Las tinieblas y el alba

Sé que para aquellos que han seguido el trabajo del escritor, el que me detenga tanto en resaltar la dedicación a su documentación y la minuciosidad de sus descripciones sea ya noticia vieja, pero tómenlo como una confirmación de que la calidad no decae y para aquellos que somos nuevos, que esto sea una invitación.

Me fascina la forma que tiene de construir los escenarios en donde se lleva a cabo la historia, las aldeas, las ciudades, los oficios y sus restricciones tecnológicas, las construcciones, los atuendos, sus costumbres y su día a día, cada uno de los detalles que tienen como objetivo transportarnos a este pueblo ficticio en donde lo único que hace falta es oler lo nauseabundo que debió haber sido el año mil.

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Otra vez Ken Follett me transporta a la edad media. Esta vez me llevó a los albores del año mil, a la llamada edad oscura.
Es el año 997, y Follett nos presenta, en "Las Tinieblas y el alba" personajes pertenecientes a los tres órdenes medievales. Los hombres que guerrean, es decir la nobleza feudal, los hombres que rezan, el clero regular (los monjes) y el clero secular (sacerdotes, obispos), y los hombres que laboran, esos siervos que a cambio de protección trabajaban las tierras para los señores feudales, fueran laicos o eclesiásticos. Esta estructura social no es otra cosa que la famosa relación feudo-vasallática con la que tantas veces las/los profes de historia torturamos a nuestros estudiantes.
En este contexto histórico se desenvuelven nuestros protagonistas. Edgar, un constructor de barcos que pierde todo ante un ataque vikingo y se ve obligado a transformarse en labrador junto con toda su familia para sobrevivir.
Por el lado de los señores feudales, destacan el Conde Wilfwulf, y el obispo Wynstan.
El clero regular, es decir, el que sigue una regla y vive en monasterios, está representado por el monje Aldred, cuya máxima ambición es convertir a la abadía en la que vive en un centro de saber y conocimiento.
El personaje femenino es Ragna, la hija de un noble normando, que sueña con casarse con un hombre al que ame, renengando de la obligatoriedad de obedecer el matrimonio arreglado que espera su madre, y cuya mejor característica es su inteligencia, además de su belleza,
Este libro es la precuela de la Trilogía medieval de Follett, eso es todo lo que les puedo contar sin hacer ningún spoiler. Así que si ya leyeron Los pilares de la tierra, Un mundo sin fin y Una columna de fuego, de ninguna manera pueden perderse perderse este libro. Y si no lo hicieron, aprovechen y empiecen con Las Tinieblas...No se van a arrepentir, siempre y cuando les gusten las novelas históricas.
Le doy 5 Marinas! 🌊🌊🌊🌊🌊
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Las Tinieblas y el alba. Nota 5/5 Novela historica que me recordó mucho a Un mundo sin fin. Aquí no hay grandes construcciones de catedrales pero si una gran historia. Edgar, Alfred y Ragna cautivan desde el principio y su historia llega al corazón. Una novela pausada, tranquila, las pequeñas intrigas comienzan desde el inicio pero la verdadera acción comienza en la página 700. Tengo que decir que después de Un mundo sin fin me quedo con este.
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Se trata de un libro muy en la línea de Follett. 

Una historia con muchas historias. Como un árbol con muchas ramas pero que tienen la parte importante en común. 

Los personajes son muy de extremos. Los malos son muy malos y los buenos son tan buenos que son tontos y siempre sufren, de una u otra manera. 

Al igual que algún otro libro, es bastante previsible lo que puede suceder pero aún así te deja la intriga de qué será lo que pasará, si de verdad es lo que estás pensando o dará un giro. 

Otro punto que tiene este autor es que dota a los personajes femeninos de mucha fuerza. A pesar de la época en la que se sucede la historia, encuentras personajes femeninos con cierto poder dentro de la nobleza, inteligentes y estrategas. 

También vemos el abuso de poderes que había en aquella época entre nobleza, Iglesia y el pueblo. La falta de justicia ante asesinatos, violaciones, violencia, esclavitud etc. 
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Una vez situados la narración es muy ágil, va saltando de un personaje a otro prácticamente aunque en ciertos capítulos convergen varios puesto que se va entrelazando la historia. 
Nos encontramos con un montón de personajes que, en distinta medida, aportan una parte esencial a la historia. 
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Si esperas una trama que se desarrolle de forma abrumadora, olvídate. En cada capítulo suceden pequeños momentos y según se acerca su final se van sucediendo con mayor rapidez e importancia. 
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No esperéis encontrar ningún personaje presente en el siguiente libro #lospilaresdelatierra ya que entre ambos libros hay 150 años de diferencia. 

