El guardián de la marea

Las primeras páginas de la novela ya nos atrapan. Vamos a conocer, después de un breve prólogo en el que encontraremos a su protagonista volviendo a su tierra natal en un barco, a una Marcela casi niña, de 15 años, realizando tareas en el río junto a otras mujeres que están lavando la ropa. También estará Herminia, a la que todas tienen por bruja, por eso nadie está a su lado lavando. Como es el único puesto que queda libre, será para Marcela, y cuando vuelva a su casa con la ropa se encontrará de nuevo a Herminia, decidirá ayudarla por lástima y allí mismo la anciana le pide unos favores a cambio de pequeños pagos, así comenzará una relación de la chica con la maldita del lugar, aún a riesgo de que a ella también la cataloguen como bruja.

Pero Marcela en verdad lleva pocos años con su familia. Fue entregada a un hospicio cuando nació ya que su madre murió, y ya eran varias bocas para alimentar, así que la dejaron allí y las monjas la educaron y cuidaron, en especial sor Felipa, que fue como la madre que no tuvo. Con el tiempo, las monjas la llevaron a su casa porque decidieron que ya era hora de que su padre se hiciera cargo de su muchacha, de esta manera Marcela llegó a una casa donde no encontró ningún cariño, con una hermana que se había casado hacía poco, Isabel, y que la odiaba y despreciaba, Gaspar, un primo que la acosaba, y un padre que la culpaba de la muerte de su esposa. Finalmente como su padre necesitaba una mujer que hiciera las cosas del hogar y lo mantuviera limpio y con comida en la mesa, la acogió. Así de triste es la situación de Marcela, que lucha por salir de su casa, imponerse en un momento y lugar en el que las mujeres necesitaban a un hombre, no tenían ninguna posibilidad solas. Sería imposible cumplir su sueño, viajar a Cuba a conocer a su otra hermana, Carmen, que en sus cartas sí dice que la quiere. Marcela está atrapada y no sabe que hacer para no desesperar.

Este es el panorama de Marcela en un contexto histórico y lugar, Las Palmas, en 1918, en plena Primera Guerra Mundial, que me ha encantado descubrir. España en el combate se ha declarado neutral, pero no por ello no está pagando las consecuencias de la guerra. Se nos va a relatar el bloqueo que sufrió Canarias por parte de los submarinos alemanes, auténticas máquinas de guerra, al no permitirles entregar ni recibir suministros, así pues, las islas se quedaron totalmente abandonadas. En realidad la guerra era con los ingleses, lo que querían los alemanes era impedir que ningún barco de Canarias pudiera abastecer a sus enemigos de materias primas o comida, por eso hundían cualquier tipo de barco que navegara en esas aguas. Los habitantes de las islas fueron víctimas colaterales, porque no recibían comida, que se acababa en la isla día tras día. Como se dice en la novela "no nos matan con bombas, pero nos dejan morir de hambre". Pese a esto, los alemanes no querían víctimas españolas. Cuando hundían uno de los barcos llevaban a la tripulación hasta la orilla y no los mataban, no literalmente claro, pero cuando no tiene para comer el resultado es el mismo. Es una situación en la que estas gentes tienen una sensación de pérdida y de abandono increíbles, porque lo que estaban sufiendo no aparecía en las noticias, no le daban importancia, e incluso su propio gobierno no hacía nada por ellos. No os quiero dar una lección de historial pero quizás mucha gente no conozca este episodio de nuestro siglo XX que no nos pilla tan lejos, yo por ejemplo no lo conocía y me ha impresionado mucho. La documentación de la novela, como seguiremos viendo, y como la autora explica en los agradecimientos, me ha resultado impresionante, con un trabajo exhaustivo que se reflejado en la calidad de El Guardián de la Marea.

