Matar a un ruiseñor

Tras una vuelta por mi biblioteca me topé con este clásico y tras ojearlo decidí llevármelo,sabía que tenía muy buena crítica y quizás por eso no me llegó a entusiasmar. Si es cierto que es un libro que recomendaría como lectura para adolescentes ya que es una lectura que engancha y entretiene,quizás por la visión de nuestra entrañable Scout,que es quien nos contará la historia y la gran integridad de Atticus,su padre que ejerce como abogado.Esta lleno de valores,ideales y principios,algo que no abunda en nuestra sociedad,es una crítica también a la sociedad americana que por aquellos años treinta la palabra de los negros no tenían valor ante un tribunal.A pesar de que es una buena novela desde mi punto de vista no la veo para un Pulitzer, seguramente influyó bastante la repercusión que tuvo políticamente el contar una historia tan comprometida para ese país.

Siempre he asociado la lectura de una novela a un viaje. de estos viajes a letras puedes salir mejor o peor parado, pero todos dejan huella. Esta marca puede ser pequeña y efímera o gigante y eterna. Matar un ruiseñor, contra todo pronóstico, me ha dejado una huella indeleble de diplodocus.

Digo “contra todo pronóstico” porque el viaje comenzó muy tranquilo paseando por las calles de un pueblo de Alabama, con una narradora de ocho años, con su hermano, con su padre, con su misterioso vecino y con un juicio en el horizonte. Aún eran desconocidos para mí y caminaba sin involucrarme emocionalmente.

A medida que pasaban las páginas he comenzado a conocerlos mejor. Estoy en Maycomb, la narradora es Scout, su hermano es Jem, el padre es Atticus Finch, su vecino es Boo Radley y se va a juzgar a Tom Robinson. La segregación racial y la pérdida de la inocencia van calando en mi interior.

Y llega el punto final del viaje y me da mucha pena abandonar el pueblo y a los personajes. Y las tres estrellas se convirtieron en cuatro a mitad de recorrido… y las cuatro ahora son cinco. Y el diplodocus que me ha dejado su huella me dice que he leído un novelón.

Los niños y los adultos viven realidades diferentes. Tal vez, la forma en que los pequeños ven el mundo que les rodea sea parcial, sesgada, influenciada por su entorno y sus progenitores. Tardan en comprender los matices y las implicaciones de cada acción. Su aprendizaje es lento y está condicionado por sus propias experiencias vitales. Puede que, por eso, la mayoría no entiendan cómo se puede obrar mal a sabiendas, cómo los adultos sólo encuentran motivos para hacer lo incorrecto. El tiempo les enseñará, tarde o temprano, que los prejuicios, la tradición y el miedo pueden pesar más que la razón o la justicia más elemental.

La novela se ambienta en Maycomb, un pequeño pueblo de Alabama, en la década de los 30. En una comunidad tan pequeña y cerrada como esa, partidaria de la segregación racial, donde todos se conocían y sufrían en mayor o menor medida las dificultades económicas derivadas de la Gran Depresión, el miedo a un estallido de violencia proveniente de la comunidad negra estaba cada vez más presente, aumentando la radicalización de la población.

Scout, una niña de 6 años, y su hermano mayor Jem no son conscientes de todo esto. Su universo se reduce a los juegos, la escuela y una creciente obsesión por Boo Radley, un misterioso vecino que apenas sale de casa y del que se cuentan leyendas de todo tipo. Su padre, el viudo Atticus Finch, abogado inteligente y de gran corazón acostumbrado a nadar contracorriente, trata de criarles libres de prejuicios y rencores con la ayuda de Calpurnia, la sirvienta de color que se comporta como una madre con ellos, y de la tía Alexandra, una mujer devota a su familia y anclada irracionalmente en la tradición. Cuando a Atticus le encargan la defensa de Tom Robinson, un afroamericano acusado de violar a una mujer blanca, el apacible mundo de los niños comienza a desmoronarse.

Harper Lee ganó el Premio Pulitzer en 1961 con esta obra que ha pasado a la historia de la literatura norteamericana con total merecimiento. La autora no sólo creó unos personajes memorables, sino que se sirvió de ellos para retratar excepcionalmente lo mejor y lo peor de aquella sociedad. Durante los 3 años en que se desarrolla la trama, el lector será niña con Scout y se hará preguntas que, a pesar de dibujar una sonrisa en él, le harán reflexionar. También adolescente a través de Jem; noble, combativo y con dificultades para tolerar la injusticia. Y sobre todo, soñará con ser Atticus, y poseer unos valores inquebrantables basados en la comprensión, el amor, la solidaridad, la tolerancia y el perdón.

