Pretender hacer una reseña de este libro sería una locura, porque su literatura abarca una infinitud, y ante ella me he sentido abrumada, desbordada y pequeña. El Aleph está compuesto por 18 relatos breves, el último de ellos con el título que da nombre al libro. Me alegro de haberme acercado a ellos y haber logrado vislumbrar solo una pequeña parte de lo que esconden. Porque el significado de todos ellos es profundo y no se llega a él fácilmente. Espero volverlo a intentar en un futuro, ahora que ya los conozco, y hacerlo más despacio, sin prisas, ahondando en ellos, uno a uno, buscando información sobre la gran cantidad de referencias a la cultura literaria universal. De todos los relatos destacaría el primero y el último. Para mí el primero, quizás pueda considerarse el más elaborado, incluye la mayoría de temas que volverán a surgir en los demás relatos y la verdad que por ser el primer contacto con su literatura, me ha impactado. He salido de él alucinada, entendiendo sin entender, viendo claro y perdiéndome por igual, ordenando ideas y mezclándolas de nuevo. He desistido y me he dejado llevar, hasta que el propio Borges me ha cogido de la mano para adentrarme en su laberinto y mostrarme su juego de espejos. No he conseguido salir ilesa. Sus desbordantes ideas filosóficas y teológicas, entre la realidad y la fantasía, me han sobrepasado. Pero ahora sé que volveré a ellas en algún momento. El concepto de inmortalidad, el destino, la memoria, la muerte, el tiempo, la infinitud y la distinta forma de percibir la realidad conforman estos relatos, que a través de historias fantásticas y oníricas en su mayoría, nos plantean grandes preguntas universales. ¿Qué supondría para un ser inmortal ser invulnerable? ¿Podemos confiar en nuestra memoria para recordar nuestro pasado? ¿Es real lo vivido, o forma parte de un sueño? No os voy a recomendar esta obra, no puedo deciros que os atreváis a conocer a un autor con una mente tan privilegiada que se hace difícil acercarse a su obra. Pero salir de la zona de confort y pasar aunque solo sea de puntillas por la inmensidad de su literatura es una experiencia que seguro habrá valido la pena. + Leer más |