Si no hay un mañana

Pues para empezar es una historia dura, muy dura. Conocemos a Lena una chica que esta a punto de graduarse, tiene su grupo de amigos, tiene buenas notas y tiene Sebastián su mejor amigo y vecino, por el que siente algo pero nunca ha sido capaz de decírselo.

Todo iba bien hasta que un día un acontecimiento hace que la vida de Lena de un giro de 360 grados y vaya todo cuesta bajo. ¿Me ha gustado el libro? Si, me ha encantado pero ahora que he leido otros libros de la misma autora, no me decantaría por este como de mis favoritos de ella, aunque puede que sea culpa mía ya que no logré empatizar con la protagonista y su forma de afrentar el problema.

En resumen un libro adictivo que no te dejará indiferente con una gran lección. 4/5

Ah, no! Lo que lloré con este libro, ustedes no se dan una idea. al principio es un poco lento, pero necesario para llegar al final de la historia, para entender aspectos que en un principio no se entienden. Es un libro para crear consciencia sobre aspectos que tenemos tan naturalizados hoy en día y que la verdad deberíamos replantearnos muchas cosas para poder superar y seguir viviendo sin ese peso en el alma que no nos deja avanzar.

Hace más o menos siete años leí por primera vez a Jennifer L. Armentrout y aunque no creo que sus libros son perfectos, sí que soy fan de ellos pues la autora transmite mucho a través de sus historias. Así que de verdad moría de ganas de tener este libro en mis manos ya que el último que leí de ella (Nunca digas siempre) se convirtió en uno de mis grandes favoritos. Eso sí, admito que tenía un poco de miedo pues aún con mi fanatismo por la autora soy muy consciente de los fallos que sigue repitiendo en sus novelas y me daba miedo que este no pudiera superar al libro que leí con anterioridad. ¿Y al final? Sinceramente me sigue gustando más la historia de Mallory y Rider pero este libro también se ha ganado un hueco en mi oscuro corazón.
¿Qué habría hecho diferente aquella noche si hubiera sabido que no habría un mañana? Todo. Lo habría hecho todo diferente.
Pero dejen mi explico más. Si no hay un mañana nos cuenta la historia de Lena, una chica que está cursando su último año en el instituto. Ella es bastante normal, tiene tres amigas a las que adora, vive sólo con su madre mientras su hermana está estudiando la universidad y su padre las abandonó cuando las cosas en casa se pusieron complicadas. Esto ha causado un pequeño “trauma” en ella pues no puede perdonarlo por abandonar cuando las cosas no fueron sencillas. Pero gracias a Hades cuenta con su mejor amigo, Sebastian, quien desde niños ha estado con ella para apoyarla en todo. Pero Lena no sólo ve a Sebastian como un amigo, sino que lo ama desde siempre, pero está claro que para él sólo es una amiga.

Hasta aquí seguro que ya están pensando que la historia es una más del montón, de esas donde chica ama a su mejor amigo y así, y para ser completamente honesta con ustedes la primera parte del libro es bastante simplona y sí, bastante cliché. Pero entonces llega el meollo del asunto y la historia cambia completamente y los problemas de Lena pasan de ser los de una adolescente normal para transformarse en algo mucho más serio.
Aquí voy a mencionar lo primero que me gustó del libro, y es que no es secreto para nadie que aunque amo los libros de Jenn casi siempre suelo odiar a sus protagonistas quienes a mi parecer carecen gacho de cerebro. Pero Lena no es el caso pues ha sido todo un personaje profundo y complicado de entender que me ha atrapado por completo.
Ella es nuestra narradora y a través de sus ojos seremos testigos de un accidente que va a cambiarlo todo. Un accidente que nos permitirá conocer a profundidad a Lena, sus temores y sobre todo sus remordimientos. No me queda más que felicitar a Jenn por haber sido capaz de crear a un personaje capaz de transmitir tanto y que además hace que uno como lector logre empatizar con ellas porque como bien lo dice la autora al final del libro, todos en algún momento hemos estado en el lugar de Lena.