Esta novela se centra en la visión de una niña, pero no es infantil. Hay un juez, un jurado y un acusado, pero no es un drama judicial. Hay víctimas y es descorazonadora por momentos, pero no es triste. Esta historia es parte de la formación que todos necesitamos; con ella aprenderemos que hay personas que son como los ruiseñores; y que hay que pelear contra todo, si es necesario, para evitar que maten a un ruiseñor.
Enlace: https://elyunquedehefesto.bl..

17/agosto/2023
Matar a un ruiseñor
Harper Lee

Un clásico de la literatura norteamericana, una historia que hay que leerla despacio y que pone a reflexionar. La historia se desarrolla en los años posteriores a la gran depresión de 1929, en el ficticio pueblo de Maycomb, Alabama.

Scout Finch nos narra su vida en medio del racismo, los prejuicios de la sociedad en la que vive. Scout, Jen su hermano y familia se ven inmersos en las criticas y odio, rechazo de la sociedad luego de que su padre acepte defender a un ciudadano afroamericano Tom Robinson, acusado de violar a una mujer blanca llamada Mayella Ewell. A la par de esta historia Scout investiga a un muy misterioso vecino que solo sale de noche a entregar regalos.

Una novela con personajes representando estereotipos, hace una critica a la sociedad sobre la segregación racial y los prejuicios. Muy recomendable lect

Uno de mis “eternos pendientes”, en serio, desde pequeña, lo veía, lo quería leer y nunca me atreví… hasta ahora. Tampoco vi la peli por no fastidiarme lo que podría llegar a sentir.
Y ha sido un bombazo, de verdad, tiene más de 300 páginas pero se me ha hecho muy corto. Me encanta Scout, me chiflan los valores que los hermanos aprenden de su padre ¡y está escrito en 1960!, una novela inolvidable que habla de lo peor y lo mejor de la sociedad, un reflejo de todos los que nos encontramos cada día en la mirada de los otros, del miedo a lo desconocido, en esta época les tocaba a los negros, luego serían las mujeres, ahora los homosexuales ¿a quién le tocará próximamente?
Pero también habla de inocencia, de personas que se niegan a sentir ese odio, que ayudan sin pedir nada a cambio y sin mirar cómo es el tomador de la misma.
Los personajes son muy entrañables y la trama está muy bien escrita, de esas que se tienen que saborear lentamente. La parte del juicio es magnífica y me ha mantenido en vilo hasta la sentencia. La parte final es la más intensa, no podía dejar de leer.
Pues prefiero ser como Atticus, vivo y dejo vivir. Una lectura muy recomendable

Previo a leer el libro tenía una idea bastante preconcebida sobre que trataba, en parte por los dichos sobre el libro y también por imágenes de la película (la que no he visto) así que para mí esta es la historia de un juicio, del juicio de un hombre negro acusado de la violación de una mujer blanca y del abogado blanco que se compromete con su defensa, sabiendo que tiene todas las de perder, en una sociedad en que si el acusado es un hombre de color su inocencia o culpabilidad es irrelevante (hasta acá no he dicho nada que no aparezca en las sinopsis y reseñas)
Ahora bien esta percepción no estaba tan alejada de la realidad, esta es una novela de un juicio en que lo racial es el factor decisivo. Sobre el juicio descansa gran parte de la parte central de la trama. Pero decir que el libro es solo sobre el juicio es no dar a la novela su real dimensión, pues está es sobre una sociedad, sobre una época, de un pequeño pueblo que de una y otra manera representa a tantos otros poblados en que discriminar a la gente de color ni siquiera era cuestionado porque se consideraba como algo natural.
Curiosamente en el pueblo hay individuos que saben que esto está mal, y que como individuos sienten que las personas de color merecen igual respeto, pero hay un status quo tan poderoso que no son capaces de procurar que las cosas sean diferentes.
Es también un libro sobre una sociedad llena de contradicciones en que se condena el racismo imperante en la época en Europa (década de 1930) pero no el que se vive a diario ahí mismo en las mismas calles de Maycomb.
Teniendo todo esto como antecedentes entiendo plenamente porque es tan destacada por muchos lectores la figura de Atticus Finch, Atticus representa al hombre, al padre y al abogado íntegro por sobre toda las cosas.
Otro personaje que no puedo dejar de destacar es Link Deas, un hombre que tiene claro lo que considera correcto y que actúa en consecuencia.
Una novela fácil de leer, pero no por eso superficial, de esas que al llegar a la última página nos dejan la sensación de que hay mucho que pensar y que meditar, porque es un libro que no ha perdido validez.

