Editorial Alba publica la primera gran novela de Dostoievski, un drama social y amoroso que retrata el inagotable universo literario del autor ruso.
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Editorial Alba publica la primera gran novela de Dostoievski, un drama social y amoroso que retrata el inagotable universo literario del autor ruso.
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En esta novela, que fue la primera novela larga del autor, se desarrollan dos historias paralelas a partir del personaje principal y narrador, Iván Petrovich, un joven escritor huérfano que cae en la miseria, quien representa muchos rasgos autobiográficos de Dostoyevski. Por un lado, se desarrolla la partida del hogar paterno de Natasha y el triángulo amoroso entre ella, Vania y Aliosha. Vania, tras la preferencia de Natasha por Aliosha (hijo del príncipe Valkovski), permanece siendo amigo de la pareja. Por otro lado, se desarrolla el encuentro de Vania con Elena (quien luego confesó su verdadero nombre, Nelly), una niña huérfana de 13 años a quien decide tomar bajo su protección luego de rescatar de un destino bastante oscuro lleno de abuso por parte de la casera de su madre muerta de tuberculosis. Ambas historias adquieren mucho paralelismo en varias ocasiones y terminan por unirse de una manera que resalta la importancia del título y permite ver los alcances sociales de la novela: los humillados y ofendidos por las clases y los roles dominantes solo pueden sostenerse en sus valores para enfrentar las desgracias en las que caen. Como es común en Dostoyevski, en la novela se observa una pugna entre el bien y el mal que jamás se resuelve por completo y permite observar la complejidad no solo de las psicologías de los personajes, sus relaciones y circunstancias, sino de la mente y el alma de todos los humanos en cualquiera que sea la situación que se viva.
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‘Humillados y ofendidos’, con la que Dostoievski inicia su madurez literaria, escrita a la vuelta de su exilio en Siberia, es una novela clave para comprender el conjunto de su obra y la Rusia del siglo XIX.
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Entre 1873 y 1881, Dostoievski publicó artículos donde hablaba de todo tipo de temas en el diario “Grazhdanin”, en lo que se dio en llamar “Diario de un escritor”. Durante todos esos años solo publicó cuatro textos de ficción dentro de este diario, y uno de ellos fue “La mansa”, publicado en noviembre de 1876. Él mismo en una nota previa que acompaña a historia no solo te explica la trama que vas a encontrar, sino que cuenta que ha tardado cosa de un mes en escribirlo y que el estilo, un monólogo exhaustivo del protagonista, semeja al utilizado por Victor Hugo en “Último día de un condenado a muerte” (y doy fe de que así es… incluso usa el mismo recurso de no darnos a conocer su nombre y mantiene el anonimato de los personajes). La historia comienza con un hombre velando el cadáver de su esposa, que se ha suicidado pocas horas antes. Este hombre, el narrador, no entiende por qué su mujer se ha quitado la vida, e intenta comprenderlo rememorando cómo la conoció, por qué decidió casarse con ella y cómo ha sido la relación entre ambos durante esos meses. De primeras, él tiene cuarenta y un años y ella dieciséis. Por seguir, desde el principio está decidido a someterla, a menospreciar sus intentos de acercamiento y a guardar un ostentoso silencio con ella. Con eso pretende… pues ni él mismo lo sabe porque se contradice, quiere alejarla por completo para luego impresionarla; se desvive por ella si enferma pero en cuanto sana vuelve a alejarse. Ella observa, calla. Y claro, todo esto desde su único punto de vista, su visión subjetiva, su realidad parcial… intenta juntar las piezas pero ella siempre ha sido, siempre será, una desconocida. Muy, muy recomendable. Enlace: https://www.instagram.com/in.. + Leer más |
