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Xohana Bastida Calvo (Traductor)David Yoon (Ilustrator)
ISBN : 846757917X
320 páginas
Editorial: EDICIONES SM (23/09/2015)

Calificación promedio : 3.84/5 (sobre 67 calificaciones)
Resumen:
Todo todo es una novela sobre la emoción y la angustia que supone abrir nuestro corazón a otra persona, sobre esa sensación tan única que nos hace sentir mariposas en el estómago y sobre las locuras que cualquiera de nosotros podría cometer... por amor.
Madeline Whittier es alérgica al mundo exterior. Tan alérgica, de hecho, que no ha salido de su casa en 17 años. Aún así, su vida transcurre feliz y tranquila hasta que el chico de ojos azules como el Atlántic... >Voir plus
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Críticas, Reseñas y Opiniones (37) Ver más Añadir una crítica
Camilatripp_
 13 June 2021
Esta novela llevaba bastante en mi lista de pendientes y ni siquiera saber que iba a tener adaptación a película hizo que me organizara mejor para poder hacerle un hueco en condiciones. Sabía de qué iba y que podía ser una historia para disfrutar un par de tardes, suponía que se quedaría en una historia más que pronto olvidaría pero como la sorpresa ha sido enorme por lo mucho que me ha emocionado tanto al leer como al terminar la novela. Teniendo en cuenta que la narración está en primera persona a través de los ojos de la protagonista, Maddie, lo justo es decir que lo que más me ha enamorado de este libro ha sido el estilo tan natural y espontáneo de Nicola Yoon, una autora en la que tenía muchas expectativas y que afortunadamente las ha cumplido y superado.
Maddie es una protagonista monísima, con una alegría y un humor contagiosos y unas ganas de vivir tremendas a pesar de su complicada existencia monótona. Desde que era un bebé ha sufrido el síndrome de inmunodeficiencia combinada, lo que se conoce como una “niña burbuja”, aislada de todo los demás sin poder salir de su casa y con todo contacto con el exterior restringido. Las únicas personas con las que trata directamente son su madre, que tras el accidente de tráfico en el que mueren su marido y el hermano mayor de Maddie, se ha volcado en el cuidado de su hija; y Carla, su enfermera que es como una segunda madre y a la vez su única amiga. Maddie lleva con una admirable filosofía optimista su particular modo de vida, sin ansiar nada más que terminar el instituto gracias a sus clases online y empezar a estudiar arquitectura. Sin embargo, eso cambia cuando a la casa de al lado se mudan los nuevos vecinos y Maddie observa a través de la ventana de su habitación esterilizada al chico nuevo, Ollie. Entonces su monótona vida ya no le parece suficiente y empieza a fantasear sobre cómo sería tener amigos de verdad, cómo sería poder ir a clase o cómo sería ver el mar.
Ha sido muy fácil conectar con un personaje como Maddie porque la autora la ha hecho real, una chica adolescente apartada del mundo que solo quiere ser normal pero que es muy consciente de que no lo es y no podrá serlo porque el síndrome que padece no tiene cura y consiste en ser alérgica, básicamente, al mundo entero. Es una situación angustiosa que trastoca la vida de quienes lo sufren y aún así, Nicola Yoon ha decidido mostrar el día a día de Maddie de una manera desenfada y restándole dramatismo a lo todo lo que conlleva, porque al fin y al cabo es lo que hay y Maddie vive con ello con naturalidad. Por eso creo que he disfrutado doblemente de este libro, porque no es el típico drama en el que se utiliza una enfermedad para hacernos llorar por llorar sino que se esfuerza más por hacernos ver que lo que importa es cómo vivimos y no cuánto. Por si os deja más tranquil@s y con más ganas de leerlo, os aclaro que no es un drama juvenil para necesitar pañuelos al lado pese a que trate sobre una enfermedad así, sino que es una novela divertida, amena y en la que a pesar de sufrir y emocionarnos con Maddie, esta chica es todo lo contrario al drama.
Por su parte, Ollie es un chico con una familia complicada pero con un carácter amable y aventurero. Nada más conocer a Maddie, Ollie se convierte en su ventana al exterior más allá del jardín. Es un chico divertido, con un sarcarmo muy ingenioso y juntos tienen conversaciones llenas de ironías y chistes. Me ha caído muy bien y no me extraña que Maddie se quede soñando despierta cuando lo conoce, y también es comprensible que sienta un flechazo tan grande porque realmente no conoce a nadie más, y menos de su edad. Como digo, Ollie también tiene sus propios secretos y una historia personal detrás que vamos descubriendo a medida que lo descubre Maddie y por eso también es un personaje del que es muy fácil encariñarse, aunque su forma de ser ya sería suficiente. El resto de personajes es más bien escaso, porque alrededor de Maddie sus relaciones también son escasitas y además de Ollie, solo aparecen su madre y su enfermera Carla con un papel relevante porque los demás solo tiene apariciones puntuales y nada relevantes.