Con toda esta situación, las cosas empeoran para la familia Riverol. Una noche, Gaspar, el primo que siempre está metido en asuntos turbios, aparece en la casa con el cuerpo de un oficial malherido alemán. Una vez más, la autora se ha basado en un hecho real, y con un compendio de ellos ha creado esta maravillosa historia, porque realmente y tal y como recogió la prensa de la época, en un ataque a un submarino alemán una de las veces que emergió, un par de hombres cayeron al agua. En nuestra historia será Hans Berguer quien recale en casa de los Riverol, ya que Gaspar tiene en mente, si no se les muere, pedir una cuantiosa suma de dinero por entregarlo sano y salvo, algo harto improbable viendo el estado en el que se encuentra. Por una serie de avatares al final el alemán acabará en manos de Marcela y Herminia, que se presta a cuidarlo y sanarlo a cambio de un "trabajito de Marcela" y de esta manera, el alemán y la protagonista, sin saber la una el idioma del otro y viceversa, se irán conociendo, irán aprendiendo a entenderse, y en el corazón de la muchacha aflorará algo que nunca había conocido: el amor por un hombre.

Y como todo no es eterno, Hans deberá volver a la guerra una vez recuperado (al final no se hace ningún intercambio), y Marcela queda desolada, sin nada en la vida que realmente le importe. Era algo imposible, él es mucho mayor que ella, son de países distintos, y qué caramba! Es el enemigo, el que está dejando morir a su gente, se unen todas las trabas del mundo. Sin embargo y contra todo pronóstico, Marcela tiene que cumplir el recado que le prometió a Herminia y algo sucede en un barco cuando se vuelven a encontrar.. Y hasta ahí puedo leer porque me pongo a escribir y os contaría todo el libro. Sólo os diré que en ese barco no ocurre nada, porque Hans vuelve a su submarino y Marcela a Las Palmas, y la historia de amor (por parte de ella) vuelve a verse interrumpida. ¿Qué ocurrirá entonces con nuestros protagonistas?

Parece una novela histórica con un romance pero El guardián de la Marea es mucho más, nos narra los años más importantes de nuestra historia reciente, como la Primera Guerra Mundial, la época de Franco, incluso la Alemania nazi con una prosa que te hace querer saber más más y más, muchas veces pensamos que una novela de este tipo va a ser soporífera y ya os digo que no porque son tantas las curiosidades, los hechos importantes y como te lo cuenta la autora que vais a ser incapaces de soltar este libro. Por no hablar de los momentos en los que me he sorprendido llorando a moco tendido a lo largo de esta lectura, ha sido tan preciosa toda la historia, tan emotiva, tan tierna, tan dura y cruel a la vez que ha sido imposible no emocionarme a lo bestia. Porque Marcela te cala hondo, se te mete dentro, y eres casi capaz de sentir lo mismo que ella, la acompañas en su viaje de vida durante toda la lectura, temes por su vida, sufres su indignación, se te escapa el aliento cuando accedes a sus pensamientos sobre Hans. La palabra para esta protagonista es impresionante y la palabra para esta novela es impecable.

Pero no sólo en el hecho real del bloqueo a las Islas Canarias se basa Mayte Uceda para recrear su historia más personal, ya que también nos mostrará a través de sus protagonistas otro hecho histórico desgraciado que ocurrió realmente, se trata del naufragio del barco de vapor Valbanera, que se produjo en 1919 debido a un ciclón tropical (iba camino de la Habana) y se ha llamado "El Titanic Canario". Fallecieron 488 sin contar los inmigrantes sin documentación que iban a bordo del barco. En nuestra novela, Marcela y Hans también van en ese barco, el sufrimiento está servido!

¿Y si os cuento que también la autora nos muestra los estragos de la gripe española, que se sumó a las desgracias de estas gentes? Las Islas se habían librado de la epidemia, pero cuando el bloqueo se levanto y volvieron las comunicadiones, la enfermedad aterrizó también aqui, matando a muchísimas personas, niños, ancianos... No había casi alimentos, no había medicinas... Últimamente en las novelas que estoy leyendo siempre aparece la gripe española, y me ha resultado muy curioso algo que se cuenta y es una manera de curar a los enfermos por un médico jóven e innovador: les aplicaba gasas sumergidas en agua hirviendo en el tórax y al cabo de horas las levantaba. Si había suerte se habían formado ampollas con bastante líquido dentro, líquido que les extraía con mucho cuidado de no romper la ampolla y les inyectaba y voilá! Tenemos una vacuna con el propio líquido que ha fabricado el cuerpo del enfermo con el líquido que puede hacerle inmunne. Me sorprendió tanto esto que tenía que ponerlo por aquí porque me parece una genialidad.