Una novela breve que condensa la maestría de Dostoyevski y nos regala personajes complejos y reflexiones profundas. Dostoyevski se ha convertido en uno de mis autores imprescindibles -si no el que más-. Consigue atraparme con su estilo, embelesarme gracias a su forma de bucear en la psicología humana y sacudirme por dentro con la originalidad y fuerza de sus diálogos y la lucidez de su filosofía. No obstante, y a pesar de haber disfrutado mucho de este relato, creo que, por el momento, es la obra que menos me ha impactado hasta ahora. Esto no significa que sea una historia menor, pero por motivos que no sabría explicar muy bien, no ha conseguido calarme tan hondo como el resto. En “La sumisa” (1876) -uno de los últimos textos escritos por el autor mientras trabajaba en su gran obra maestra “Los hermanos Karamázov”-, Dostoyevski nos presenta a un protagonista que relata en primera persona sus sentimientos tras el suicidio de su esposa. Aún sin tiempo para asumir la realidad, el marido realiza un recorrido por su relación, recordando el día en el que conoció a su mujer y algunos de los momentos vividos durante su matrimonio. El narrador es un personaje detestable, miserable y egoísta que parece poner a prueba la vulnerabilidad de la joven y que solo piensa en sí mismo. “La sumisa” queda en un segundo plano. No conocemos su punto de vista, no sabemos qué piensa y, aunque ansiamos descubrirlo, esa incógnita es una de las claves que demuestran la habilidad de Dostoyevski para “jugar” con el lector y adentrarle en los laberintos más oscuros e intrincados de la mente humana. El silencio se configura como el elemento principal de la trama que nos muestra las consecuencias de permanecer callados, de ahogar nuestras emociones y de atormentar así a las personas de nuestro entorno. No conocemos los hombres de la pareja protagonista, pero no importa. Él es uno de los muchos hombres vanidosos y egocéntricos que se exculpan de todo y que justifican su mezquindad. Y ella es una mujer sumida en la soledad más atroz y despiadada. Un monólogo que comienza de manera atropellada pero que va tomando forma y una mayor concreción y claridad hacia el final, “como la vida misma”. + Leer más |
El suicidio de su joven esposa desata en el marido la necesidad de echar la vista atrás y reflexionar acerca de sus vidas en común desde que se conocieron, hasta ese momento A modo de monólogo, como justificándose, nos relata de manera atropellada unos pensamientos inconexos que se mezclan en el tiempo pasado y presente hasta que él mismo logra poner orden y el lector encontrar sentido a lo que quiere explicar Todo esto con el cadáver de su mujer allí, de cuerpo presente, mientras espera a quien traerá el ataúd para llevársela, dejándolo a él temiendo la futura soledad De esta forma solo conoceremos la historia en una dirección, la de él; de ella sabremos que ante la arrogancia, sequedad y egoísmo de su marido ha utilizado el silencio como coraza y castigo. Tremendo como aborda las sensaciones de angustia, turbación y culpabilidad |
La sumisa de Fiodor Dostoyevsky (1821-1881) ¿Cómo llegué a este libro? Fue una recomendación de @alsondeunlibro y @pianobikes La sumisa, publicado en 1876 y escrita mientras Dostoyevsky trabajada en su última novela, Los hermanos Karamázov. Empieza con una aclaración del autor en la que nos dice que es un relato fantástico, a pesar de considerarlo real en alto grado. La trama es un monólogo del protagonista, un prestamista, casado con una joven de dieciséis años. Comienza con el cadáver de su mujer encima de la mesa, tras el suicidio de ésta tirándose por la ventana. Desde ese momento, el relato dura varias horas en las que el protagonista nos contará la relación (o no relación) con su esposa y su entorno. Dividido en dos partes y con capítulos muy cortos en los que, con el título, sabremos qué va a explicarnos. El primero: Quién era yo y quien era ella y el último: He llegado sólo cinco minutos tarde. Las relaciones personales, desde todos los puntos de vista, serán las protagonistas. N.º de páginas: 112 Editorial: Galaxia Gutenberg ISBN: 9788419075789 Traductor: Juan Luis Abollado Reseña completa en el blog: Enlace: https://www.cruzromon.com/la.. + Leer más |
