Por si las voces vuelven

Valiente, sincero, arriesgado, diferente, divertido, profundo, necesario... son tantos los adjetivos que le puedo poner a este libro que no sé por dónde empezar a contaros lo que me ha parecido sin contaros nada.

Ya sabéis que me gusta acercarme a los libros a ciegas y de éste había oído algo pero muy poco. Sí sabía el tema central pero no sospechaba qué me iba a encontrar dentro. Y he descubierto a un @angel_mg que no esperaba. Una declaración de sinceridad como pocas y además acerca de un tema del que cuesta tanto hablar como la salud mental. Y por eso mismo creo que es necesario este libro y su lectura, para visibilizar un problema que afecta a tanta gente y para que esas personas puedan encontrar ayuda y acompañamiento.

Ángel nos cuenta cómo vivió él esa locura, ese brote psicótico, y narra episodios tremendamente angustiosos pero de una forma tan cómica que a veces tienes que hacer un esfuerzo por darte cuenta del problema que hay. Además la narrativa también es bastante loca ya que hay muchos saltos en el tiempo y muchas divagaciones mientras narra un suceso. Me parece una narrativa muy particular, auténtica y que funciona.

Hay anécdotas, hay reflexión, hay relatos de momentos duros y otros más divertidos... hay de todo. Pero todo ello contado desde su perspectiva y esto es lo más interesante. No hay perspectivas médicas, sino vivencias. Y sobre todo una historia sólo suya, única, que evidentemente será muy diferente de cómo lo viven otros. Él ha sabido superar esa etapa y sacar lo bueno de ella, ojalá todos pudieran hacer lo mismo.

En definitiva... me ha sorprendido, me ha gustado y he pasado muy buen rato leyéndolo. Por cierto, he leído muy buenas críticas al audiolibro, y aunque no los contemplo en mi vida, creo que éste es el único libro, hasta el momento, que quizás sí merezca la pena ser escuchado ya que te lo cuenta el protagonista real.

Bravo por esta muestra de valentía Ángel. ¡Punto para los locos!

No me gustan los libros de no ficción pero al ver que tenía tan buenas reseñas me animé a escucharlo y me ha encantado. Creo que a diferencia de la mayoría de los libros, éste es mejor escucharlo que leerlo ya que te lo va narrando el autor y va metiendo chascarrillos que hacen el libro muy ameno. Además es muy cortito así que se pasa volando. Muy recomendable.

No es nada fácil hacer la reseña de un libro así, por eso, voy a ser muy breve.

Este no es el tipo de libro que yo suelo leer, ni mucho menos, en realidad creo que huyo de todo lo que no sea ficción porque sé que puede llegar a ser demasiado personal y que me puede afectar de más. Pero era Ángel Martín, a quien conocí gracias a Sé lo que hicisteis, con quien tanto me he reído y quien todas las mañanas me dice que me quiere.
Y al final, me he sacado la espinita poniéndolo el primero en esta plataforma de audiolibros que me dio unos meses gratis.

Ángel nos cuenta entre anécdotas y alguna bromita que te saca la sonrisa, como suele hacer con su humor, las experiencias que vivió cuando tocó fondo y todo lo que ha aprendido gracias a eso.
Creo que es lo que más me ha gustado, es muy claro con todo lo que a él le pasaba, pero lo trata desde ese punto de vista positivo que te hace falta cuando estás en medio de ese proceso en que tu salud mental de un modo u otro está en juego.

Tenía yo razón con que me iba a afectar y terminé llorando con la narración del final.

Punto para los locos.

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Mi primer recuerdo de Ángel Martín fue en un canal donde contaba un monólogo que trataba de Psicofonías y espiritismo. Me gustó tanto y fue tan divertido que cuando estaba de bajón me lo ponía y no podía evitar reír y olvidar todo por un momento. Deje de seguirle la pista cuando entró en televisión, además mis horarios no eran compatibles con su programa. Luego las circunstancias personales me cambiaron y cuál es mi sorpresa cuando veo su libro “Por si las voces vuelven”.
El libro es puro estilo Ángel, con sus toques de humor, pero leerlo me ha hecho plantearme muchas cosas. Es cierto que he reído y llorado, que por triste que suene esto, en algunas partes me he llegado a identificar con su historia.
Él se abrirá y nos contará cómo fue cambiando todo en su cabeza, de una forma que a mí me ha sorprendido, porque a más de uno se nos puede caer la caja y vernos en esa situación. También me parece increíble la ayuda que recibió por su pareja, yo puedo garantizar que no todo el mundo tiene esa ayuda y que en una situación más leve en lugar de ayudar te echan como digo yo la mano al cuello, o te acaban hundiendo en la miseria. Porque las personas que te rodean y habló de las más cercanas llega un momento en el que se piensan que si lloras o tienes un mal día es que eres una persona débil, porque uno sabe cuánto dura un resfriado, la recuperación de un esguince, una operación… todo esto más o menos tenemos una idea de cuándo te pondrás bien y se verá una mejoría. Pero todo lo relacionado con la salud mental…. eso es otro tema. O no te puede estar pasando a ti o con el tiempo que llevas no entiendo como no estás ya bien. Recomiendo a todo el mundo leerlo, para que entiendan a las personas en estas situaciones y como guía por si las voces llegan.