La verdad es que ha sido una lectura maravillosa, disfruté un montón con las nuevas aventuras de los habitantes de 𝐊𝐢𝐧𝐠𝐬𝐛𝐫𝐢𝐝𝐠𝐞, donde conoceremos a 𝐄𝐝𝐠𝐚𝐫, el constructor de barcos que nos sorprende a medida que va madurando. También nos enamoramos de 𝐑𝐚𝐠𝐧𝐚 una chica fuerte que intenta que el mundo "no se la coma", y no podemos olvidarnos de 𝐀𝐥𝐝𝐫𝐞𝐝 que nos mostrará esas cosas que muchos hacen "oídos sordos" y el odioso obispo 𝐖𝐲𝐧𝐬𝐭𝐚𝐧, que siempre tiene que estar en todo menos en donde debe 😑

@Kenfollettauthor tiene una pluma que podemos definir como maravillosa, aunque es lo típico que se suele decir, es la verdad. (No quiero contar mucho porque 𝗼𝗱𝗶𝗼 𝗹𝗼𝘀 𝘀𝗽𝗼𝗶𝗹𝗲𝗿𝘀 😤 también les digo que en mi blog tienen la reseña por si quieren saber mi opinión un poco más larga)

Recomiendo muchísimo este libro y eso de "Ken Follett siempre con lo mismo" nada ¿Eh? ¡A leerlo! 🤓👆
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Hoy os traigo la reseña del libro que me ha acompañado en esta despedida y entrada de año. Y sinceramente, creo que no podría haber elegido mejor.
"Las tinieblas y el alba" del autor Ken Follett, ha sido traducido por ANUVELA y publicado por Plaza y Janés.
Ha resultado la novela que esperaba. Bien ambientada, con grandes personajes y de lectura ágil. Sigue el estilo de "Los pilares de la tierra" y eso era justo lo que quería encontrar.
En esta ocasión nos situamos a finales de la Edad Oscura, en torno al año 1000, periodo en el que los vikingos atacan Inglaterra. La vida es bastante dura y el autor se encarga de dejarlo claro en numerosas ocasiones.
Contamos con tres protagonistas: Edgar, un joven constructor de barcos de lo más inteligente. Ragna, la hija de un noble normando que llegará a Inglaterra para casarse con el hombre que ama, y Aldred, un monje con las ideas muy claras. Tres personajes justos e inteligentes cuyas vidas se cruzarán y tendrán que sufrir a causa de las maldades y ansias de poder de otros.
Follett consigue que empaticemos fácilmente con los personajes, y que odiemos a muchos de ellos (hombres en su mayoría). La brutalidad estaba a la orden del día, y los asesinatos, secuestros y violaciones que tienen lugar lo dejan claro. No obstante, a pesar de las dificultades también hay hueco para los buenos momentos, el amor y la esperanza de una vida mejor.
No se conoce mucho sobre la Edad Oscura pero a mi parecer el autor consigue una ambientación tan buena que siento que viajo en el tiempo. Además, su estilo narrativo me encanta y a pesar de ser un libro de más de 900 páginas se me ha hecho corto.
Por todo ello, no me cansaré de recomendároslo. Además, podéis leerlo sin problema aunque no hayáis leído los otros. Tienen una conexión, pero son independientes
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Esta nueva novela, la pre-cuela de la trilogía de Los Pilares de la Tierra, es la que más se parece al primer libro. Vuelve a reflejar de nuevo la avaricia del rico, lo más salvaje del hombre, el amor por encima de todas las cosas...
Para mí es el segundo mejor libro de los cuatro. Por detrás, lógicamente, del legendario Los Pilares de la Tierra.

Es un libro que me ha encantado, con una lectura rápida y te engancha desde el primer momento. Estas viviendo en la Edad Media, todos los problemas de una sociedad estamental, las luchas encarnizadas por el poder y la poca justicia que recibían el pueblo llano, frente a la nobleza que disfrutaba de todos los derechos.

En el libro Las tinieblas y el alba, Ken Follett nos presenta una sociedad medieval con relaciones de vasallaje. Vemos los estamentos privilegiados, la nobleza en la figura de Ragna y Willf, y el clero en la figura del obispo Wynstan y el monje Aldred entre otros. y por otro lado el pueblo llano en la figura de Edgar y sus hermanos.

