Sundial

¿Os gustan los libros de terror psicológico? ¿O tal vez os encanta que el narrador os engañe en una historia? Si es así, tenéis que leer sin duda alguna a @catward66. Esta vez, con Sundial, la autora lo ha vuelto a hacer.

En esta ocasión conoceremos a Rob, una mujer aparentemente con una vida idílica, casada y con dos hijas. Pero cuando Callie, su hija mayor, empieza a mostrar una actitud más solitaria y extraña, recolectando huesos de animales y hablando con amigos que solo ella puede ver, Rob entra en alerta. El colmo para que intervenga e intente ayudar a su hija sucede cuando se da cuenta de que Callie podría atentar contra su hermana pequeña, Annie.

Por ello, Rob decide marcharse unos días con su hija a Sundial, el lugar donde se crió de pequeña y que ha heredado de su familia. Allí, intentará comunicarse con Callie y contarle la verdad sobre su pasado con la esperanza de poder ayudarla con lo que sea que le está pasando.

Pero Sundial no es un lugar cualquiera. Ni tampoco el hogar idílico donde se puede criar una niña. Sundial es una granja en medio del desierto donde se hicieron experimentos, se investigó y los que allí trabajaban vivieron en una especie de comuna, aislados del resto del mundo. ¿Qué es lo que hicieron allí? ¿Por qué Rob escapó de aquel lugar y por qué ahora vuelve con su hija?

Un libro que me absorbió por completo. Una lectura compleja, como todos los libros de la autora. Donde crees que está sucediendo una cosa para que al final te sorprendas con otra totalmente distinta. Donde todos los personajes son grises y los que parecen buenos no lo son tanto, y al contrario. Una novela con familias disfuncionales, violencia, giros psicológicos en una ambientación oscura, sombría y perturbadora con momentos de suspense que a mi, me dejaron con la boca abierta😦

Sundial ha pasado a ser de mis mejores lecturas del año por la tensión que me provocó, porque en algunas partes estuve asustada, en otras enfadada y en otras, simplemente se me partió el corazón.

Si os causa curiosidad lo que os cuento o ya habéis leído a Catriona y os ha gustado su estilo, no dejéis de darle la oportunidad a esta novela. No os va a decepcionar.

Hace tiempo que tenía ganas de leer a la autora y cuando vi que salía este último libro, tenía que leerlo.

Ha sido una lectura brutal, muy perturbadora, con escenas en algunos momentos no aptas para todo el mundo, con relaciones tóxicas, intrigas, experimentos y mucho misterio.

Una trama que engancha desde sus primeras páginas pues ya se va notando esas oscuridad que tiene la historia desde el comienzo, ademas he disfrutado mucho de la pluma de la autora y como nos adentra en Sundial y en su historia.

La verdad es que me ha sorprendido gratamente, tenia muchas expectativas puestas en esta lectura y las ha cumplido con creces, sin duda, necesito leer todo lo que tenga publicado.

Esta novela es escalofriante y humana a partes iguales. Los peores monstruos viven con nosotros.

La trama está basada en la complicada relación familiar de Rob, Irving,Callie y Annie. Aparentan normalidad, pero dentro de cada uno de ellos se esconde algo perturbador, sus propios secretos, sus oscuridades. El libro trata lo complicado de las relaciones entre padres e hijas, entre hermanas, entre el mismo matrimonio. Luces y sombras.

Es una historia que comienza extraña, sin poder ver por dónde puede ir o si será todo lo interesante que promete. Tiene un toque paranormal interesante aunque para mí ha sido un thriller psicológico en el que la autora te hace ver lo que ella quiere en cada momento, va complicando la trama y dándole una vuelta más en cada capítulo, todo bajo una perspectiva de engaños y penas. Me ha gustado mucho el estilo y la forma de llevar la trama hasta final por parte de Catriona Ward, quizá tenga una forma muy particular y algo excéntrica en algunos momentos, pero hace un buen cierre en este libro y te sorprende cuando creéis tenerlo todo cerrado.

Los capítulos en su mayoría son narrados por Rob y alternan el pasado de ella con el presente. La infancia de Rob fue dura, pero necesita volver a ella para solucionar el presente. El desierto la espera de nuevo.

En general he disfrutado de la novela, unos temas me han resultado más llamativos que otros, pero me ha sorprendido mucho.

“Los niños son espejos que reflejan todo lo que les sucede. Por eso hay que rodearlos de cosas buenas. No lo olvides”.

Segundo libro que leo de esta autora y segundo con el que me sorprende para bien. No sabría decir cuál me ha gustado más de los dos. En este tenemos un poco de todo, experimentos científicos, familias disfuncionales... hasta fantasmas. Y ese final… ¡ay!

Catriona tiene el talento de hacerte dudar, de hacerte volver atrás a releer páginas buscando un detalle que crees haber visto (esos ojos de qué color eran, aún hoy no lo sé), de hacerte cambiar de culpable en tu cabeza a cada poco. Juega constantemente con las identidades de sus personajes.