“La juventud es siempre magnánima, aunque su magnanimidad no se dé más que en pequeñas dosis” ~ La sumisa de Fiódor Dostoyevski. Esta semana en #clasicosflash hemos viajado a Rusia de la mano de Fiódor Dostoyevski y una novelista corta titulada “La sumisa” que a mi ni fu ni fa. En ella conocemos la relación de un matrimonio partiendo de la secuencia de entrada en la que el marido vela el cuerpo de su mujer que se ha suicidado. Ante su cadáver y en soledad, él comienza a reflexionar sobre los motivos que han podido inducir a su mujer a quitarse la vida y así retoma la historia de su matrimonio desde el inicio cuando ella era una joven de 16 años y él ya tenía 40. A partir de ahí, Dostoyevski perfila a un hombre egocéntrico cuya mayor preocupación es enfrentarse a la soledad. El libro se lee en ratito pero a mi, la verdad, no me ha llegado. El hombre me ha desesperado a ratos y por momentos la historia no me decía nada; de hecho, tampoco he tenido claras las razones por las que la mujer decidió quitarse la vida, más allá de no aguantar a semejante peñazo de marido. + Leer más |
La sumisa es un cuento escrito por el autor ruso Dostoyevski en 1876. Se trata del relato en primera persona de un prestamista cuya joven mujer acaba de suicidarse. Nos encontramos ante los pensamientos y reflexiones de este hombre tras conocer la noticia y con el cuerpo de su mujer aún presente. Aunque es una lectura que no me ha dejado tanta huella como las anteriores del autor (Noches blancas y Crimen y castigo), me sigue pareciendo magistral la forma que tiene el autor de adentrarnos en la psicología de los protagonistas, de meternos de lleno en un relato en el que ni si quiera conocemos los nombres de los personajes, pero que al finalizar la lectura sentimos que llegamos a conocer perfectamente. Lo cierto es que es un autor por el que siento debilidad, por lo que siempre me siento cómoda leyéndolo. ¡A por el siguiente! |
La sumisa, de Dostoyevski, es una novela corta o un relato largo que arranca con el protagonista encontrándose a su mujer muerta. No, no es spoiler, sale en la primera página, y a partir de aquí empezaremos a conocer a la extraña pareja para llegar a comprender cómo se ha llegado hasta ese inicio de la novela. Hace poco leí La felicidad conyugal, de Tolstói, y le he visto bastante similitud en varios temas con esta, quizás por eso creo que no me ha gustado tanto como esperaba. De hecho, me quedo en este caso con la de Tolstói, para mí más completa; esta, aunque para las pocas páginas que tiene, se centra en la relación de la pareja, se me ha quedado un poco a medias, me hubiera gustado mas desarrollo de los personajes, que no digo que estén mal, ni mucho menos, están genial, pero sí que he necesitado más de ellos. Pero esto no quiere decir que no me haya gustado: sí que lo ha hecho, pero menos de lo que esperaba vistas las reseñas de otros lectores. También es verdad que lo último que leí del autor fue Crimen y castigo, si no recuerdo mal, y claro, las comparaciones son odiosas con una de las novelas con mejor desarrollo de los personajes que he leído. En definitiva, una buena historia y que si no has leído nada del autor es una buena manera de establecer un primer contacto. Leído y disfrutado una vez más con @librosbykenia, que siempre es un placer comentar lecturas, y esta siendo tan cortita nos dio para comentar mucho ☺️ ¿Lo habéis leído? ¿Os gusta el autor? ¿Cuál de sus obras me recomendáis? Editorial: @galaxia_gutenberg Traductor: Juan Luis Abollado + Leer más |