En realidad esta falta de personajes no importa porque Maddie solita se basta para llevar todo el peso de la trama y porque solo se necesita un coprotagonista para desarrollar el romance, que por supuesto lo hay, como se encargan de dejarnos claro en el subtítulo de la edición en español. Es una historia de ¿amor? muy cuqui, con muchas primeras veces porque Maddie realmente está viviendo todo por primera vez y eso le da un matiz de intensidad con significado distinto. Quizás a much@s les haga poner los ojos en blanco ante el nivel de sentimientos que alcanzan los dos en tan poco tiempo, pero precisamente por la situación en la que se encuentra Maddie, yo le he dado ese significado que la autora ha querido transmitir y es que Maddie puede morir en cualquier instante, solo con respirar, y sabiendo que jamás ha tenido una vida normal ni una relación normal, ni siquiera de amistad, he comprendido perfectamente cómo se siente Maddie cuando de repente aparece una persona como Ollie que expande su mundo en todas direcciones, también hacia sus propios sentimientos.
Por otro lado, algo me iba escamando hacia el final y no ha sido tan impactante cuando el giro argumental se desvela porque hay pistas progresivas que pueden hacernos sospechar, pero aún así estoy segura de que sigue siendo sorpredente y que no resta para nada para que guste cómo acaba la historia de Maddie. Además, la edición llena de dibujitos y esquemas (que si no me equivoco, son obra del marido de la autora, que es ilustrador), dotan también de un atractivo al libro que lo hace muy ameno, con muchísimas hojas casi en blanco o con un único párrafo o ilustración o alguno de los detalles que Maddie necesita plasmar. Es decir, que se trata de una novela bonita tanto por dentro como fuera y ha sido maravilloso disfrutar de forma tan completa de esta historia.
Por si todo el fangirleo anterior no fuera suficiente, lo que me ha hecho disfrutar tantísimo de este libro son las ganas de vivir intensamente que transmite en cada página. Era algo que no me espera de un libro de estas características, porque esperaba una historia más tirando a drama para llorar que a tragicomedia para reír y la protagonista se ha ganado mi corazoncito con ese desparpajo que tiene para expresar todo lo que le ocurre, que por otro lado no tiene ninguna gracia y soy incapaz de ponerme en su lugar sin angustiarme. Y como esa sorpresa se ha mantenido hasta el mismo final, me dejo llevar por las emociones y esta historia se mete de pleno en mi top del año, además de ser una de mis recomendaciones a partir de ahora para quienes queráis salir de un libro con una enorme sonrisa.
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AlhanaRhiverCross
 15 March 2019
Esta novela llevaba bastante en mi lista de pendientes y ni siquiera saber que iba a tener adaptación a película hizo que me organizara mejor para poder hacerle un hueco en condiciones. Sabía de qué iba y que podía ser una historia para disfrutar un par de tardes, suponía que se quedaría en una historia más que pronto olvidaría pero como la sorpresa ha sido enorme por lo mucho que me ha emocionado tanto al leer como al terminar la novela. Teniendo en cuenta que la narración está en primera persona a través de los ojos de la protagonista, Maddie, lo justo es decir que lo que más me ha enamorado de este libro ha sido el estilo tan natural y espontáneo de Nicola Yoon, una autora en la que tenía muchas expectativas y que afortunadamente las ha cumplido y superado.
Maddie es una protagonista monísima, con una alegría y un humor contagiosos y unas ganas de vivir tremendas a pesar de su complicada existencia monótona. Desde que era un bebé ha sufrido el síndrome de inmunodeficiencia combinada, lo que se conoce como una “niña burbuja”, aislada de todo los demás sin poder salir de su casa y con todo contacto con el exterior restringido. Las únicas personas con las que trata directamente son su madre, que tras el accidente de tráfico en el que mueren su marido y el hermano mayor de Maddie, se ha volcado en el cuidado de su hija; y Carla, su enfermera que es como una segunda madre y a la vez su única amiga. Maddie lleva con una admirable filosofía optimista su particular modo de vida, sin ansiar nada más que terminar el instituto gracias a sus clases online y empezar a estudiar arquitectura. Sin embargo, eso cambia cuando a la casa de al lado se mudan los nuevos vecinos y Maddie observa a través de la ventana de su habitación esterilizada al chico nuevo, Ollie. Entonces su monótona vida ya no le parece suficiente y empieza a fantasear sobre cómo sería tener amigos de verdad, cómo sería poder ir a clase o cómo sería ver el mar.