Pero al final todo encaja perfectamente y las piezas del puzzle se van colocando en su lugar.

No quiero contaros nada de la historia. Es, como en este género suele suceder mejor que entréis en ella sin saber nada, para poder ir haciendo vuestras propias conjeturas.

Tuve en mis manos hace nada su segundo libro y no lo compré- Se trata de “La pequeña Eve”, que la crítica ha tratado mucho más favorablemente que este así que supongo que no tardaré en conseguirlo y leerlo.

¿Y vosotros? ¿Conocéis a la autora?

Este libro fue leído en lectura conjunta con mis lindos amigos de la Librería Ambulante, a los que si no conocéis, ya estáis tardando en googlear. :)

Normalmente me suelen gustar los libros que hacen saltos temporales en la trama, pero en este caso está narrado de un modo tan confuso que muchas veces cuesta seguir la trama.

La historia comienza con buen pie, pero desarrollo de la misma se hace pesado y es como si el libro de repente tuviese un ritmo mucho más lento.

El final podría sorprender, pero se hace predecible. No es una lectura que vaya a recomendar

Sundial es una historia extraña, que al principio es difícil de entender, puesto que está construida para intrigarnos hasta que todas las piezas empiezan a encajar. Aunque es oscura y tiene tintes sobrenaturales, en realidad se trata de una trama más bien psicológica, y en la que nada es lo que parece, un recurso muy propio de Catriona Ward, quien suele despistar jugando a presentar un auténtico sinsentido que al final adquiere un significado coherente, y que invita a revisar con una nueva luz todo lo acontecido páginas atrás. Reconozco que el estilo de esta autora me encanta, me parece muy original y un soplo de aire fresco a la literatura, pero con un toque deprimente que no sé si todo el mundo es capaz de aceptar.
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Aunque me sigue encantando la forma de escribir de la autora, en este caso, la historia no me ha atrapado demasiado.

En los temas que más peso tienen en la historia encontraremos el familiar entre hermanas y el de madre-hija. Experimentos, un lugar perdido en el desierto, en medio de ninguna parte, verdades ocultas y personajes con dos caras.

La historia es buena, la manera de contarla, también, pero comparado con los otros dos libros que la autora tiene publicados en España, este ha sido el más flojillo para mí. Quizá porque los otros dos los disfruté más.
Con "Sundial" no he conectado demasiado con la historia, quizá porque el tema en sí no me ha impactado como debería, quizá porque mi mente pedía otra cosa; pero lo dicho, me sigue encantando cómo escribe la autora: despiadada, sin darte respiro, hundiéndote cada vez más en el mundo de su historia hasta que te rodea sin tregua.

Seguiré leyendo todo lo que esté por venir de la autora, sin lugar a dudas.

En palabras de la autora esta es una novela sobre madres e hijas, sobre naturaleza y educación, sobre familia y libre albedrío, entendiendo todo esto como la base de lo que somos.

Es la primera vez que leo a Catriona pero no será la última, esta experiencia, a pesar de ser en ocasiones algo angustiosa y dura de leer, ha sido increíble.

Empezando por el manejo de la narrativa de la autora, cuando los capítulos estaban narrados por Rob se notaba que era una mujer adulta con muchos traumas la que hablaba, cuando los narraba Callie parecía una niña de 13 años y cuando leíamos los capítulos de Arrowood parecían escritos por una persona con una no muy buena prosa. Para conseguir esto creo que tienes que ser muy virtuosa y la autora lo ha conseguido de sobra.

Esta historia me atrapó desde la primera página, en un principio me recordó algo a Una cabeza llena de fantasmas, luego le vi algo similar a Guía del club de lectura para matar vampiros, pero eso fue solo en los primeros capítulos, después coge un ritmo y van sucediendo tantas cosas que se separa, por completo, de todo lo que yo había leído hasta entonces para ser algo único.

Durante todo el libro me tuvo completamente despistada, la autora iba dejando miguitas de pan buenísimas pero incluso con ellas me seguía quedando alucinada cuando veía por donde nos llevaba.

Algo que creo que hay que avisar es que en el libro hay maltrato animal, si sois muy sensibles a ello debéis tenerlo en cuenta, yo lo pasé mal pero creo que la autora lo incluye lo mejor que puede y lo hace para que veas un lado oscuro y turbio del ser humano que existe y muchas veces no se quiere mostrar.

El epílogo es de 10 pero si que es cierto que me he quedado un poco desencantada con el final, excesivamente abierto para mi gusto, y eso que yo no tengo problemas con los finales abiertos pero aquí han dejado demasiadas cosas a la imaginación.

Aún así, el libro me sigue pareciendo casi perfecto. Estoy deseando volver a leer a la autora.

Catriona Ward se marca un quiénes somos, de dónde venimos y a dónde vamos espectacular. Y es que no solo desempolva una noticia real sobre experimentos conductuales en perros dirigidos por control remoto sino que además nos plantea una reflexión tremendamente humana: ¿Quién soy yo? ¿Qué hace que yo sea como soy? ¿Puedo cambiar mi forma de ser?