Los privilegiados no solo gozaban de la riqueza sino también el derecho de portar armas. Los reyes ostentaban la máxima autoridad política, mandaba acuñar moneda y recaudar impuestos. Este poder estaba limitado, por que necesitaba de los nobles para acudir con las mesnadas. A lo largo de toda la novela lo tenemos presente. La necesidad que tiene el rey de tropas para luchar contra los vikingos. de esta necesidad se sirve el obispo Wystan para salvarse por falsificar moneda.

A las mujeres nobles solamente se les educaba para ser esposas o en el mejor de los casos algunas lenguas o tocar algún instrumento musical.

El poder de la iglesia era muy grande, acumulaba una gran riqueza a través de los feudos, donaciones de tierras y limosnas y el cobro del impuesto eclesiástico. También el autor nos presenta la lucha que hubo por las investiduras, cuando se produce el nombramiento del obispo de Canterbury. También vemos la diferencia entre el clero secular y el clero regular. El clero secular con una multitud de vicios, mientras que el regular con su trabajo en los huertos, las copias de libros. Y el trapicheo que se hacía con las reliquias para sacar la limosnas a los pobres campesinos, es un episodio bastante divertido.

Los campesinos tenían una vida muy dura, trabajaban desde la salida hasta la puesta del sol. Esta dificultad se veía aumentada por la escasez de instrumentos de labor. A veces eran los propios campesinos los que arrastraban el arado, como se ve en la vida que llevaban los hermanos de Edgar.

La vivienda era pequeña, la ventana sin cristales, se cerraban con telas bastas. El suelo era de tierra que se cubría de paja. También se ve la vida en las ciudades, los artesanos y los oficios. También a través de Edgar observamos como las técnicas para construir las catedrales se transmitían.

También se ve muy bien como el feudo de los señores se dividía en la reserva señorial era la zona reservada al señor y estaba su residencia, las dependencias de los sirvientes, zonas de caza. Y después los mansos, parcelas que el señor repartía entre los campesinos a cambio de una parte de la cosecha. Tenían tierras comunales que los campesinos podían usar previo pago.

Recomiendo este libro a todo el mundo que le guste la novela histórica, en especial la centrada en la Edad Media, el vasallaje. Pero también a todos aquellos que les guste las historias románticas.

AUTOR:

Ken Follett nació en Cardiff (Gales) y a los diez años su familia se trasladó a la capital británica. Realizó sus estudios en distintas escuelas públicas antes de licenciarse con honores en Filosofía en el University College de Londres. Comenzó su carrera como periodista en el periódico de su ciudad natal, el South Wales Echo, y luego trabajó en el London Evening News. Posteriormente se incorporó a una pequeña editorial, Everest Books, de la que terminó siendo director adjunto. Su primer gran éxito literario llegó en 1978 con la publicación de El ojo de la aguja.
Ken Follet es uno de los autores más queridos y admirados por los lectores de todo el mundo, y las ventas de sus libros superan los ciento setenta millones de ejemplares. Las tinieblas y el alba es la precuela de la saga iniciada en 1989 por Los pilares de la Tierra, el épico relato de la construcción de una catedral medieval del que se han vendido veintisiete millones de ejemplares. Su continuación, Un mundo sin fin, obtuvo un gran éxito cuando se publicó en el año 2007 y en el 2017 vio la luz Una Columna de fuego, ambientada en la Inglaterra del siglo XVI durante el reinado de Isabel I.
Follett, que ama la música casi tanto como los libros, es un gran aficionado a tocar el bajo. Vive en Stevenage, Hertfordshire, con su esposa Barbara, exparlamentaria laborista por su circunscripción. Entre los dos tienen cinco hijos, seis nietos y dos perros labradores.




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Es necesario que empiece esta reseña diciendo que normalmente no elijo la novela histórica, ni con tintes de este género, entre mis lecturas. También es cierto que es difícil resistirse a lo nuevo de Follet, conociendo su minucioso trabajo de documentación, así como la calidad de su pluma. Pensando en todo esto decidí acoger en mi estantería Las tinieblas y el alba. Y ya os avanzo que fue todo un acierto esta elección.

Aunque esta novela se presenta como una precuela de Los pilares de la tierra, debéis tener en cuenta que la acción de Las tinieblas y el alba transcurre más de un siglo antes y, a pesar de que pueda haber algún tipo de relación entre los personajes, esta no es evidente ni vinculante. Podéis leer esta novela de forma totalmente independiente y la vais a disfrutar tanto si habéis leído Los pilares de la tierra como si no.

El periodo que abarca la historia va desde el año 997 hasta el 1007 y el marco geográfico es un condado de Inglaterra que los lectores de Follet reconocerán; Kingsbridge. Si bien esta pequeña y ficticia región comienza siendo muy poco próspera, eso cambiará más adelante, como los lectores de las novelas del autor ya conocerán.