Hay opiniones injustas y posiblemente lo que os cuente de esta novela esté plagado de subjetividades que no darán una visión real del libro. Pero en esta cuenta, mi objetivo siempre ha sido dar mi sincera opinión de cada libro que reseño sin ningún tipo de criterio académico literario. Y con esta premisa inicial arranco la reseña de Los demonios. Esta obra publicada en 1872 es una de las obras de madurez de Dostoyevski. En estas 900 páginas, el autor ruso nos trae a escena los potenciales desastres que podrían acarrear las corrientes nihilistas que empezaban a ser una preocupación real en la sociedad rusa del momento. En Los demonios un grupo encabezado por Piotr Stepanovich, empieza a generar el caos tratando de imponer unos ideales desde un fanatismo que dinamita cualquier razón que pudiera llegar a tener. En este sentido, me ha recordado a Bulgakov y su Maestro y Margarita. Y es que Bulgakov narró la llegada a Petesburgo del diablo, que no era otra cosa que una alegoría a las fechorías hechas por el regimen stalinista. Al igual que el diablo, Piotr Stepanovich siembra el caos en la hasta ahora no exaltada vida de la ciudad dónde se desarrolla la novela. Afrontar una novela de este calibre no es fácil, y desde mi punto de vista exige al lector un gran conocimiento tanto social como político del momento en el que se encontraba la Rusia del 1860. La forma de narrar de Dostoyevski no la he considerado densa, de hecho hay ciertos puntos que resulta divertida. Pero los temas que trata si requieren mucha atención, y una lectura además tan larga necesita de un bagaje importante tanto en el autor como en literatura rusa para ser capaz de hacer una lectura completa de esta obra. Por tanto, no me veo en la capacidad de hacer un juicio óptimo de la obra, pero si creo que puedo recomendaros no leer esta obra si nunca antes habéis leído al autor o literatura rusa. Para mi, ha sido un camino lleno de piedras lo que me ha impedido disfrutar la lectura. + Leer más |
El mes de abril en el #vecindarioliterario nos trajo una lectura del calibre de “Los demonios”, de Fiodor Dostoievski; un libro muy extenso y, aunque inicialmente no lo parecía, algo complicado. Nos encontramos ante una lectura de esas que yo llamo “iceberg”, pues entiendo lo que está sucediendo pero solo soy capaz de captar un pequeño porcentaje de todo lo que subyace bajo la trama. Lo cierto es que se trata de una novela con tintes divertidos, sus personajes son muy originales, los diálogos resultan muy amenos, hay momentos en los que despierta incluso la carcajada… pero debajo de esa aparente sencillez inicial se esconde una dura, compleja y feroz crítica al nihilismo moral y político que comenzaba a hacerse sentir en la Rusia de la década de 1860. Un libro, como digo, complejo, extenso, exigente; una brillante sátira social y política además de un exhaustivo y dramático estudio psicológico, narrado a través de esta gran tragedia que no es más que un intento de revolución y sus consecuencias. Un libro que esconde muchas y variadas lecturas y que, sin duda, es una obra maestra que precisa cierto bagaje lector para analizarla, entenderla y disfrutarla en su totalidad. + Leer más |
Estoy francamente deslumbrada por la maestría del autor. Debo admitir que tardé en engancharme (muchas subtramas, muchísimos personajes) pero las últimas 300 páginas me las devoré! La historia transcurre en un pueblo que no se nombra, donde coexisten una alta sociedad interesada en la cultura desde un punto de vista frívolo y abocada exclusivamente al aspecto estético y externo del arte, con un grupo de jóvenes que forman parte de una nueva visión que busca demoler los hitos del pasado de forma violenta y radical para generar nuevas estructuras libres de las ataduras de la religión, la propiedad y las concepciones clasistas. Dentro de ese grupo de jóvenes hay un líder nominal y tácito, Stavroguin, admirado por su porte, sus contactos y su valor (pero que en verdad oculta terribles remordimientos y dudas) y un cabecilla encubierto, Piotr Stepánovich Verjovenski, cruel e inescrupuloso, capaz de hacer cualquier cosa con tal de obtener sus fines. La combinación de una generación mayor con buenas intenciones pero absolutamente incapaz de ejecutarlas, y una juventud radicalizada y mal dirigida, lleva al más absoluto de los desastres, como no puede ser de otra manera. Algo que me llamó la atención casi hasta el final es que me costó mucho encontrar personajes con quienes pudiera establecer empatía, pero