Y ahí es donde entra la definición de Sundial (reloj de sol), que como se dice en el libro “es un reloj enorme que va contando vidas, tiempo, días”. Ward nos lo cuenta a través de Rob, situada en el centro del ese reloj de sol donde primero es hermana, y luego hija, y adolescente, y universitaria, y esposa, y madre, y profesora y vecina. Y cada uno de sus “yoes” es una hora distinta de una misma persona, Rob.

El círculo y el espejo.
Si para Marisol la vida es una tómbola, para Catriona es una rueda o un ciclo o un reloj. La sensación de reloj que va marcando cada una de las horas o etapas de nuestra vida rezuma por todo el libro. Una historia contada desde el punto de vista de 5 mujeres: Rob actual y Rob ahora, su hermana Jack, Callie y Mía, hijas de Rob y Mía, una mujer casada con el padre de Rob. Entre ellas se produce un juego de amor y odio continuo, de encuentros y desencuentros que nos dejan ver un pasado oscuro, turbio y con un giro final bastante del estilo de Ward.

Un libro de mujeres.
Me encanta que Catriona haya desarrollado tan bien los personajes femeninos, porque Sundial es un libro de mujeres, y de cómo se relacionan las mujeres con otras mujeres.

También me parece muy interesante tratar el tema de la adolescencia pues es una etapa confusa de por sí donde la pregunta de Quien soy tiene si cabe más importancia. de hecho, es durante la adolescencia de Rob cuando descubre quién es verdaderamente ella y durante la adolescencia de Callie (su hija) cuando ella misma se da cuenta de quién es su familia y cual es su historia.

El horror en Catriona
Lo que más me gusta cuando lees un libro de Catriona Ward es que no te vas a encontrar casas encantadas, ni brujas, ni salones sombríos, ni espectros del más allá, ni seres de otros planetas. Ward apela a un horror cotidiano, ese que te puedes en encontrar al leer las noticias por la mañana o encender la tele para ver un informativo. Ese sí es un verdadero horror.
Decía Catriona en una entrevista en The Guardian, que para ella el horror es uno de los géneros más empáticos porque todo el mundo siente miedo en algún punto de su vida.

¿Eso que estoy oliendo es Stephen King?
Sé que Catriona es muy fan de S. King. No sé a vosotros pero a mí esta historia de perros en el desierto de Mojave me ha recordado a alguno de sus libros: Cujo con ese perro asesino, Cementerio de Animales (referencia obvia), y ese perro partiendo la puerta a dentelladas es muy Resplandor. Un poco de Carrie en esa Rob ensangrentada del final. Y seguro que me dejo alguno que ahora no me viene a la memoria.

Mi opinión final.
El libro me parece magistral, empezando por la forma en la que está contado. Usa dos personajes muy potentes y nos cuenta la historia desde el punto de vista de Rob y de Callie con historias que se entrecruzan y se superponen en algunos momentos lo que hace que podamos entender mejor a cada uno de los personajes: qué sienten, qué quieren, cuáles son sus miedos.

Si tengo un pero que poner es al personaje de Callie Blanca, donde creo que en algunos mementos Catriona juega a crear un narrador onmisciente que parece que todo lo sabe (conoce hasta los pensamientos de Rob en algunos momentos) como excusa para confundir al lector y crear un ambiente de incertidumbre.

La mejor parte, el final. Quizás porque tiene un punto de justicia??? Ya estamos cansados de leer el sufrimiento de Rob y es como pensar: Venga ya, Rob se merece un poco de paz y felicidad, no?

“Sundial” es mi primera aproximación a la literatura de Catriona Ward. Es una historia de terror psicológico que gira en torno a la vida de dos hermanas criadas en la soledad del desierto de Mojave por sus padre que realizan experimentos científicos sobre alteraciones en el comportamiento de los perros. La historia se narra desde el punto de vista de Rob, una de las hermanas ya casada y madre de dos hijas que sin embargo, se ve obligada a revivir su estrambótica infancia por el extraño comportamiento que detecta en sus hijas.

La novela resulta inquietante en general sin embargo, avanza a trompicones. El hecho de que se permita al lector tener la información muy medida, a cuentagotas, a modo casi de trampa, hace que a ratos la historia resulte lenta y repetitiva. de hecho, le cuesta bastante arrancar. A ratos coge ritmo y la experiencia de lectura mejora pero eso: a ratos.

Por otro lado la historia es enrevesada, es imposible empatizar con ningún personaje y algunos de ellos resultan irreales por su extremismo (el marido por ejemplo). Tampoco quedan del todo claras sus motivaciones o más que poco claras, resultan poco creíbles.

En general una lectura agridulce. La idea no es mala pero la ejecución me parece deficiente en muchos puntos. Es una pena porque como digo, a ratos, se vislumbra el