La última carta de amor

Las historias escritas en varios tiempos siempre me producen cierto temor porque pueden resultar liosas; pero este no ha sido el caso. A modo de prólogo y epílogo tenemos la historia actual de Ellie y como novela principal tenemos la vida de Jennifer que a su vez se nos divide en el antes y el después del accidente que sufre. Los tiempos están muy bien estructurados y en todo momento el lector sabe dónde está.
El comienzo de la trama me enganchó totalmente, tanto la parte de Ellie como la de Jennifer. Me ha gustado mucho que hasta cierto punto del libro la autora mantenga en secreto la identidad del amante ya que ello te lleva a indagar y sospechar de uno u otro personaje. Tan sólo ha habido una parte, cuando ya conocemos su identidad, que me ha resultado más lenta, la trama no avanza a buen ritmo y los personajes parecen no evolucionar; pero tras unas cien páginas, la historia de los amantes vuelve a coger rumbo y se vuelve emocionante llegando a enlazarse de nuevo con Ellie en el 2003.
Los personajes están muy bien definidos y la autora es muy buena expresando los sentimientos y pasiones de estos, de hecho durante toda la historia se centra en ello y parece que deja un poco de lado las descripciones de los lugares, la moda, etc. de los sesenta y lo he echado en falta. de todas formas, sí que destaca y me ha parecido muy interesante, la situación de las mujeres de la época, especialmente las casadas, cómo sus vidas bailaban totalmente al son de las de sus maridos y como lo correcto era una mujer sumisa y siempre en segundo plano. El personaje de Jennifer al principio no me convencía del todo, pero sufre tal evolución personal y sus sentimientos están tan bien expresados que al final me ha encantado.
En cuanto al cierre final de la historia, tan sólo diré que es totalmente adictivo, las últimas páginas las tuve que leer del tirón porque las ganas de conocer como terminaba todo iban ‘in crescendo' a cada hecho que ocurría. En definitiva una buena lectura que aunque no es perfecta, puede que alguna parte resulte algo aburrida, es bonita y el final es estupendo.

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No sé que hace Jojo Moyes, pero cada vez que se pone a escribir, es una "obra maestra", por decirlo de alguna manera, escribe historias magníficas y llenas de sentimiento.

Jojo Moyes es sin duda una de mis autoras imprescindibles. Se hizo conocida a raíz de su novela Yo antes de ti, sin embargo, hace muchos años que leí por primera vez una novela suya llamada El viaje de las novias, maravillosa, por cierto.
La última carta de amor fue publicada anteriormente bajo el nombre de Hasta siempre, mi amor. Bitácora de mis lecturas avisó en las redes sociales para que los seguidores de esta autora no compraran la novela si ya la tenían. En mi caso no era así y entró directamente en mi lista de deseos.

La historia comienza en 1960, Jennifer Sterling despierta en un hospital sin saber muy bien qué ha ocurrido. Tiene amnesia, no recuerda a su marido, pero si siente que algo no marcha bien. Pese a que todos le dicen que es una mujer afortunada, casada con un empresario de éxito que tiene todo lo que puede desear una mujer ella siente que no es así.
Un día descubre una carta de amor escondida en uno de sus libros y poco a poco su mente comienza a ponerse en marcha. Pronto descubrirá que estaba enamorada de otro hombre, un hombre por el que estaba dispuesta a abandonarlo todo cuando su vida se torció.

Año 2003, Elli es una periodista con una situación personal complicada: está enamorada de un hombre casado. En lo profesional no está teniendo muy buena suerte. Debe buscar entre papeles viejos en busca de una historia y consigue unas cartas de amor de los años sesenta. Decide entonces indagar más, saber si los protagonistas siguen vivos y sobre todo si lograron vencer las dificultades y ser felices.

La novela se divide entre el pasado y el presente, aunque la mayor parte de ella corresponde al pasado. La historia entre Jennifer y su amor es dura pero llena de sentimientos y emoción.
Jennifer vive en una época en la que el papel de la mujer es el de florero, ir colgada del brazo del marido siempre bien arreglada y sonriente. Y hasta ese momento ha sido medianamente feliz con esa vida, con un marido distante y arisco que apenas pasa tiempo con ella. Todo cambia cuando conoce a un hombre que le hace darse cuenta que ella puede ser mucho más en la vida. Puede tener aspiraciones, un trabajo, un amor real, una vida plena…
La relación entre ellos dos está cargada de pasión y esperanzas en un futuro improbable. El divorcio no está contemplado y Jennifer no sabe cómo salir de esa situación. Es una lucha continua entre el deseo y el deber.

Me ha gustado muchísimo esta primera historia de amor. Pese a los obstáculos se vive un amor real, apasionado que puede con todo, incluso con la distancia y el dolor.

La parte actual de la novela es menos “mágica”. Elli es una mujer moderna que se ha enamorado de un hombre casado. Aunque intenta aparentar que no pasa nada tiene la esperanza secreta de que él termine dejando a su mujer para irse con ella. Aunque internamente sabe que eso jamás pasará.
La búsqueda de los protagonistas de esas cartas de amor que ha encontrado son el motor de esta parte de la historia. Así como el desarrollo de su propia relación.

Como pega solo podría poner el poco orden de la historia para que el lector pueda situarse. En otras historias se encabeza con las fechas cuando se cambia de época, en este caso no, se cambia de capítulo y de repente estas en otro sitio. Dentro de los años sesenta se van mezclando lo que ocurre y lo que ocurrió en el pasado y tampoco está delimitado ni explicado. Durante buena parte de la novela estuve un poco liada.

La última carta de amor me ha parecido una novela preciosa. Una historia de amor compleja, dura y cruda por culpa de las circunstancias, de la época y del miedo a lo desconocido. Un amor maravilloso que perdura a través de los años, de los obstáculos y la distancia.


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