Los personajes ayudan muchísimo a que esta sea una historia redonda. Sin duda la absoluta protagonista es Marcela, con su determinación, su inconformismo, capaz de hacer todo por lo que cree y siente aún sabiendo que las consecuencias pueden ser devastadoras. El Guardián de la Marea es el título que merece esta novela pero la guardiana de la marea es esa Marcela que nunca dejó de pensar en su hombre, que lo perdió y lo recuperó, así varias veces, para volver a ver como se le escapaba de los dedos otra vez. Los personajes secundarios no desmerecen para nada. Desde Herminia, que nos hará reir con sus ocurrencias y chulerías, Mili, una lianta que se puede decir que le salva la vida a Marcela, sor Felipa, la verdadera madre de Marcela y muchas otras niñas del hospicio, Hans, ese alemán tan entregado a la patria con unos principios inespugnables pero que quizás sea capaz de dejar atrás por amor, Thomas Hammersmithz, imprescindible en la novela, por todo lo que ayuda a Marcela y por ser un nexo de unión, la familia de Marcela, Azarías e Isabel, padre y hermana que no sienten cariño por ella, Carmen la otra hermana a la que no conoce, y Gaspar, el malo de la novela, ese primo que siempre busca el beneficio a costa de lo que sea y que acosa a nuestra protagonista.

¿Qué deciros de la ambientación? La autora nos lleva de la mano por Las Palmas, haciéndonos partícipes de los lugares más pobres, esos hogares de familias que si bien antes no eran ricas, vivían al día y que ahora se encuentran en la pobreza, conoceremos el hospital, el hospicio donde Marcela vivió sus primeros años, con la relación tan bonita que tiene con las monjas y con alguna niña de allí, donde vivirá momentos felices y otros dramáticos que te dejan un nudo en la garganta y el corazón encogido, pero no sólo conoceremos esos enclaves, también conoceremos La Habana, aunque someramente, e incluso la Alemania nazi, llena de peligros en cada esquina por cortesía de la Gestapo, y el mar, sentiremos el mar en cada una de las páginas de esta historia.

Estructuralmente, la novela consta de 536 páginas, pero hacedme caso cuando os digo que no vais a querer que se acaben, empieza con un prólogo, y cuatro partes que contienen 46 capítulos además de un epílogo, todo muy bien estructurado y contado todo por una narrador omnisciente en tercera persona, una fórmula que funciona muy bien, hace la lectura muy amena y fácil para el lector, además de la prosa de la autora que simplemente es maravillosa.

Para acabar esta mega reseña (ya sabéis que me explayo en los libros que me conquistan), os diré que tenéis que leer esta novela porque vais a conocer hechos históricos que no son los más conocidos, porque encierra una historia preciosa llena de matices, hilada a la perfección, que no os dejará indiferentes. Os gustará a los amantes de la novela histórica y os encantará a los amantes del romance. Con unos personajes llenos de fuerza, con una trama a la que no le sobra ni le falta nada, que tiene sus momentos de intensidad, de emoción, de riesgo, de crueldad, todos necesarios, y que se ha convertido en una de mis lecturas del año. Especial mención a Herminia, su historia y su amistad con Marcela. Se me encoge el corazón al recordarlo!
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Solo el amor es capaz de vencer al tiempo, el olvido y la guerra. Una épica novela que narra el bloqueo que sufrió Canarias durante la Primera Guerra Mundial y el naufragio del Valbanera. Una historia de amor que cruza océanos y atraviesa la primera mitad del siglo XX.


Las Palmas, 1918. Marcela Riverol y su familia tratan de sobrevivir al hambre mientras se suceden los combates entre británicos y alemanes en aguas del archipiélago canario, bloqueado por los submarinos germanos. Hans Berger, teniente de la Marina alemana, es encontrado a la deriva y llevado malherido a casa de los Riverol. Marcela lo cuidará con la ayuda de Herminia, una anciana de pasado misterioso y con fama de bruja. Cuando Hans debe volver a la guerra, el vínculo entre ambos será tan fuerte que cambiará sus vidas para siempre.