Ha sido muy fácil conectar con un personaje como Maddie porque la autora la ha hecho real, una chica adolescente apartada del mundo que solo quiere ser normal pero que es muy consciente de que no lo es y no podrá serlo porque el síndrome que padece no tiene cura y consiste en ser alérgica, básicamente, al mundo entero. Es una situación angustiosa que trastoca la vida de quienes lo sufren y aún así, Nicola Yoon ha decidido mostrar el día a día de Maddie de una manera desenfada y restándole dramatismo a lo todo lo que conlleva, porque al fin y al cabo es lo que hay y Maddie vive con ello con naturalidad. Por eso creo que he disfrutado doblemente de este libro, porque no es el típico drama en el que se utiliza una enfermedad para hacernos llorar por llorar sino que se esfuerza más por hacernos ver que lo que importa es cómo vivimos y no cuánto. Por si os deja más tranquil@s y con más ganas de leerlo, os aclaro que no es un drama juvenil para necesitar pañuelos al lado pese a que trate sobre una enfermedad así, sino que es una novela divertida, amena y en la que a pesar de sufrir y emocionarnos con Maddie, esta chica es todo lo contrario al drama.
Por su parte, Ollie es un chico con una familia complicada pero con un carácter amable y aventurero. Nada más conocer a Maddie, Ollie se convierte en su ventana al exterior más allá del jardín. Es un chico divertido, con un sarcarmo muy ingenioso y juntos tienen conversaciones llenas de ironías y chistes. Me ha caído muy bien y no me extraña que Maddie se quede soñando despierta cuando lo conoce, y también es comprensible que sienta un flechazo tan grande porque realmente no conoce a nadie más, y menos de su edad. Como digo, Ollie también tiene sus propios secretos y una historia personal detrás que vamos descubriendo a medida que lo descubre Maddie y por eso también es un personaje del que es muy fácil encariñarse, aunque su forma de ser ya sería suficiente. El resto de personajes es más bien escaso, porque alrededor de Maddie sus relaciones también son escasitas y además de Ollie, solo aparecen su madre y su enfermera Carla con un papel relevante porque los demás solo tiene apariciones puntuales y nada relevantes.
En realidad esta falta de personajes no importa porque Maddie solita se basta para llevar todo el peso de la trama y porque solo se necesita un coprotagonista para desarrollar el romance, que por supuesto lo hay, como se encargan de dejarnos claro en el subtítulo de la edición en español. Es una historia de ¿amor? muy cuqui, con muchas primeras veces porque Maddie realmente está viviendo todo por primera vez y eso le da un matiz de intensidad con significado distinto. Quizás a much@s les haga poner los ojos en blanco ante el nivel de sentimientos que alcanzan los dos en tan poco tiempo, pero precisamente por la situación en la que se encuentra Maddie, yo le he dado ese significado que la autora ha querido transmitir y es que Maddie puede morir en cualquier instante, solo con respirar, y sabiendo que jamás ha tenido una vida normal ni una relación normal, ni siquiera de amistad, he comprendido perfectamente cómo se siente Maddie cuando de repente aparece una persona como Ollie que expande su mundo en todas direcciones, también hacia sus propios sentimientos.
Por otro lado, algo me iba escamando hacia el final y no ha sido tan impactante cuando el giro argumental se desvela porque hay pistas progresivas que pueden hacernos sospechar, pero aún así estoy segura de que sigue siendo sorpredente y que no resta para nada para que guste cómo acaba la historia de Maddie. Además, la edición llena de dibujitos y esquemas (que si no me equivoco, son obra del marido de la autora, que es ilustrador), dotan también de un atractivo al libro que lo hace muy ameno, con muchísimas hojas casi en blanco o con un único párrafo o ilustración o alguno de los detalles que Maddie necesita plasmar. Es decir, que se trata de una novela bonita tanto por dentro como fuera y ha sido maravilloso disfrutar de forma tan completa de esta historia.
Por si todo el fangirleo anterior no fuera suficiente, lo que me ha hecho disfrutar tantísimo de este libro son las ganas de vivir intensamente que transmite en cada página. Era algo que no me espera de un libro de estas características, porque esperaba una historia más tirando a drama para llorar que a tragicomedia para reír y la protagonista se ha ganado mi corazoncito con ese desparpajo que tiene para expresar todo lo que le ocurre, que por otro lado no tiene ninguna gracia y soy incapaz de ponerme en su lugar sin angustiarme. Y como esa sorpresa se ha mantenido hasta el mismo final, me dejo llevar por las emociones y esta historia se mete de pleno en mi top del año, además de ser una de mis recomendaciones a partir de ahora para quienes queráis salir de un libro con una enorme sonrisa.
Enlace: https://enmitiempolibro.blog..
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MonicaM
 28 February 2018
Primer libro que leo de esta autora. No conocía a Nicola Yoon. Tengo constancia que van a realizar una película de su segundo libro. El sol también es una estrella.

