮𝗿𝗱 𝗠𝗮𝘁𝗵𝗲𝘀𝗼𝗻.

Una 𝒄𝒂𝒔𝒂 𝒆𝒏𝒄𝒂𝒏𝒕𝒂𝒅𝒂 de la que pocas personas han conseguido salir con vida y cuatro extraños dispuestos a llevar a cabo una investigación paranormal. La premisa ya prometía, aunque yo iba con pies de plomo porque había leído algunas opiniones negativas. Pero el terror es relativo y en este caso creo que me ha beneficiado ir con las expectativas bajas, porque he disfrutado mucho de la lectura.

La ambientación me parece un diez de diez. Mientras leía podía imaginarme cada recoveco de la siniestra Casa Belasco, los sonidos, los colores… el autor juega muy bien con las sensaciones para trasladarte al escenario de la novela.

Los personajes también están muy bien perfilados, aunque hay uno en concreto cuyos diálogos me aburrían soberanamente al meter aspectos muy técnicos que me sacaban de la lectura.

Me hubiese gustado que profundizase más en la historia de la casa y su propietario, quizás por falta de información el final me pareció un poco repentino y simple.

Pero sé que estáis esperando el gran veredicto; ¿𝙚𝙨 𝙪𝙣 𝙡𝙞𝙗𝙧𝙤 𝙦𝙪𝙚 𝙙𝙖 𝙢𝙞𝙚𝙙𝙤? Veréis, al leerlo me daba mal rollo y me ponía los pelos de punta, pero no me dio miedo al momento. Fue después, una vez cerraba el libro y la información se quedaba en mi subconsciente, llegando a provocarme más de una pesadilla 👻

⚠️Todas las valoraciones vertidas en este espacio son personales. Cada lector es un mundo con gustos propios, y se agradece respeto y tolerancia por las opiniones diferentes. Gracias.

“Edith miró de reojo a Fischer. Estaba a los pies de la cama, mirando a Florence con una expresión vacía. de pronto, sintió que un escalofrío le recorría la espalda ¿Realmente había algo allí abajo?” ~ La casa infernal de Richard Matheson.

La casa infernal es un clásico de la literatura de terror que, quizá por ser clásico, no me ha dado nada de miedo que se diga. A estas alturas ya estamos más que curtidos como para que los fantasmas de una casa embrujada que van apaleando a los huéspedes y haciendo de las suyas nos hagan saltar de la silla.

Dicho esto, el libro nos cuenta la historia de una casa embrujada a la que acuden dos mediums –uno el único superviviente de una masacre que se produjo en ella hace años–, un médico que está estudiando fenómenos paranormales y su esposa. Durante cuatro días han de encontrar pruebas de la vida más allá de la muerte pero lo que van encontrando es una casa poseída por un fantasma con muy malas pulgas.

La verdad es que el libro está muy bien escrito, es entretenido y lo he disfrutado, sobre todo en los dos últimos días que se corresponden con los dos últimos capítulos y que son los que concentran el rock'n'roll de la historia. El desenlace… bueno, pues, me da la risa solo de pensar en él pero no quiero comentar más para que os animéis a leerlo, o no os desaniméis en el caso de que le tengáis ganas, porque ya sabéis que si yo fuese ese fantasma os diría “leed, malditos, leed”.

Me ha sorprendido mucho este libro pero para mal.
Había oido hablar mucho de él, de que era un imprescindible de terror y de casas encantadas pero lo que me encontré, sí, fue terror, pero demasiado sexo, a mi parecer innecesario.
No me considero una persona mojigata pero si quiero leer terror, espero terror, si busco otra cosa, no elegiría este libro.
Por eso mi puntuación tan baja.

Esta fue relectura de una novela que leí hace mil años, cuando descubrí al autor con Soy Leyenda, y que me dio bastante mal rollo. Y sigue cumpliendo.

Si buscáis críticas, vais a ver de todo un poco, desde los que la ponen como una de las novelas más terroríficas, hasta los del “no es para tanto”; vamos a ver, el terror, como el humor, es algo muy relativo y súper personal, pero lo que está claro es que es un clasicazo del género y es más que merecido.

Tengamos en cuenta que es una novela de principios de los setenta (1971), donde estaba súper en auge la temática y sucesos referentes a espíritus, demonios, posesiones y exorcismos.

Así, nos vamos alegremente a la Casa Belasco, en Maine, con un grupo de estudiosos y no-estudiosos de estos temas. Es una casa en la que nadie sabe qué ocurrió con exactitud, más allá de actos blasfemos de lo más variopinto, aparentemente orquestados por el anfitrión Belasco… y nadie ha conseguido sobrevivir más de unos pocos días dentro.

Están, por un lado, un físico que estudia la parapsicología, la mujer del mismo, que se emperra en ir porque “¿por qué no?”, una médium mental y un médium físico, este último es el superviviente de la investigación ocurrida en la casa treinta años atrás, que causó gran revuelo por entonces.

Esta gente va ahí debido a que un millonario moribundo tiene el capricho de saber si hay vida después de la muerte –también muy típico-, así que allá que se lanzan, aún a sabiendas que se considera la “casa más embrujada del mundo”.

Poco a poco, con una tensión brutal y realmente bien llevada, vamos siendo partícipes de lo que los titulares de prensa prometen: que la casa tiene el poder de corromper a todo el que está ahí, aprovechándose de sus debilidades y llevándolas hasta el extremo.

La ambientación es simplemente genial, súper conseguida y prácticamente a tiempo real, pues el autor nos va marcando días y horas cada ciertas páginas.