Mi valoración personal:

Mayte Uceda publica su cuarta novela, El guardián de la marea, de la mano de la editorial Planeta. Esta asturiana que comenzó su carrera allá por el 2013 cuando autopublicó su primera novela Los ángeles de la torre, siguiéndole el gran éxito que fue traducido al inglés y el alemán, Un amor para Rebeca, regresa para sumergirnos en una historia que tiene amor, guerras, epidemias y el naufragio del olvidado Valbanera.


Esta historia parte de 1918 con una Marcela Riverol de quince años, una huérfana de madre que vive con su padre, su hermana y su primo pero que carece de ese cariño familiar que se supone que debería tener. Criada en un hospicio tras la muerte de su madre en su parto, Marcela pasa toda su niñez al cuidado de las monjas mas concretamente por Sor Felipa.

Tras volver a su casa con su familia, Marcela es la que se encarga de las tareas del hogar, pero siempre con el desprecio y la indiferencia de los que la rodean hasta que conoce a Herminia la bruja, una mujer que cambiará su vida para siempre.


La islas canarias se mueren de hambre debido al bloqueo que hay por parte de los submarinos alemanes, y es aquí donde Hans Berguer teniente de la Marina alemana hará acto de presencia en la vida de Marcela.

Tras un ataque a su submarino, Hans queda mal herido y es encontrado por el primo de Marcela que lo lleva a casa de los Riverol para ser cuidado. Marcela con ayuda de Herminia conseguirán cuidar y salvar a Hans, pero Marcela experimentará lo que es el amor. Ese sentimiento le dará la fuerza suficiente para querer salir y cumplir su sueño que no es otro que irse a la habana con su hermana Carmen.


El guardián de la marea es una novela que te transporta de una manera ágil a acontecimientos importantes de nuestra historia, desde el bloqueo que es sometido las Islas Canarias, la llegada de la Gripe Española, el naufragio del olvidado Valbanera donde perecieron casi 500 personas, los inicios de la segunda guerra mundial y pinceladas de la postguerra española. Como podéis ver se abordan muchos temas, pero cada uno de ellos bien documentados, estructurados y ágiles a su lectura. Marcela es la protagonista en todos estos acontecimientos junto a ese amor primero platónico y luego real con Hans.


Unos protagonistas que se te meten en la piel, con los que te emocionas y te hacen sentir esos mismos sentimientos que Marcela va sintiendo, desde el rechazo de su familia, el amor de madre que siente de la mano de Sor Felipa, el amor y la perdida constante de Hans y el amor de amistad casi hermandad con Mili.

Personajes que quedaran para mi recuerdo es Herminia, una mujer que la vida le regala esos años que le arrebataron, su hijo Thomas que da el punto paternal a la novela y Hans que es sinónimo de que la guerra puede matar a personas y destrozar vidas, pero no puede vencer al sentimiento del amor.

Con un final que es emotivo y perfecto para esa vida tan dura que ha llevado Marcela y con un epilogo que cierra para dejarnos con esa sensación de haber leído un gran libro.


En conclusión, decir que la novela me ha gustado es quedarse corto. Tras haber leído este año casi 100 libros es difícil que un libro consiga emocionarme, y atraparme entre sus páginas hasta sentir que nada hay alrededor, pero El guardián de la marea ha sido de esos libros que pasan a ser uno de los mejores libros del año. Ni que decir tiene que lo recomiendo tanto a los amantes de la histórica como a los que disfrutan con una historia que te llegue al alma y se quedan con un trocito de ella.

