La historia comienza con la protagonista, Jean Louise, rememorando su infancia en Maycomb, Alabama. Scout (como es su apodo) describe el pueblo y a sus habitantes, entre los que por supuesto se encuentra su familia, compuesta por su padre, un abogado ya de edad algo avanzada, y por su hermano mayor Jem; así como también del resto de su círculo familiar y vecinos. Entre ellos se encuentra el que sería el mejor amigo de ella y su hermano, Dill, quien viene a Maycomb todos los veranos y con el que entablaron una amistad que básicamente consiste en cometer travesuras, como es típico a su edad. Entre ellas se encuentra el intentar sacar de su casa a Boo Radley, un vecino de mala fama que no sale de su casa desde hace quince años; un hecho que contribuyó a que los niños dieran rienda suelta a sus fantasías y se inventaran todo tipo de historias respecto a él.
Sin embargo, el aspecto central de la novela no se menciona hasta más adelante, cuando el padre de los niños, Atticus, decide ejercer como abogado de Tom Robinson, un hombre negro al que se lo acusa injustamente de haber violado a una mujer blanca. Sin embargo en ese caso no importa que sea inocente, porque la discriminación estaban latente en esa época, y Atticus tiene prácticamente a todo el pueblo en contra en su intento de defender a un negro.
Esta novela da lugar a la reflexión sobre el racismo imperante no solo en la época en que transcurre la historia o siquiera en la que fue escrita, sino también en la actual. Creo que aborda un tema relevante y por ese motivo merece ser leído.
+ Leer más