En primer lugar quiero destacar la valentía del autor de contar su historia. Porque, sí, es su historia, su vivencia de una locura que lo tuvo fuera de juego durante un tiempo. Creo que no todos hubieran contado su problema y mucho menos de la manera que lo ha hecho él, poniendo en primera línea las enfermedades mentales a las que no se les da mucha visibilidad pero que están ahí.
Una historia narrada en primera persona de una manera amena, coloquial y ligera, con alguna pincelada de humor, donde nos cuenta la historia de su locura, las voces en su cabeza y mil anécdotas más junto con consejos que te hacen reflexionar y plantearte ciertas cosas.
Desde mi "cordura" he podido hallar cosas muy lógicas realizadas o pensadas desde su "locura" (hasta estando loco se encuentra la lógica).
Si hay algo que quiero destacar es la gratitud que muestra Ángel en todo momento hacia todo aquel que estuvo ahí para apoyarle (en especial hacia su pareja) y hacia el personal sanitario que lo estuvo tratando y cuidando de él durante su ingreso. Creo que es un acto que le hace grande.
Hace unos meses, cuando estuve en su firma de libros en Alicante, la chica que estaba tras de mí en la cola me dijo "es que escribe tal y como habla" (la chica estuvo leyendo el libro mientras esperábamos), ambas nos reímos. Cuando empecé a leerlo y avancé un poco me acordé de esa chica y pensé exactamente lo mismo. Es más, estuve leyendo toda la historia con su voz (no pude evitarlo) 🤷
No sé si será por la situación por la que estoy atravesando en estos momentos pero el libro me atrapó y lo hizo de tal manera que mi valoración no puede ser menos que la que le doy.
¡GANAN LOS LOCOS!

A lo largo de mi vida he pasado por una psicóloga para adolescentes, un psiquiatra de la Seguridad Social, terapia gestalt y psicología online sistémica. He tratado mis periodos de inseguridad, depresión y ansiedad con charlas, con terapias grupales, escribiendo diarios, y con Lorazepam y Esertia prescritos.

Reconozco que al principio me daba miedo que los relatos más autobiográficos fueran criticados, pero con el tiempo he aprendido a distanciarme de los textos.

El dolor, la tristeza y la culpa son algunos de los temas que siempre me han acompañado y por los que todavía siento -sentimos- cierto estigma. Aún hay dificultades y reparos a la hora de abrirnos respecto a un trastorno mental, cosa que no nos ocurre con una dolencia física.

Leer a Ángel Martín es encontrarte en ese punto donde convergen la realidad y la ficción, lo tangible y lo intangible, lo visible ante un espejo y menos evidente por su impacto emocional.

“¿Me caen bien mis amigos? ¿Quiero de verdad a mi familia? ¿Me gusta lo que soy?”

“Por si las voces vuelven” es el relato de lo que sufrió el autor en 2017 cuando, según sus propias palabras, se volvió loco. Sorprende por ser capaz de explicar con un lenguaje tan natural y cotidiano cómo su mente justificaba cada una de las acciones que le llevaron a acabar ingresado en la unidad de psiquiatría de un hospital durante 10 días.

“Lo más duro no fue estar loco, lo más duro fue volver a la cordura”.

Si el autor te gusta como humorista, no puedes perderte el formato audiolibro narrado por él mismo. Una experiencia conmovedora llena de risas, susurros, recomendaciones y lágrimas. Un colega hablándote al oído y rompiéndose un poquito.

He aquí un auténtico ejercicio de autocrítica, valentía y apertura en canal para mostrar todo lo que le ha pasado, para que tomemos conciencia de una pandemia aún más generalizada que la vivida en los últimos años y un esfuerzo para decir en voz alta todo lo necesario para empezar de nuevo.

“No necesitas esperar a tocar fondo para reconstruirte desde cero”.

Por último, y para mí misma -si me lo permitís-, una frase que escribí en uno de mis libros y que vuelvo a repetir: No sería lo que soy, si cambiase lo que fui.

Hoy por hoy, nunca he pasado por la locura, pero si que he visto a alguien rozarla y casi palparla. No he podido parar de llorar en algunos momentos, porque no tenía edad para entender que ocurría, pero ahora sí, y lo cierto ex que esta obra me acercó a esa persona aunque ya no esté y me permitió darle un achuchón astral. POR SI LAS VOCES VUELVEN

Ángel Martín me ha dejado a pesar de ser un poco agrio un buen sabor de boca. Me ha permitido comprender cosas que me faltaron por inexperiencia y edad. Empatía, paciencia y aprender a retirarme cuando soy parte del daño si no soy capaz de comprender que a veces simplemente hay que estar y callarse la boca. Tengo mucho más por interiorizar, es un trabajo personal, pero por sobre todo, solo puedo decir y dar la razón a una cosa. Punto para los locos. ¡Feliz lectura!
Enlace: https://locasdelromance.blog..