lo logré con Shátov hacia el final de la novela. Dostoyevski se inspiró para la composición de la novela en el asesinato de un estudiante a manos de otros jóvenes con quienes compartía una célula revolucionaria, aparentemente guiados por órdenes de sus superiores y a sangre fría. Eso llevó a Dostoyevski a pensar en los peligros de que la juventud pierda cualquier anclaje moral y religioso y adopte un relativismo que eventualmente pudiese justificar cualquier acto. Según el prólogo de mi edición, Dostoyevski también le pega fuerte a la generación anterior de escritores, sobre todo a Turguéniev por considerar que habían vivido demasiado enfrascados en una realidad de privilegio y habían sido incapaces de hablarles eficientemente a los jóvenes para generar una mejor conciencia en ellos. En la edición de Alianza también hay un apéndice con un capítulo que los editores le hicieron remover a Dostoyevski donde Stavroguin confiesa todos los pecados que le remuerden la conciencia. Me parece fundamental su lectura para poder comprender la psicología de Stavroguin, así que recomiendo enfáticamente esta edición o alguna que incluya ese capítulo. + Leer más |
Se dice que Dostoyevski es probablemente el autor que mejor refleja la naturaleza humana, si en una obra tiene más sentido si cabe tal afirmación es en su obra maestra Los Hermanos Karamazov. Ahora profundamente en la psicología de los personajes, sus vulnerabilidades, sus egos, el desprecio, celos, el influjo del dinero. Todo se aúna en la familia de Fiódor Pávlovich Karamázov. Narra la decadencia de una familia, dónde el patriarca se presenta como un alcohólico empedernido, sediento de placeres. Lógicamente, ante un ser así salen sus némesis, su hijo Iván representa la naturaleza contraria, y así se podría ir definiendo a cada uno de los miembros de esta familia. Lo mejor, que en ningún momento se hace tedioso, quieres ahondar, conocer más sobre esa familia, lo bueno y lo malo que conlleva, como ocurre en cualquier otra familia. Sólo que en este caso la narración tiene lugar en un proceso de decrepitud de todo lo que los rodea. Una fantástica obra, un clásico de la literatura que personalmente no podría dejar de recomendar. + Leer más |
Los hermanos Karamazov - Fiodor Dostoyevski Hace dos meses, comencé la aventura de leer la gigante novela de Dostoyevski, creyendo ilusamente que podría hacerlo en un tiempo breve. No fue así. Dosto me acompañó dos largos y tortuosos meses en los que en compañía de Aliosha, Dmitri, Iván, Grushenska y Katia iba viviendo un montón de aventuras de otra época , de otro mundo. La historia parece ser una biografía de la familia Karamazov, una familia bastante disfuncional, cabe mencionar, que se ve envuelta en varios dramas los cuales hacen que mis dramas sean una nada en comparación. La historia es excelente, cuando crees que Dosto ha olvidado algo, retoma tal tema de manera preciosa, pero lo más impactante son los capítulos donde los personajes se desnudan el alma y vacían sobre las páginas sus ideas, pensamientos. Debates filosóficos divinamente armados. El libro consta de más de 1200 páginas, en las cuales en ningún momento el autor mete cosas innecesarias, sólo lo justo para entender la personalidad y vida de dichos personajes. Escenarios tan bien construidos que permiten al lector adentrarse en la historia y sentir emociones tan fuertes gracias a la cruda realidad que describe Dostoyesky en su obra. + Leer más |
