El misterio de la cripta embrujada

🔹 Las enigmáticas desapariciones de niñas del colegio de las madres Lazaristas de San Gervasio son el punto de inicio de la aventura indagatoria que tiene como protagonista a un cliente del manicomio, quien, obligado a convertirse en investigador, se verá envuelto en toda clase de percances de los que logrará salir llevando a cabo su cometido y descubriendo una intrincada farse de gente pudiente.

💭 Después de un libro duro yo necesito alegría, y oye, me he reído. En la mente de este autor nos encontramos ante una historia con dejes absurdos y una trama entretenida. Me lo he leído de un plumazo porque la verdad es que te engancha. Me he partido de risa en varias ocasiones (es que suelta cada burrada), y he pasado una buena tarde con él. Sobre todo lo recomiendo para pasar un buen ratito entretenido, o alternar entre libros más serios.

No me gustan demasiado los libros jocosos, las sátiras, las parodias: los estimo fríos, guardando un distanciamiento feroz entre lo que dice y lo que recibo, como si a cada paso me diese un codazo: "¡toma zasca! ¿a que soy ingenioso (léase chusco, las más de las veces)?".

Dicho esto, los de "el (penoso) detective innominado" de Mendoza son de mis preferidos, y sobre todo éste que nos recomendó con su gentileza habitual @chicthulhu para mis queridxs #addictxslcs , y del que guardaba muy buen recuerdo de cuando se publicó, como un regalito a los lectores asombrados por su primera novela (próximamente objeto de otra lectura conjunta).

Sin pretensiones, con una historia un tanto titubeante, pero con una aceradísima visión de la justicia social y, sobre todo, con un deslumbrante lenguaje que bien podríamos llamar culterano mas sin enturbiar las aguas en que podría bien nadar El buscón don Pablos (y que de perlas le vendrían a nuestro apestosito protagonista), que nos da una deleitosa y divertida lectura, arremolinados en las andanzas a través de una Barcelona que ¿ya no es?, ¿o es acaso esa lucha por la vida partiendo del humilde origen un tema eterno?.

Con "El misterio de la cripta embrujada" nos metemos de lleno en un mundo de locos, con una investigación estrambótica llevada por un personaje de lo más peculiar. Basta con leer su carta de presentación…

"Creo llegado el momento de disipar las posibles dudas que algún amable lector haya podido haber estado abrigando hasta el presente con respecto a mí: soy, en efecto, o fui, más bien, y no de forma alternativa sino acumulativamente, un loco, un malvado, un delincuente y una persona de instrucción y culturas deficientes…"

Lo que me gustó de este libro fue el humor que dejaba sitio para alguna crítica más o menos encubierta sobre aspectos esenciales para nuestro día a día. Un sinfín de sinsentidos que encubren perlas de sabiduría.

En ciertos aspectos, el protagonista, nuestro detective sin nombre explícito durante toda la historia (aunque sí tiene uno, como nos lo recuerda el autor en su prólogo), me recordaba a otro personaje inolvidable: Fermín, incansable amigo de los Sempere de Carlos Ruiz Zafón. Y el estilo humorístico también me llevaba al de nuestro Luis A.D. Mirado (no os perdáis sus libros si os gusta este tipo de comedia).

Siendo la segunda obra de Eduardo Mendoza que llega a mis manos en estos años, no cabe duda que seguiré con el autor. Cierto es que había leído hace muchos años "La verdad sobre el caso Savolta', pero era otro estilo. Lo que sé, es que la siguiente será la archiconocida "Sin noticias de Gurb".

Había leído ya esta obra en mi juventud, pero tras esta relectura, la cual ha merecido mucho la pena, me he dado cuenta de que no le saqué el jugo que debía en su tiempo. Sé que la disfruté, porque tenía ese poso de que había sido una novela que me había gustado. He de reconocer, que después de casi treinta años, me ha cautivado.

La obra está escrita en primera persona (tiempo pasado) y tiene como protagonista a un antiguo delincuente, internado en un manicomio (del cual no se menciona su nombre), y que llega a un trato con el comisario Flores, para que si consigue averiguar quién está detrás de las desapariciones de unas adolescentes de un colegio de monjas, ganarse la libertad. El hecho de que esté narrada por un personaje con trastornos mentales hace que por momentos, la trama pueda volverse un tanto difícil de entender, lo que requiere la atención del lector en cada párrafo.

Es una novela urbana, que se desarrolla en unos tres días en la Barcelona de 1977 (principios de la transición en España), hecho que el autor aprovecha para tocar algunos temas políticos y sociales con maestría e ironía, además de criticar a la gente acaudalada de la ciudad y mostrar las diferencias que existían entre los diferentes estratos sociales.

Nos encontramos ante una historia pintoresca y cómica, la cual me arrancó varias sonrisas durante su lectura, sobre todo por las ocurrencias y las salidas de su protagonista ante los obstáculos e imprevistos que le surgen durante el transcurso del caso que está resolviendo.