Pero a lo que iba, he leído este libro y, posiblemente, sea el que más he tardado en leer. No por extensión ni mucho menos, sino porque no he tenido tiempo, debido a examenes. Pero hace muy poco me lo acabé, ya que lo empecé después de navidades.

El libro consta de 311 páginas y los capítulos no están secuenciados, es decir, no están enumerados. Lo que aparecen son nombre que Yoon da a esos capítulos, como una pequeña introducción. Mayoritariamente son palabras, aunque también aparecen frases a veces que hacen referencia a lo que se va a hablar. Es, sin duda, una bonita historia de amor.

Me considero empática y he sentido ese agobio de estar encerrada. Porque, para lxs que no lo sepáis, la historia cuenta una enfermedad, SCID, o vulgarmente conocida como la "enfermedad burbuja" porque la persona que padece esta enfermedad no puede salir de su habitación, ya que son alérgicas al mundo y pueden llegar a morir, en este caso es Madeline.

No sé cuánto de verdad se cuenta en el libro, pues como sabemos, muchas de las cosas no son reales. El libro está relatado de una manera divertida, que hace que el lector se ría y que hace amena la triste historia de una persona que está enferma y no puede salir de su casa.

Todo cambia cuando se muda una familia, y ahí es donde la historia comienza a ponerse interesante cuando, conoce a Olly, un chico de su edad.