Cuando empecé este libro lo hice con mucho respeto y un pelin de temor, los clásicos rusos!!con su fama de densos. Ya había leído algo de ellos, pero en formato más reducido, y las 425 páginas de esta criatura asustaban un poco. Nada más empezar me llamó la atención la manera tan llana y atrayente de Dostoyevsky para contar historias, sus personajes tan complejos, y a la vez fascinantes me han tenido absorta. El que nos separen de este clásico tanto los años, como la barrera cultural, no deja de hacerlo actual. Las dudas, los miedos, los caracteres de los personajes son universales, comunes. Pasión, sentimientos de culpabilidad, redención, crimen, odio, perdón e inocencia son los ingredientes de este cóctel ruso. En ocasiones, si es verdad que me he perdido un poco con determinada terminología típica rusa, y he tenido que echar mano del diccionario, o sea de Google, por eso se echan en falta alguna que otra nota a pie de página para hacer más cómoda la lectura. La trama se desarrolla de manera magistral, tienes que estar atento a cualquier detalle, ya que es importante en el desenlace. Incluso en la parte del juicio se hace amena la lectura porque se despejan muchas dudas, y las sorpresas que te dan algún que otro personaje no tienen desperdicio. Definitivamente recomiendo este clásico, y la edición tan cuidada de Plutón ediciones. Os dejo una de mis partes favoritas: "El mundo le dice al pobre: ¿tienes necesidades?...¡satisfácelas! ¡tus derechos son iguales a los de los ricos!...Pero el satisfacer las propias necesidades es lo mismo que multiplicarlas, puesto que de un deseo satisfecho nace otro nuevo deseo. He ahí la libertad tal cual la entiende el siglo".. + Leer más |
Tengo una historia peculiar con Dostoievski. La primera obra que leí de él, “El idiota”, no me gustó nada (además leí una pésima traducción) y tardé diez años en volver a darle una oportunidad con “Crimen y castigo” que me voló la cabeza. Y con “Los hermanos Karamazov” ha entrado indiscutiblemente en mi panteón de indispensables. La novela trata sobre la familia Karamazov, encabezada por un padre, Fédor, que es uno de los grandes energúmenos de la literatura, capaz de humillar a su hijo seminarista insultando a su comunidad religiosa, querer robarle la mujer que ama a su hijo tentándola con dinero, o estafar a sus hijos con respecto a su herencia materna. Los hermanos Karamazov son tres: Dimitri, impulsivo, capaz de gran ternura y gran violencia, irresponsable pero con un fondo de nobleza, y permanentemente endeudado; Iván, el intelectual cínico de la familia, que descree de todo y tiene un discurso que desafía las instituciones; y Aliosha, el hombre espiritual de la familia, que pone a los personajes en contacto con lo divino y con la mejor parte de sí mismos. Completa el cuadro el sirviente Smerdiakov, hijo de una mendiga y sospechado de ser hijo natural de Fédor. Cuando Fédor es asesinado, comienza una investigación policial, un juicio, y también un examen de conciencia de cada Karamazov. ¿Quién fue? ¿Quién puede considerarse completamente inocente? Hay tantos momentos memorables en la novela que sería imposible enumerarlos a todos. Reflexiones sobre la religión, la espiritualidad, el materialismo, la muerte, las relaciones familiares, el amor, la obsesión... Es una de esas novelas totales, que te sumergen en un universo del cual cuesta salir. Es realmente una experiencia de lectura maravillosa que recomiendo muchísimo! + Leer más |
Hasta el momento es la obra de la que más me ha costado hacer una reseña, no creo que con estas palabras que vais a leer consiga estar a la altura de una obra que aunque a veces se hace densa, manifiesta tanto psicoanálisis que tiene a los personajes mejor desarrollados que nunca haya leído. Es que cada acción llega un momento que sabes quién la va a cometer porque los conoces tan bien que es imposible que te engañes. Centrada en la relación de un padre ausente con sus tres hijos, Los Hermanos Karamazov parece una telenovela dirigida por Shakespeare. Con diálogos que a veces rozan lo absurdo, personajes dramáticos, acciones que escenifican el odio, el amor y la compasión. Este libro no pretende que estés a favor o en contra de uno de los hermanos o el padre, sino que entiendas toda la complejidad que se esconde detrás de una familia. Sin duda es un clásico que me resultó difícil de leer, hay demasiada información y mucha contextualización y creo que necesitaré una segunda lectura para darme cuenta de todos los detalles, aún así, habiéndome parecido aburridas algunas partes puesto que no empatizas de la misma manera con todos los personajes, creo que es un libro indispensable de la literatura. Enlace: https://www.instagram.com/p/.. + Leer más |