Es un autor que me gusta mucho y que merece mucho la pena conocer, aunque no se sea amante del género, y la de las casas encantadas es una temática que siempre me ha llamado la atención, generándome mucha curiosidad… así que era evidente que este libro iba a caer sí o sí.

Tenía miedo que con la relectura perdiera, ya que tenía muy buen recuerdo de él, pero en absoluto, las sensaciones han sido tal y como las recordaba: angustiosas y positivas a partes iguales. Porque Matheson era un crack y desde luego sabía crear ambientaciones opresivas y malrolleras.

Un imprescindible si os gusta el terror.


Finalizo comentando que tiene adaptación cinematográfica, bastante apañada, dirigida por John Hough en 1973.
Enlace: https://locaporincordiar.blo..

Las casas nunca fueron tan peligrosas ni tan terroríficas.
La visión de Matheson de una casa embrujada es intensa, paralizante y sumamente cruel.
El libro lleva la tensión a un punto de no retorno, haciendo dudar al espectador en todo momento. ¿Qué será de los visitantes a está casa? ¿Saldrán con bien de ella?
Sólo lean y lo sabrán.

Como bien indica la sinopsis cuatro son los protagonistas que aparecen, aunque yo añadiría uno más...la misma casa Belasco. Y es que para mí en todo momento e incluso antes de que los personajes pongan un pie en la casa, está ya parece ejercer su influencia con tan solo nombrar-la o rememorar su historia, o mejor dicho historial. Y es que la casa como bien se irá descubriendo, se cobró un número incontable de víctimas, que iban desde ricos aburridos y con ganas de probar cosas nuevas, hasta jóvenes aspirantes a artistas.
Todos ellos se ven afectados no solamente por la negatividad de la casa, sino sobre todo por la perturbadora, fría y despiadada influencia de Emeric Belasco el propietario de la propiedad, que se encargó de crear su particular infierno en ella. Un lugar en que la única regla era precisamente que no había ninguna. Se podía ir y hacer lo que se quisiera en la casa, y cuando digo hacer lo que se quisiera, me refiera a hacer todo aquello que más desearas por más perturbador u horroroso que fuera, aunque esto pudiera llegar a "perjudicar" a los demás huéspedes. Como bien dice Belasco en una vieja grabación a través de un gramófono: "que cada uno se las apañe como pueda".

En cuanto al grupo protagonista nos encontramos con el doctor Barrett un físico y estudioso de la parapsicología. le acompaña su mujer Edith, la médium espiritualista Florence Tanner y el único superviviente de la "catástrofe" de 1940, Benjamin Franklin Fischer (Fischer). Todos ellos tienen su particular punto de vista sobre los fenómenos que allí acurren. Mientras que el doctor pretende demostrar que no existen los espíritus, la médium Florence que es altamente emotiva, no solo investiga sino que anima a los espíritus a manifestarse. En cambio Fischer intenta que al enfrentarse a la casa pueda superar su miedo a ella, la misma que le arrebato sus habilidades síquicas, y su seguridad, tras sufrir una crisis nerviosa. Otro caso aparte es Edith la entregada mujer del doctor Barret, que esconde multitud de inseguridades, que la casa y sus espíritus, no dudaran en utilizar en su contra.
La casa infernal contiene todos los ingredientes de una novela de terror clásica. Una lectura que desde el principio hasta el final, te hará sentir que los clásicos siguen poseyendo el atractivo del terror más ancestral. El mismo que hace volar tu imaginación, al ver una vieja casa abandonada.

«La Casa Infernal» es una obra literaria de terror escrita por Richard Matheson y publicada en 1971. A lo largo de sus 312 páginas, el autor teje una trama que explora el misterio de la vida después de la muerte, llevando a los lectores a un escalofriante viaje hacia lo desconocido.

La premisa de la novela es intrigante: un multimillonario moribundo decide contratar a un grupo de expertos para investigar una casa encantada y desvelar si existe vida más allá de la muerte. Sin embargo, como es de esperar en un relato de terror, las cosas no tardan en torcerse de maneras inimaginables. Matheson juega hábilmente con la curiosidad y el miedo inherentes a la exploración de lo sobrenatural.

Desde el principio, el lector se siente atraído por la promesa de una experiencia aterradora, especialmente después de las alabanzas de Stephen King sobre el libro. Sin embargo, «La Casa Infernal» podría no cumplir completamente con las expectativas de los amantes del terror más hardcore. Aunque la novela presenta una sólida ambientación y un ritmo adecuado, el factor miedo podría no estar a la altura de su reputación. A pesar de momentos claustrofóbicos y un puñado de personajes bien desarrollados, la sensación de auténtico temor puede resultar elusiva para algunos lectores.

Uno de los puntos fuertes de la historia son los giros de guion que Matheson utiliza con maestría. Estos momentos estratégicamente ubicados elevan la intensidad de la narrativa y mantienen a los lectores en vilo. Los personajes, aunque escasos en número, están hábilmente trazados y aportan profundidad a la historia.

No obstante, «La Casa Infernal» no está exenta de imperfecciones. Algunas incongruencias en la trama pueden restarle credibilidad al mundo creado por el autor, lo que puede resultar frustrante para los lectores más exigentes. Estos detalles pueden desviar la atención de la experiencia general de lectura y dejar un sabor agridulce en la percepción de la obra.

En resumen, «La Casa Infernal» ofrece una trama intrigante, una ambientación efectiva y giros de guion emocionantes, lo que la convierte en una lectura valiosa para los aficionados al terror. A pesar de algunas imperfecciones, esta novela de Matheson es un recordatorio de su habilidad para mantener a los lectores en vilo y llevarlos a los rincones más oscuros de la psique humana.