Me esperaba una decepción en cuanto a la película porque me habían hablado muy mal de esta, me dijeron que no estaba basada en la película o que no era fiel. de cualquier manera, no me la recomendaban. Pero me aventuré y la vi. Me gustó bastante y me sorprendí porque, desde mi perspectiva, sí es fiel al libro. Claro, es una película no pretendas que esté todas las escenas que aparecen, pero muchas de las cosas que suceden en el libro se ven en la película.
Os recomiendo ambas cosas, pero como siempre, me quedo con el libro. El único problema que le veo a la película es que altera un poco el orden. Es decir, si una escena se sienta él primero, en la película es al revés. Por ejemplo. Es una tontería, pero quería hacer hincapié en este detalle. Más que nada por si quieres ver la película y eres de las que les gusta ver las opiniones antes.
Me ha gustado mucho el final de la historia, porque jamás me esperaba lo que sucedería, ya que hay ciertas historias que ya sabes el final, porque poco a poco van solucionándose la historia.
Por último, he comenzado esta reseña diciendo que hay un nuevo libro y por consiguiente, una nueva película. Cuando la película se estrene leeré el libro para que no se me olvide ningún detalle.

Si te ha gustado, puede seguirme en Instagram : @mlectoraa. Te espero.
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laurasbookcase
 22 July 2019
En esta novela conoceremos a Maddy, una chica que desde pequeña tiene una enfermedad llamada Inmunodeficiencia Combinada. Es una enfermedad que, prácticamente, la hace alérgica a todo. No se sabe bien el origen de esta enfermedad, sólo que las consecuencias de estar expuesta al exterior y a sus bacterias son bastante severas, hasta pueden llevarla a la muerte. Ella vive con su madre (su padre y su hermano fallecieron en un accidente automovilístico), la cual se ha ocupado de que su casa esté lo más aislada del exterior para que no le ocurra nada. La única persona con la que tiene relación del exterior es su enfermera, Carla, con la que tiene una relación más que buena.

Maddy, a pesar de llevar dieciocho años encerrada en casa sin hacer lo típico de su edad, mantiene una actitud sorprendentemente optimista y madura. Veremos como comenzará a estudiar la carrera de arquitectura por internet y tiene pensado dedicar todo su tiempo a ello. Hasta que la casa de enfrente es ocupada por una nueva familia.

Empezará a fijarse demasiado en lo que hace esa nueva familia, fantaseará más en lo que sería tener amigos de su edad (como los hijos de los vecinos) y en cómo sería salir al exterior y ver el mar... Aunque quién está llamando más su atención es Ollie, el cual es bastante misterioso y no consigue saberse sus horarios como con los de su familia.

Un día, a través de su ventana, ambos se verán. No será hasta más adelante que él le dará su número de teléfono a Maddy muerto de la curiosidad por saber quién es la chica que nunca sale de su habitación.

A partir de allí, Ollie y Maddy empezarán a hablar y crearán una conexión preciosa, haciendo que Ollie pase a ser su ventana al exterior y su desahogo.

No sé qué decir negativo de esta historia. He logrado empatizar con Madeline y su enfermedad gracias a la forma en la que está escrita el libro. Está en primera persona y creo que eso es lo que más facilita la empatía en una historia. Además de que la autora ha logrado describir a la perfección la vida de una "chica burbuja" y las consecuencias que esto lleva.

Ollie es un chico al que todos y todas desearíamos conocer. Es un chico divertido, aventurero, amable y con un sarcasmo realmente divertido. Es un personaje con el que podemos cogerle cariño muy fácil y rápidamente. No me extraña nada que Maddy tuviera tal flechazo por él. Como todas las personas, Ollie tiene secretos los cuales se irán desvelando a lo largo del libro gracias a Maddy.

A pesar de que no hay muchos personajes aparte de los ya mencionados, debo decir que es un libro muy completo. No hace falta un abanico muy amplio de personajes para que la historia sea de diez. No penséis que es una historia de drama que os hará llorar a mares, porque no lo es. Es una historia de amor y superación que nos hará ver las primeras veces de Maddy y sus sentimientos al respecto.

Si buscáis una novela divertida, amena y preciosa, este es vuestro libro. Hay una película homónima al libro basada en éste. ¡Leeros antes el libro, por favor!
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miriamfh_
 14 January 2021
Madeline Whittier es alérgica a todo a causa de una inmunodeficiencia combinada; lo que se conoce como "ser una niña burbuja". Ha vivido sus 18 años recién cumplidos dentro de su casa sin poder salir y aunque su vida no ha sido lo que se dice normal, Madeline nunca ha sentido atracción por el exterior. Pero todo esto cambiará el día que una nueva familia se mude a la casa de al lado y conozca a Olly.