Una gran novela con iniciativa de carácter filosófico y psicológico. Una obra, que como otras obras del escritor, las leí siendo yo muy joven, pero que volví a releer mucho más adelante. Siempre me gustaron, siempre me entusiasmaron, siempre las sentí como imprescindibles, como solventes acompañantes para entender más y mejor el mundo. Los hermanos Karamazov de Dostoyevski, una novela que nació para formar parte de la colección denominada Literatura universal, pues es al universo poblado a quien conciernen las pasiones, las dudas, el dolor, el placer, el pecado , los vicios, los celos, el dinero, los bienes materiales y Dios. Dios como figura a la que negar o acoger, Dios de un modo u otro, formando parte del tejido neuronal y del alma humana. Quienes pueblan la novela serán obligados por el autor a realizar desnudos integrales, DostoyevskI nos relatará la historia de una familia viviendo en una sociedad claramente decadente, llena de temores, miserias y contradicciones. Fiodor Pavlovitch, un bebedor lujurioso, sus hijos Dimitri, Iván , Aliocha y el bastardo Smerdiakov, a los que nunca crió, y las mujeres Gruchegnka, una mujer astuta y seductora que enamorará a Dimitri, y Katia, en principio, la prometida de Dimitri. Estos van a ser los personajes principales de la extraordinaria obra. Cada uno de ellos irá apareciendo en la novela e iremos conociendo y reconociendo las características fundamentales que los acompañarán, y cargarán y llevarán a cuestas el papel que tienen destinado para ser representado en el teatro del mundo, que de forma tan precisa, parece conocer el autor. Quizá, el hecho muy plausible de que Dostoyevski hubiese tenido conocimiento de la existencia real de alguno de los personajes, habría ayudado a mostrar su perfeccionamiento a la hora de definir y dibujar a alguno de los excelentes personajes que aparecen y se integran en su gran obra, Los Hermanos Karamazov. Cada una de las figuras que se representan e irán apareciendo a través de las páginas de la novela, serán y aparecerán como esquirlas que hubieran saltado, que se hubieran despegado de un orden social, político y económico, que los fuera expulsando incesantemente para que pudiesen acabar siendo exactamente lo que son. Para, de ese modo, poder representar, sin fisuras, lo que significan, lo que representan El padre, Dimitri, Iván, Aliocha, el bastardo, Gruchebnka y Katia. El padre, Fiodor Pavlovitch, viudo dos veces y esclavo de sus pasiones, es un borrachín, mujeriego, amoral y decadente. Dimitri, un ser desmedido, apasionado, violento, pendenciero, irresponsable aunque con un raro sentido del honor y la piedad. Un personaje con dos marcadas vertientes redimido totalmente por el inmenso amor que es capaz de sentir por Gruchebnka. Iván, un no creyente, un ateo sin concesiones, interesado por ideas y conceptos ilustrados y de carácter filosófico y apegado a los postulados, hijos de los nuevos descubrimientos. Aliocha, un monje , un creyente sin fisuras de elevados sentimientos, apegado a la idea de Dios, un pacificador, un mediador que intentará inútilmente resolver los desencuentros y la violencia intrínseca en su familia, en la familia Karamazov. Para la representación femenina, Dostoyevski, en principio, optará por la división clásica y eterna. Gruchebnka, La mujer pérfida, interesada, mujer que no atiende a un solo hombre, y que los utiliza y humilla, vividora, un conjunto de características, que solo casa bien con la palabra hombre. Luego dará con la prometida de Dimitri, Katia, humilde, comprensiva, buena, abnegada, sumisa y sobre todo, mujer de un solo hombre, al que admirará pese a todos sus vicios y defectos. Aunque finalmente, el desengaño y la frustración absoluta la llevarán a convertirse en un ser desquiciado y vengativo. Las dos mujeres cambiarán su personalidad con la influencia de Dimitri, el hombre con el que ambas se relacionan. En esta obra, el poder del hombre para cambiar a la mujer, para apartarla