Hace unos años, Ángel Martín sufrió un brote psicótico. Dice que “se rompió por completo”, porque eso es lo que hace contigo la locura, te rompe y te desarma en pedacitos tan diminutos que luego es imposible volver a reconstruirte del todo.

La valentía y la transparencia con la que Ángel cuenta su historia es sorprendente y aterradora a la vez. 🎙 Y si me permitís el consejo, gana mucho escuchándolo en audiolibro narrado por el propio autor, porque su voz y sus “comentarios añadidos” son un plus que a mí me transmitieron muchísimo.

El testimonio de Ángel es un retrato necesario sobre salud mental, no solo para quienes han pasado o estén pasando por algo similar, si no también para quienes estamos cerca y podemos llegar a entender un poco mejor a quienes lo padecen.

Y es que por experiencia próxima, he sentido familiares y conocidas varias situaciones que plantea en su libro, situaciones que he vivido con alguien cercano y que, gracias al autor, ahora entiendo un poco mejor.

Así que gracias Ángel, por la claridad, por lo aterrador, por lo emotivo y por lo valiente de este relato. Gracias, porque este libro sin duda es un 𝙥𝙪𝙣𝙩𝙤 𝙥𝙖𝙧𝙖 𝙡𝙤𝙨 𝙡𝙤𝙘𝙤𝙨.

Tenía las expectativas muy altas sobre este libro y, la verdad, es que no me ha defraudado en absoluto.

Ángel Martín ha tenido la valentía de desnudarse y contarnos en primera persona cómo funcionaba su cabeza cuando sufrió un brote psicótico.

Sin duda, no será para ti este libro, si no estás preparado para intentar sumergirte en infinitas tramas y una cantidad ingente de información que pasa a toda velocidad por tu cabeza.

Para mí, que llevo conviviendo con la enfermedad mental muy de cerca durante muchos años, me ha ayudado mucho a entender cómo funcionan los pensamientos de la persona cuando está en el hoyo. Cúan ignorantes podemos ser los más cercanos, a pesar de vivir experiencias durísimas de las que hemos aprendido poco o nada...

Gracias, Ángel Martín, por abrirte en canal, por mostrarnos parte de tu locura en la que muchos veremos reflejados a nuestros familiares (o a nosotros mismos). Gracias por poner sobre la mesa situaciones que pueden pasarnos a cualquiera. Pero, sobre todo, GRACIAS, porque la reconstrucción desde cero no es sólo para las personas que tocáis fondo; también lo es para las que os acompañamos. Cambiar las gafas con las que os miramos y empezar a entenderlo todo...

Querido Ángel:

Gracias por este libro. Porque no sé si estuve loca, tal vez más que cuerda, pero sí sé que estuve perdida y tuve que reconstruirme desde cero. Sí sé que necesité ayuda.

No temía que otra persona saliera del espejo, pero deseaba no ser esa que proyectaba.
No hablaba con mi Yo del futuro. El del presente supo cómo minar mis ganas de saber cómo me iría planteándome hipótesis angustiosas.
No descifré el Universo. Para mí era un galimatías en el que no sabía cómo ubicarme, ni me sentía preparada para ello.

No temo que vuelvan las voces, solo que lo haga una. La única. La protagonista absoluta de mi sufrimiento. Aunque, en realidad, nunca se ha ido, sencillamente he aprendido a dialogar con ella o a ponerle un puntito en la boca de vez en cuando si es necesario. Ese aprendizaje ha sido agotador.
El Sr. Gris apareció arrasando y poco a poco, tras muchos años, he ido enseñándole a pasar tranquilo los días en un rincón, mientras yo vivo alerta por si un día decide abandonarlo.

Gracias, Ángel, porque tu libro ha sido un abrazo y me ha recordado que todo lo vivido siempre merece la pena si te ayuda a reinventarte. Gracias porque tuve que tocar fondo para vivir sabiendo que no hace falta tocar fondo.

Transité un desierto y habría agradecido a mi Yo del futuro que le hubiera dado un guantazo al del presente y se hubiera pasado a hablarme de cómo me emocionaría con tu audiolibro. A hablarme de todos los testimonios que en este largo viaje me han acompañado y aún me acompañan.

Gracias, Ángel. Solo puedo decirte eso y las veces que haga falta, porque esto es ¡punto para los locos! y ya va siendo hora de que suba nuestro marcador.

Un abrazo enorme.
Ana

PD a todos los que habéis llegado hasta aquí: Este libro visibiliza la salud mental y contribuye a la eliminación de estigmas. Es un testimonio necesario y que disfrutarás mucho si decides darle una oportunidad al audiolibro (narrado por el autor) si te gusta ese formato.