Sebastian por su parte… es que yo simplemente no puedo ser indiferente a los hombres de Jenn pues siempre termino toda embobada por ellos y obvio que con Sebastian no ha sido la excepción, cosa que me sorprendió bastante pues regla general suelen gustarme más los hombres hoscos y un tanto malos y Sebastian es puro amor. No es perfecto, sin duda pero sí que es un chico sumamente dulce, protector y sobre todo comprensivo.
No tienes que hablar de ello ahora. Ni siquiera tienes que pensar en ello. Pero tendrás que hacerlo, Lena.
Ahora bien, saben que no me encanta revelar grandes cosas de la trama pero esta vez tengo que hacerlo, así que les advierto que voy a soltar algún spoiler por aquí para contarles lo que más me ha gustado del libro. Y es que Lena y sus amigos sufren un accidente al salir de una fiesta, donde el chico que conducía había bebido de más. Ella fue la única que sobrevivió y eso es lo que genera todo el cambio de la historia.
Cuando comencé a leer esto inmediatamente me percaté que Lena sufría el síndrome del superviviente y según yo me hice a la idea de lo que iba a pasar, pero no sólo fue eso, sino que ella carga con una inmensa culpa que prácticamente no la deja seguir adelante. Ese saber que sus seres queridos murieron por “su culpa” que no le permite seguir viviendo cuando ellos definitivamente ya no pueden ha sido lo que más me ha gustado del libro pues vemos a una Lena prácticamente hecha pedazos reconstruyéndose a sí misma para comprender que está bien volver a sonreír por aquellos que ya no están. La resiliencia que Lena muestra es el PUNTO del libro. FIN DEL SPOILER.
(…) y supe mientras daba el primer paso que, si bien el mañana no estaba garantizado, si bien no estaba prometido, aún tenía muchas posibilidades.
En resumen Si hay un mañana ha sido una historia real y muy linda, con una gran lucha de superación y resiliencia que estoy segura o va a dejar indiferente a nadie.
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Si No Hay Un Mañana nos cuenta la historia de Lena Wise, una joven que dentro de un año empezará la universidad, compagina sus estudios con el voleibol y además, trabaja en un restaurante. Las clases empezaran en unas semanas, ha pasado el verano trabajando y ha disfrutado de su tiempo libre con sus mejores amigas o leyendo. Aunque, durante estos meses le ha faltado la compañía de su mejor amigo el cual está a punto de regresar. El último año de instituto siempre es especial hasta que una decisión puede cambiar el rumbo de todo.

Lena disfruta sumergiéndose en miles de historias donde sus sueños se pueden hacer realidad. Su vida hace unos años sufrió un revés que no ha conseguido superar, sus padres se separaron y ella ahora vive con su madre, ya que su hermana está estudiando lejos y casi no se ven. Cuenta a su lado con sus mejores amigas Megan, Abbi y Dary, y con su mejor amigo Sebastian, del cual lleva enamorada desde hace muchísimo tiempo pero nunca ha sido capaz de mostrarle sus sentimientos por miedo a romper su amistad. Este último curso, tenía todas las papeletas para ser muy duro ya que Lena tendría que sacar buenas notas para así acceder a una beca que le permitiría estudiar. Unos días antes de empezar las clases, Sebastian regresa a casa después de pasar el verano con su familia. Las planes comienzan a aparecer, uno de ellos marcará el inicio o el final de lo que puede estar por llegar porque dejarse llevar algunas veces puede ser algo bueno o puede, dar lugar a algo irreversible.



El libro está narrado al completo desde el punto de vista de Lena Wise, aunque me ha gustado que ella fuera la narradora no me hubiera desencantado toparme con algún capitulo relatado por Sebastian. Nos encontramos con una historia de 384 páginas que tiene como un prólogo y 31 capítulos. Además, la novela está divida en tres partes: Ayer, Hoy y Mañana donde vemos los antecedentes de lo que está a punto de suceder , lo que pasa y finalmente, termina la historia. Los capítulos son de una extensión normal, es un libro que se lee con rapidez y asimismo, la primera página te deja con el corazón a mil por lo impactante que es y hace que necesites saber más sobre la historia. En cuanto a la trama, existe una parte romántica pero la fuerza de la novela no recae en ella, sino en algo que tendréis que descubrir por eso, vais a tener que adentraros en esta historia 😉 En referente a los personajes, vemos en todos un desarrollo que en algunos casos te estrujan el corazón porque es muy fácil empatizar con ellos.