de su ser inicial es inequívoco. Podríamos decir que esta novela es un constante de preguntas, tesis, antítesis y síntesis, aunque la síntesis siempre queda abierta , siempre dando pasos a una nueva pregunta, se pregunta a sabiendas de que no puede haber una contestación absolutamente cierta, la duda es el alimento fundamental que siembra esta novela. Los frutos de esta siembra tendrán que ser deglutidos y, luego digeridos por cada uno de los lectores de esta inmensidad de obra literaria. Sin preguntas es imposible avanzar, las respuestas a las preguntas siempre van a dar nacimiento a otras nuevas, es lo que estoy persuadida que intenta Dostoyevski en esta obra. No pretende darnos respuestas , no lo hace en ningún momento en este libro, sí parece, por el contrario, interesado y mucho, en que consigamos meternos bajo la piel de cada uno de los personajes que van apareciendo en la novela, y así, conseguir al acercarnos , entenderlos y poder vernos inmersos en sus distintas vidas y situaciones. Tampoco nosotros, aunque consiguiéramos esto último seríamos capaces de responder a las preguntas que nos harían el padre, Dimitri, Iván, Aliocha, el bastardo, Gruchebnka y Katia. Como puede ocurrir en todo conflicto sin resolución y que va creciendo y desarrollándose en el tiempo, puede darse la violencia más abyecta, en este caso, un parricidio, una ruptura, un ataque a uno de los tabúes mas restrictivos. Parece que una gran escalada de violencia solo puede terminar con una apoteosis, el asesinato, el crimen. Esta obra es pura esencia, ninguna bagatela la entretiene, va y llega al fondo, nos impele a pensar e incluso , quizá a intentar resolver conflictos de carácter personal o familiar. Magnífica lectura, me atrevo aún más, necesaria. + Leer más |
La complejidad de la mente humana plasmada con maestría en mil páginas que encierran todo lo que se necesita conocer sobre la vida. Fiódor M. Dostoyevski publicó esta “novela en cuatro partes y un epílogo” entre enero de 1879 y noviembre de 1880, mediante una serie de entregas en la revista “El mensajero Ruso”. Tan sólo un día después de la última revisión para la posterior edición del libro en dos volúmenes, falleció a la edad de cincuenta y nueve años, dejando inacabado uno de los proyectos más ambiciosos de su trayectoria literaria. Su plan, tras una serie de modificaciones, era continuar “Los hermanos Karamázov” con una nueva obra en torno a la madurez del personaje de Aliosha, el hijo menor de la familia. ¡Qué difícil condensar en unas pocas líneas el torrente de emociones y sensaciones que ha suscitado en mí esta lectura! Dostoyevski construye una historia profunda en la que nos invita a conocer los matices y recovecos que marcan las directrices de la existencia. Un narrador que interactúa con el lector y le anima a reflexionar sobre el castigo, la culpa, el bien y el mal, Dios y el diablo mismo, la eternidad y la vida terrenal, la salvación, la justicia, la compasión, el amor y la figura del padre, la infancia o el significado de la belleza. El mundo entero retratado en el interior de una serie de personajes que mantienen diálogos pasionales, en ocasiones disparatados, pero ante todo, impulsados por sus instintos e impulsos más reveladores. La primera mitad del libro me ha parecido especialmente intensa e interesante, dotada de una gran carga filosófica y con uno de los capítulos más apasionantes que he leído: “El Gran Inquisidor”. La segunda parte está caracterizada por su gran impacto psicológico vinculado a los hechos que definen las tormentosas y trágicas relaciones entre los Karamázov. “Los hermanos Karamázov” y el conjunto de individuos que les acompañan, reflejan las luces y las sombras de una Rusia (y de un mundo) en plena ebullición, con ideales y valores que anuncian cambios y que demandan a gritos la libertad de dudar y de replantearse la realidad sobre la que se descansan los cimientos de una sociedad víctima de sus miedos e hipocresías. + Leer más |
¿Qué medida tomó el profesor Snape para proteger la Piedra Filosofal?