Esta novela llegó a mi de casualidad y la verdad es que me ha sorprendido para bien. Trata temas interesantes como el amor y desamor en la guerra, conflictos familiares, o nos enseña como era la sociedad en los años en que trascurre la historia, además de que tenemos una protagonista que representa claramente a una mujer empoderada y guerrera que lucha por lo que quiere y que por aquel entonces no era muy común, por lo que ese matiz del personaje ya me cautivó desde el primer momento.
Te hace sentir muchas cosas, pena, alegría, tristeza, amor, dolor y muchas más cosas debido a que las historias de los personajes son muy intensas y dan muchos giros. Estos giros al principio te sorprenden y te hacen la historia más interesante, pero cuando ya vas a mitad de libro y siguen apareciendo giros y más giros, cansa un poco porque o ya estás esperando a que pase algo y sabes lo que va a pasar en ese giro porque es lo que tu harías o aparece de repente y dices: nooo otro más no. Para mi gusto en este libro se usa demasiado este recurso y llega a parecerme pesado y cansino, aunque la historia en sí es tan buena y apasionante que no influye en poder decir que me encantó el libro.

El guardián de la marea es una novela romántica basada en una de ficción histórica que nos llevará a las Islas Canarias. La historia que nos cuenta la novela empieza en el año 1918 durante la Primera Guerra Mundial, y terminará en 1947, después de acabada la Segunda Guerra Mundial. Además del bloqueo que sufrieron las Islas Canarias y en particular Las Palmas de Gran Canarias, que es donde se desarrolla gran parte de la trama, nos cuenta el naufragio del transatlántico español Valbanera, el mayor siniestro naval español en tiempos de paz. La autora se ha documentado muy bien para contarnos los hechos históricos, pero en realidad todo gira en torno a la historia de amor de los protagonistas durante unos veinte años. No soy de leer novelas románticas, pero me animo cuando tienen un contexto histórico interesante, como ocurre con la novela escrita por Mayte Uceda.

Marcela Riverol es la gran protagonista, junto con Hans Berger. Ella es una joven que vive en Las Palmas de Gran Canarias, con su padre, su hermana mayor Isabel y un primo llamado Gaspar. Se crió con las monjas, en un orfanato desde que nació y sor Felipa la ha cuidado siempre. Su madre murió al tenerla y su padre no quiso saber nada de ella. Se ha criado con la indiferencia de su padre, la envidia y casi odio de su hermana Isabel. de alguna manera la culpan de su muerte. Tiene otra hermana, Carmen, que se fue a La Habana con la tía Flora. Aunque no la conoce siempre tiene alguna palabra para ella cuando escribe desde allí. El único cariño que ha recibido Marcela desde pequeña ha sido el de las hermanas, y en concreto el de sor Felipa.

Será importante en la vida de Marcela la amistad que surgirá con Herminia “Maldiciones”, una vecina mayor con la que coincide en el río lavando la ropa, y que está considerada en el barrio casi como si fuera una bruja. Es un personaje que me ha gustado mucho, y es de gran ayuda.

Por otro lado, está el teniente de la Marina Alemana, Hans Berger. Se encuentra en un submarino alemán en aguas del archipiélago canario cuando un accidente hace que caiga al agua herido. Lo encontrará Gaspar, el primo de Marcela y lo llevará a su casa. Se curará gracias a los cuidados de ella y la ayuda de Herminia. Poco a poco crecerá el amor entre ellos a pesar de la diferencia de edad, del idioma y de la guerra.

Hans, como teniente de la Marina alemana, participará en dos guerras mundiales.

En El guardián de la marea podemos encontrar una bonita historia de amor, pero además encontraremos historia, política, guerra, honor, lealtad, malos tratos, amistad, bondad, una protagonista con un gran corazón, una gran fuerza y muy luchadora.

El guardián de la marea es una cautivadora y entretenida novela romántica con un contexto histórico muy interesante.


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La novela comienza en el año 1018 en Las Palmas. Allí vive Marcela Riverol con su padre, su primo y su hermana mayor. Su madre murió al nacer ella y su padre, no sabiendo qué hacer con el bebé, lo dio a las monjas. En el horfanato de las monjas estuvo viviendo Marcela hasta que, habiéndose casado su hermana mayor, la reclama su padre para que le cuide y se encargue de las faenas del hogar. Marcela es poco más que una cría, apenas tiene quince años pero está acostumbrada a una vida dura. Lo único que echa de menos es el cariño: cariño que le ha faltado siempre y le sigue faltando pues en su familia no paran de hacerle sentir que fue la causante de la muerte de su madre y sabe que no es querida.