"-Tú no eres realmente un amanegros, verdad?
-Desde luego que lo soy. Hago todo lo posible por amar a todo el mundo. Cariño, que te llamen lo que otra persona cree que es algo feo nunca es un insulto. Sólo te demuestra lo ruin que es esa persona."

Matar a un ruiseñor es un libro que fue publicado por primera vez en 1960. A pesar de la diferencia temporal con el presente, el libro aborda algunas cuestiones en plena vigencia.

La pequeña Scout relata a través de su mirada infantil la vida en un pequeño pueblo de Alabama en los años 3, una vida tranquila que se ve alterada cuando su padre, Atticus, decide defender como abogado a un joven negro acusado (injustamente) de violación.

El libro evidencia cómo los prejuicios raciales llevan a las personas a cometer actos injustos, y cómo esos prejuicios calan especialmente entre la población más inmadura (emocionalmente hablando). El racismo, como cualquier otra forma de discriminación, se sustenta en el miedo a perder privilegios, y alimentarlo es necesario para asegurar ese estatus de poder.

Las personas como Atticus, que deciden enfrentarse a toda una comunidad con tal de defender lo que es justo, son las que hacen que el mundo avance. Este personaje es entrañable, tierno con sus hijos, respetuoso con sus vecinos, leal a sus principios. Su ternura es infinita.

Matar a un ruiseñor es un retrato de una población rural, pero también un grito contra la desigualdad. Un merecidísimo pulitzer que debería ser leído en las escuelas para tener más Atticus, más Jem y más Scout en el mundo.

Vaya por delante que hace años vi la película y no me convenció, pirque veía dos historias con poco nexo, algo que el libro conecta muy bien.

Me ha costado entrar en esta mítica obra de Harper Lee pero llega un momento en el que la historia empieza a ponerse más interesante, sobre la mitad de la novela de hecho, y ahí es cuando la niñez de los protagonistas se enfrenta a la cruda realidad y cómo las enseñanzas de su padre les sirven para comprender e intentar hacer comprender a otros el lugar en el que viven.

Son los años 30 en Alabama y la segregación racial es un hecho. Pero a los niños Finch, Scout y Jem, su padre Atticus no les ha educado para que vean diferente a nadie.

No le doy más estrellas porque me ha costado engancharme, como digo, pero está muy bien escrito y especialmente Atticus y Scout Finch son historia en lo que a cultura popular se refiere.
Enlace: https://cultureteando.wordpr..

Primer libro publicado de Harper Lee, un clásico de la literatura estadounidense publicado en 1960 en el que la autora se inspira en su propia infancia para crear a la protagonista de esta historia, Scout.
Ambientada en un pueblo de Alabama durante los años 30, Scout, protagonista y narradora de la historia, nos contará su vida, su infancia, la que pasa con su hermano Jem, y vivirá el momento en el que a su padre, abogado, tiene que defender a una persona negra acusada injustamente de violación.
La autora retrata la situación del pueblo en esa época, lleno de pobreza, ignorancia, las desigualdades raciales…a través de Atticus, el padre de Scout. Un libro con una gran crítica a la sociedad del momento, pero también un libro para creer que hay esperanza en las nuevas generaciones.
Y no solo son estos los temas que trata este libro, machismo, igualdad, ética, educación, todos estos planteados por Atticus, un padre modelo que quiere educar a sus hijos con moral, para mi, de los mejores personajes.
No he visto la adaptación en el cine pero me ha dejado con ganas, creo que es un libro muy recomendable y necesario.

Traigo mi gran pendiente “Matar a un ruiseñor” escrito por -Harper Lee-.
Siempre le tuve un gran respeto al libro porque pensaba que era demasiado duro, pero no, pude con el. Comentar que es duro pero no era lo que pensaba. Me encantó.

por fin leí esta gran obra. Merecedora del premio que le otorga. del cual me alegro enormemente haber leído ya que me hizo reflexionar sobre la discriminación, la injusticia, las desigualdades, entre otros...


Es una novela ambientada en un pequeño pueblo, bastante cerrado, donde todos se conocían en la década de los 30. El autor nos narra de una forma exquisita. Entrelazando temas como el paso del y tiempo a través de los ojos de la protagonista. La educación, la difícil lucha por la dignidad humana, la justicia o más bien la injusticia.


No quiero desvelar mucho ni hacer spoiler. Pero Eso sí, no os dejará indiferente.
Lo recomiendo 100%.