La historia nos narra como Madeline, después de años encerrada dentro de casa sin vivir la vida de cualquier otra niña, encuentra un motivo; una persona, que la hace querer tener una vida como las demás. Este motivo será Olly, nuestro protagonista masculino, que gracias a la gran amistad que forja junto a Madeline, la hará sentirse un poco más "normal". Pero quizá acercarse un poco a la normalidad la hará querer más, poniendo su vida patas arriba.

La verdad, iba con unas expectativas altísimas y, si bien no ha sido una decepción, no ha sido tanto como esperaba.


El tema de amor mezclado con enfermedades me apasiona, y aunque no se profundiza el tema "enfermedad" (algo que me hubiera encantado), me pareció diferente a todas las enfermedades que solemos ver, y eso lo agradezco.
Pero es en la parte de amor donde me falto algo. No sé el qué fue pero no me convenció del todo. Mi mente quiere verlo más como un "primer amor" que en realidad solo era amistad, y eso hubiese sido realmente cuki, a mi parecer.

Lo que también me gusta de la novela es la forma sutil en la que trata a través de los diversos personajes, diversos problemas o incluso "enfermedades" que todos podemos sufrir, y cómo hacerlos frente.


El punto más fuerte del libro se lo llevan los personajes. Madeline con su espíritu adolescente que todos reconocemos en nosotros mismos me hizo entrelazar muy bien con ella, a pesar de nuestras diferencias. Olly ya os digo que no me enamoró. Eso sí, lo adoptaría. Pero por favor, la que tengo que destacar sí o sí es a Carla, la enfermera de Madeline. Esa mujer es puro amor: es como una segunda madre para nuestra protagonista, pero también una mejor amiga. Y es genial. Y da unos consejos que son geniales. Y pf, ya paro.


Debo decir que aunque la historia no es tan perfecta como me esperaba, se merece las buenas críticas que tiene. En conclusión, un libro bastante recomendado sobre todo si os gusta el amor afectado por enfermedades.
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Citas y frases (32) Ver más Añadir cita
NoeLautnerStoryNoeLautnerStory04 March 2018
-¿Siempre es así? –pregunto sin aliento. +Nunca es así. Oigo la maravilla en su voz. Y así, todo.», «No sé a dónde voy, pero tengo que llegar a él. No sé lo que estoy haciendo, pero tengo que protegerlo», «En mi cabeza sé que he estado enamorado antes pero no me sentía así. Estar enamorado de ti es mejor que la primera vez. Se siente como la primera vez y la última vez y la única vez a la vez», «Lo único que se con certeza es que esto, estar aquí con Olly, ser capaz de amarlo y ser amada por él, es todo», «Si pudiera, lo besaría cada segundo de todos los días para toda la vida.
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LibezzyLibezzy29 September 2018
Nunca hay un solo momento: todo responde a una sucesión de momentos. Y la vida puede continuar de mil maneras distintas después de cada uno de ellos. Tal vez existan diferentes versiones de nuestras vidas basadas en las decisiones que tomamos y en las que no tomamos.
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LaiaLaia23 February 2019
Nunca hay un solo momento: todo responde a una secesión de momentos. Y la vida puede continuar de mil maneras distintas después de cada uno de ellos. Tal vez existan diferentes versiones de nuestra vida basadas en las decisiones que tomamos y en las que no tomamos.
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AribookstoshineAribookstoshine28 May 2020
¿Recuerdas la primera vez que leímos El principito? (…) No sabía por qué había escogido morir para regresar con su rosa. Creo que ahora lo entiendo. No estoy escogiendo la muerte. Es solo que si no voy, nunca sabré cómo es estar viva. Te ama, Maddy.
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VlandaetaVlandaeta11 December 2020
Quizás haya una versión de mi vida en la que estoy enferma. Una versión en la que muero en Hawai. Otra en la que mi padre y mi hermano están vivos y mi madre no está desquiciada. Incluso hay una versión de mi vida sin Olly
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