La situación de Canarias en aquella época era crítica. En plena guerra mundial, aunque España no participó en ella, la situación estratégica de las islas hizo que muchos barcos y submarinos extranjeros surcasen sus aguas y que Canarias sufriese de un grave bloqueo que provocó que los víveres apenas llegasen y que la población prácticamente muriese de hambre. Un submarino alemán es atacado por un barco inglés y tres marineros caen al agua. Uno de ellos esun oficial, Hans Berger. Es rescatado por el primo de Marcela que lo lleva a casa de su tío para cuidarlo y luego poder pedir un rescate por él. Aunque el alemán está muy mal herido, los cuidados de Marcela consiguen que se recupere y entre la joven y el alemán nace una atracción física, al menos por parte de ella.

Como he dicho al principio, me ha encantado la novela. Ya me gustó desde un principio pero, según iba avanzando, cada vez me iba gustando más (aunque parezca increíble porque desde el principio me gustó muchísimo). Y el final es tan, tan, pero tan bonito que me hizo incluso llorar de la emoción. No sabría decir qué es lo que más me ha gustado: si la historia en sí, los personajes, la ambientación, la parte histórica... Me ha gustado todo tanto que me es difícil elegir una sola cosa y no tengo ni una sola pega que ponerle.

La ambientación espacial e histórica es preciosa e interesante. Desconocía por completo la situación de bloqueo que vivieron las islas durante la primera gran guerra. La situación de desabastecimiento, la pobreza, el hambre, los submarinos aliados y alemanes que pululaban por aguas cercanas… Como era un tema del que no había oído hablar, me ha resultado sumamente interesante. También todo lo relacionado con el naufragio del Valbanera en aguas cubanas.

Los personajes son inolvidables. Empezando por la protagonista, Marcela: poco más que una adolescente al empezar la novela, la vemos crecer y convertirse en una mujer. Y, como me gusta a mí, también sabremos qué ha sido de su vida años después: vamos, que la acompañamos durante prácticamente toda su vida aunque lo más grueso de la acción transcurra en esos primeros años de adolescencia y juventud. No es ella quien narra la historia aunque como si lo fuera, pues todo se cuenta desde su punto de vista y acabaremos conociéndola perfectamente bien. Y queriéndola porque se hace de querer: es una mujer frágil y dura al mismo tiempo, falta de cariño pero que derrocha amor, buena gente. En fin, muy especial. Y los demás personajes están a la altura, destacando entre todos ellos Herminia, la bruja. Herminia es una mujer que vive sola, todo el mundo le huye, le insultan, le llaman bruja y otras cosas peores. Sólo Marcela será capaz de mirar en su interior y de acercarse a ella para descubrir quién es Herminia. La relación entre ambas mujeres es preciosa, lo mismo que la que une a Marcela con la monja del colegio en el que se crio que hizo las veces de madre, o con otra niña pequeña del hospicio que viene a ser como su hermana pequeña… No sólo hay personajes bonitos en la novela, también los hay odiosos como Gaspar, el primo de Marcela. Y su hermana y padre tampoco es que sean para invitarlos a tu casa…

Y luego está Hans, el alemán, y la preciosísima historia de amor que surge entre ellos. El tipo de historias que más me gustan a mí, llena de drama y dificultades por superar. Y totalmente creíble. En fin, que con Marcela y Hans se me ha caído la baba, no lo voy a negar.

El estilo de la autora me ha encantado. Ya digo que no había leído nada suyo pero a partir de ahora le seguiré la pista porque me ha gustado mucho cómo ha construido esta preciosa historia y estos personajes tan fuertes; cómo la ha contado con tanta elegancia y, al mismo tiempo, haciendo de ella una lectura sumamente entretenida y absorbente.

Conclusión final

Lo vuelvo a repetir: me ha encantado “El guardián de la marea”: Una historia preciosa narrada de una forma bella que recibe la máxima nota y va directa a mis mejores lecturas del año.

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