Lena. Nuestra protagonista femenina es risueña, trabajadora, calmada y amistosa. le encanta leer y esto, lo vemos desde el primer momento que la conocemos. Es un personaje con el que he sufrido de lo lindo, con ella se vive como una decisión puede cambiar el rumbo de nuestras vidas y como, a partir de esta tenemos que aprender a vivir con ella.

Sebastian. Nuestro protagonista masculino es divertido, extrovertido, travieso y honesto. Forma parte del equipo de fútbol del instituto aunque no tiene del todo claro, que hará el próximo año y además, durante varios años ha ocultado un secreto. Es un personaje que me ha encantado, tiene esa personalidad única de los personajes de Jennifer que hace que sea imposible no quererlo 😍

Por último, es un libro me ha encantado por los temas de los que habla y la manera en la que la autora te hace reflexionar y darte cuenta como una decisión puede cambiar tu vida en un instante. Es una novela muy dura con la que se sufre a más no poder porque pienso que cada uno de nosotros en alguna vez nos hemos visto en la situación en la situación en la que se ve la protagonista. En mi caso, he tenido la suerte de que no me ha pasado nada pero siempre existe la posibilidad de por no querer llevar la contraria y no imponer nuestra palabras algo tan terrible suceda. A mí, Jennifer L. Armentrout con este libro ha logrado que recapacitará, por lo cual os animo a cada uno de vosotros y vosotras que lo leáis porque es una novela que es muy necesaria y por desgracia, es un tema que está al orden del día.




Si No Hay Un Mañana es una historia rompedora, emotiva y desgarradora. Una novela que todo el mundo debería leer por todo lo que contiene y la manera en la que la autora trasmite la multitud de sentimientos que se suceden a lo largo de la historia. Un libro indispensable en vuestras vidas, ¡tenéis que leerlo!
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Jennifer tiene una forma única de escribir y más cuando son historias tan reales que le pueden pasar a personas comunes como nosotros.
Al leer la sinopsis de este libro me llamó la atención porque solo quería saber cual era el motivo que llevaba a varios de los personajes secundarios a odiar a la protagonista. Les dejo la sinopsis para que me entiendan: >.

Bien, con respecto a la trama “Si no hay un mañana” nos enseña que nuestra decisiones incorrectas traen consecuencias no solo para uno mismo, sino que para los que nos rodean. Lena, la protagonista, comete una serie de decisiones que cambia su vida para siempre, inclusive la de su familia y amigos.
Creo, que esta historia está dirigida para los adolescentes que comienzan a experimentar momentos nuevos y al leer esta historia podrían comprender lo doloroso que sería optar por las decisiones que tomaron los personajes de esta historia.
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Después, si hablamos de Jennifer l'Armentrout no podemos olvidar del romance de esta historia. El romance de esta historia fue como siempre súper cliché, dos amigos de años que están enamorados mutuamente pero ninguno se anima a revelar sus sentimientos. Debo confesar que me encantan este tipo de romances, ya que las relaciones tóxicas y los romances entre hermanastros, etc, me aburren y me cansan. Sebastián se me hizo un chico tan enamorado de Lena que estuvo con ella en los buenos y malos momentos.

Todos los personajes de esta historia me encantaron, Jennifer tiende a construir perfectamente a sus personajes, los hace tan reales y tan imperfectos al mismo tiempo.

Cuando empecé esta historia decidí ir a ciegas, sin leer sinopsis ni pedir opiniones a nadie, quería sorprenderme y vaya si lo hizo.

Jennifer siempre tiene la capacidad de hacer que me enganche a una historia desde sus primeras páginas, es lo que me encanta de esta autora.

Esta historia es dura, sin duda te desgarra, empatizando con la protagonista entiendes todo su proceso, su pensamiento y como se siente.

No puedo hablar mucho por miedo a expresarme de más y poder soltar un spoiler pero es una historia que recomiendo a todo el mundo ya que es una historia que, por desgracia, ocurre en más de una ocasión.