Los personajes, además de ser bastante variopintos, están muy bien creados, y los acontecimientos que se nos relatan, perfectamente hilvanados, con una introducción, un nudo y un desenlace de manual. Una vez acabada, “El misterio de la cripta embrujada” es de estas historias que te saben a poco y de las que echas de menos que el autor no haya escrito treinta o cuarenta páginas más por lo bien que te lo has pasado mientras la leías.

El estilo de Mendoza es sencillo, ameno y desenfadado. Su forma de escribir y la manera en la que desarrolla a los personajes y sus pensamientos hace que la lectura sea de fácil asimilación. Eso sí, utiliza bastantes cultismos, y algún que otro arcaísmo, que no impiden la comprensión del texto.

Si os apetece leer esta obra, sabed que forma parte de una trilogía compuesta por dos obras más: “El laberinto de las aceitunas” y “La aventura del tocador de señoras”.

Esta ha sido una lectura exquisita. El conocimiento del español de Eduardo Mendoza es verdaderamente envidiable. Ojalá tuviera la mitad de vocabulario que tiene él. Además de aprender nuevo léxico en cada párrafo, es una lectura muy divertida y jocosa. Es probable que su sentido del humor no esté hecho para todo el mundo, pero hay muchas partes donde me he reído a mandíbula batiente.
La parte floja de la novela es su historia. No obstante, el propósito del escritor es precisamente ese. La trama es bastante absurda y escueta lo cual concuerda con el tono humorístico de la misma. Por hacer un símil diría que es algo parecido a Mortadelo y Filemón, pero en novela.
Ha sido mi primera lectura de Mendoza y por descontado que no será la última. Me ha dejado con ganas de más.

Es un libro que encontré porque alguien lo había tirado al lado de una basura, me llamó la atención y decidí cogerlo para leerlo. Tardé casi 1 año en leerlo ya que tenía pendientes otros libros antes pero me encantó porque mis expectativas eran bastante bajas, pensé que sería un libro que recomiendan a los niños en la escuela y, lo sea o no, me sorprendió bastante. El final es muy inesperado y está todo tan bien descrito (sin exagerar) y tan bien narrado que pude meterme dentro de la trama e imaginarme cada escenario que explicaba. Me imaginé cada niño, cada casa, el pueblo... Si te gusta el misterio, te recomiendo que le des una oportunidad porque lo cierto es que no se tarda nada en leerlo.

Qué manera tan curiosa de escribir Mendoza, yo pensando en la primera página "menudo tostón me espera" y todo lo contrario, me ha gustado mucho. Ese don de la palabra y un vocabulario tan amplio, que al final me ha sacado alguna que otra sonrisa. ¡Lectura rápida y muy agradable!

Llevaba años y años escuchando hablar de este autor y de su ‘sin noticias de Gurb' y de su detective loco y anónimo, pero por una cosa u otra nunca me había animado a leerlo. Hace poco compré las primeras aventuras de este detective tan peculiar, esperando esa chispa que hiciera que me animara y disfrutara de su lectura, y mira por donde, en un post sobre ‘sin noticias de Gurb' de @loslibrosdesilvia, salió el tema y saltó esa chispa. Gracias por la recomendación!! ❤️ El libro me ha encantado!!
El protagonista principal, un hombre al que sacan del manicomio para encargarle que resuelva un caso donde unas niñas han desaparecido de un internado religioso. Caso con mucha similitud a uno ocurrido hace algunos años.
El encargo es cuanto menos sospechoso y nuestro protagonista es capaz de salir airoso de cuantas situaciones complicadas se le presentan con una sobrada imaginación. El libro reparte humor en cada página que lo compone y trata gran cantidad de temas actuales como son la política, la diferencia de clases sociales, la vida de los pueblos, Franco, la Iglesia,... siempre desde el punto de vista de este loco que todo lo ironiza.

💙💙Lo mejor💙💙
- Humor, ironía, un poco más de humor, otro poco más de ironía,...
- Pocos protagonistas tienen tanto carisma como nuestro loco detective.
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💔💔Lo peor💔💔
- No sé si calificarlo como negativo porque a lo mejor es culpa mía pero había mucho vocabulario que no había leído/escuchado en mi vida, aunque por el contexto se podía adivinar su significado.

Entretenido, divertido y ágil, para pasar un buen rato, pero poco más.

Tenía ganas de leerlo por ser de los más famosos de Mendoza, pero sus otros libros que he leído también me han hecho pasar buenos ratos, también son simpáticos pero su humor, siempre gamberro, me ha aportado más que en éste.

Es un libro que disfruté muchísimo, sobre todo porque estaba en mi época de instituto y, en comparación con el tipo de literatura que nos obligaban a leer, "El misterio de la cripta embrujada" era un soplo de aire fresco. Me gusta mucho el realismo que se aprecia en el lenguaje que utilizan los personajes y, aunque no es un libro de misterio como tal (en mi opinión es una parodia de este género), la resolución del enigma me resultó muy divertida.
Además, creo que es un libro que refleja muy bien la época en la que está ambientada. Leí que Mendoza la escribió en Nueva York, por lo que pienso que el autor pudo ver España desde fuera y desde otra perspectiva, lo cual permite reconstruir, a partir de sus páginas, esos barrios pobres por los que se mueve el protagonista del libro.