La ignorancia nos lleva a poner etiquetas a todo. Y lo peor de las etiquetas es cuando uno mismo las acepta.
|
La ignorancia nos lleva a poner etiquetas a todo. Y lo peor de las etiquetas es cuando uno mismo las acepta.
|
Había abrazado el espejismo porque necesitaba un poco de aquello , de la ilusión de estar vivo , de la confianza ignorante con la que todos vivimos nuestras vidas sin pensar en la muerte que nos acecha .
|
Es como si al nacer la balanza estuviera totalmente inclinada del lado de la vida, mientras eres pequeño todas las personas que conoces, tus padres, tus hermanos, tus amigos, los padres de tus amigos, todos están de este lado. Del lado de los vivos. Incluso en la juventud, cuando empiezas a ser consciente de la muerte, siempre es la de alguien que no te toca demasiado cerca. Luego fallecen tus padres, los amigos de tus padres, los padres de tus amigos, un amigo, tus profesores, y la balanza empieza a inclinarse hacia el otro lado. Es el peso de los muertos.
|
Noah, lo que es profundamente egoísta es no dar a los demás la oportunidad de decidir. Cada cual debe hacer su camino
|
La ignorancia nos lleva a poner etiquetas a todo. Y lo peor de las etiquetas es cuando uno mismo las acepta.
|
En ninguno de los libros que trataban la propia muerte había visto que apareciese el momento en que tienes que llorar por ti con un dolor hondo y profundo, con toda la consternación de haber perdido, con toda la amargura de saber que ya no puedes volver atrás.
|
Que ni todos los policías ni los militares con sus cascos, sus fusiles y sus escudos eran tan intimidantes como una anciana con su collar de perlas y su bolso bueno de piel al salir de misa, o una joven madre empujando la sillita de su bebé. Y que con un gesto de infinito desprecio constituían la más afilada punta de lanza que una sociedad podía cerner contra su Gobierno. Que el modo en que reclamaban la calle, con orgullo y silencio, solo era un aviso, porque en unas horas cederían su espacio a los que venían detrás.
|
La ignorancia nos lleva a poner etiquetas a todo. Y lo peor las etiquetas es cuando uno mismo las acepta.
|
La mayoría de la gente tiene un concepto de la buena y la mala suerte bastante equivocado o, cuando menos, sesgado. La repetición del error como dogma puede llegar a convencernos de que tenemos mala suerte o de que somos tremendamente afortunados solo porque desconocemos las demás opciones.
|
Las corazonadas no existen, son información e instinto.
|
Gregorio Samsa es un ...