El comienzo de esta historia es lo que te puedes esperar de este género, una historia de una chica que está enamorada de su vecino en secreto.
El punto fuerte de este libro esta en la segunda parte, donde un acontecimiento cambiará la vida de Lena por completo.
Sufrí mucho con está historia, la manera en la que esta escrito hace que vivas todos esos acontecimientos en primera persona.
Me parece un libro que todo el mundo debería leer, un libro juvenil muy apropiado para que gente de esa edad se conciencie de temas tan importantes como este.

Si no hay un mañana de Jennifer L. Armentrout; ésta es una de ésas escritoras que cualquier género que escriba se convierte en oro. Y ésta historiad no fue la excepción, es muy conmovedora y con un romance inocente y tierno entre dos mejores amigos; pero, en el que el verdadero protagonista, es la tragedia.
Una mala decisión, que involucra la vida de muchos, y que cambiará para siempre sus destinos.

Lena es una joven inteligente y sensata, buena estudiante, trabajadora, gran jugadora de voleibol, estupenda amiga, lectora obsesiva, vecina y mejor amiga de uno de los chicos más populares encantadores de la escuela. Tal vez, se considere a sí misma como una chica del común; pero no lo es, ella es amable, considerada, alegre y querida por muchos.
Pero más que por muchos, ella desea ser amada por uno solo, por su mejor amigo... Sebastián, y después de llevar años escondiendo sus sentimientos detrás de una máscara; un pequeño desliz, pone en peligro ese gran secreto que mantuvo oculto. Es por eso que, en una de las fiestas de sus amigos, la reaparición de Skylar (ex de Sebastián), la hace desear irse de ahí apresuradamente; y por lo tanto, tomar una decisión que marcará su vida para siempre.

Confieso, lloré un montón leyendo ésta historia; y es que en ocasiones, por la presión de grupo, por aparentar ser despreocupada y relajada, por creer que nada malo nos puede pasar, ó incluso por desear confiar en los demás; tomamos malas decisiones, y algunas pueden llegar a ser mortales. En lo personal, lo que más me recuerda ésta historia; es ese popular dicho que dice: "No dejes para mañana, lo que puedes hacer hoy". Porque como insinúa su mismo título, podríamos arrepentirnos... Si no hay un mañana.

El título lleva a pensar que tiene su parte de drama, por eso no me atrevía a leerla, pero unas cuantas reseñas de amigas me animaron. La primera parte de la historia cumple la premisa de «chica a punto de ir a la universidad enamorada de su mejor amigo y con un buen grupo de amigas» muy típica de los Young Adult. Pero en la segunda parte cambia todo por una decisión que toma la protagonista. Me ha gustado muchísimo. Es una historia de superación del trauma, del duelo y de la culpa. La relación amorosa pasa un poco a segundo plano, pero aun así tiene protagonismo, pues es imposible obviar al maravilloso Sebastian. Entretiene, engancha y hace pensar, es una lectura de la que sacar muchas cosas positivas. Recomendadísima.

Ha sido una historia de total reflexión, desde el principio me ha dejado enganchada a la pluma y a la madurez de los razonamientos. Es de agradecer cuando los personajes por su naturalidad se sienten cercanos.

Y es increíble cómo al analizar las diferentes perspectivas de cada uno de ellos, te puedan hacer dudar de tu criterio y no saber cuál de las acciones sería la válida o la más coherente.

Porque todos tienen su qué, y su por qué.

Una historia de amor y amistad, sumergida en una trama que tiene un ayer, un hoy y un mañana.

Un ejemplo claro de cómo vivir al día y no guardar cosas para cuando sea el momento… porque el momento solo puede ser “ahora”, cuando el mañana no está asegurado. Para nadie.

Sin duda voy a devorar sus libros, hasta he valorado meterme en los de fantasía.

Un gran descubrimiento totalmente recomendado, para aquellos que, aparte de leer historias idílicas que nos regalen los oídos, también apreciamos historias de verdad. Naturales y con personajes comprensibles.

Nota* La ausencia de epílogo es lo que me ha demostrado que: no hay necesidad de saber que pasará seis meses después, porque como bien dice el título… ¿qué pasaría “si no hay un mañana”?

Jennifer, Gracias por la tinta*

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