"La edad Oscura dejó pocas pistas. No se escribió gran cosa, se hicieron escasos dibujos y casi todos los edificios se construyeron con madera que acabó descomponiéndose hace mil años o más. Todo ellos deja lugar a suposiciones y discrepancias, más que en el caso del Imperio romano que la precedió y que en el de los años posteriores a la Edad Media."
Ken Follet, Las tinieblas y el alba

No es un periodo tranquilo. Los constantes ataques vikingos mantienen a los ingleses en permanente estado de alerta y los señores lideran a sus ejércitos mientras el pueblo trata de sobrevivir, pagar sus impuestos y campear temporales e inclemencias que puedan dar al traste con sus medios de vida. Pero esta historia va mucho más allá.

Las tinieblas y el alba es una novela contada desde tres perspectivas muy diferentes. Tres personajes que prestan su voz al desgarrador relato de una época en la que nada era sencillo y en la que el poder, ya venga de una alta posición social, un cargo en el clero o un simple puesto destacado en la vida de la comunidad, marca la diferencia entre vivir y morir. Y es importante no perderlo cuando lo tienes.

"Cruzó el recinto a toda prisa, entró en su casa y fue al rincón donde guardaba el tesoro. La manta que normalmente lo cubría estaba apartada y el cofre había desaparecido.
Lo había perdido todo."
Ken Follet, Las tinieblas y el alba

Edgar vive con sus padres y sus dos hermanos. Su padre es constructor de barcos y lo ha aprendido todo de él. Parece que le espera un vida armando naves, siguiendo la estela de su padre, pero se ha enamorado. Por un motivo de peso que descubriréis cuando leáis esta historia, lo mejor que puede hacer es fugarse con su amada, pero entonces los vikingos arrasan su hogar llevándose algo más que el medio de vida de la familia de Edgar por delante. Será entonces cuando deba empezar de cero en un lugar diferente, enfrentándose a retos nuevos y solo el desarrollo de los acontecimientos, su ingenio y su fortaleza determinarán si el cambio le traerá prosperidad o desgracia.

Ragna es hija de un noble normando y también se ha enamorado. Para casarse, deberá cruzar el mar, hasta Inglaterra, donde le esperan un modo de vida, unas costumbres y unas normas muy diferentes a las del lugar de donde viene. La historia de este personaje es realmente interesante y os va a atrapar desde el principio. A los lectores habituales de Ken Follet no les sorprenderán muchas de las experiencias de este personaje femenino que, aún siendo fuerte y justa, se encontrará viviendo mil desventuras y recorrerá un tortuoso camino de final incierto que solo descubriréis si os decidís a leer la novela.

"Era el primer inglés que expresaba sin ambages su empatía por lo que estaba pasando ella. Irónicamente, su compasión socavó la fachada de estoicismo decidido de Ragna. Para su propia consternación, se echó a llorar."
Ken Follet, Las tinieblas y el alba

Un monje con un intenso amor por las letras, un gran sentido de la justicia y muchos ideales es el otro personaje principal de esta novela. Se llama Aldred y os lo vais a encontrar en casi todos los escenarios porque es una pieza central, no por su posición, pero sí por encontrarse relacionado con escenarios y personajes muy importantes en el desarrollo de la trama. También estará junto a Edgar y Ragna, incluso en los momentos más difíciles, cuando deberá elegir entre enfrentarse a la injusticia impartida por los poderosos o guardar silencio y mantener a salvo su modo de vida.

He leído las casi mil páginas de esta novela en muy poco tiempo. Se me han pasado como un suspiro y en ningún momento me he aburrido a lo largo de esta historia. Es perceptible el grado de documentación que Las tinieblas y el alba carga tras de sí. Los detalles sobre la vida de los personajes son minuciosos y nos crean una imagen mental nítida de todas y cada una de las escenas. Desde las costumbres hasta sus vestimentas, pasando por la comida y las tradiciones, todo está cuidado al milímetro.

También están muy trabajadas las personalidades de todos los que intervienen, tanto de los tres protagonistas como las de los secundarios. Todos están perfilados de forma muy realista. Todos esconden algo y todos tienen motivos para arriesgar, engañar e incluso matar para alcanzar sus objetivos. No podréis confiar en nadie y siempre debéis estar abiertos a sorpresas y giros inesperados.

Os invito a que descubráis lo nuevo de Ken Follet. Yo he disfrutado mucho con esta lectura y la edición que presenta Plaza & Janés (Penguin Random House) es fantástica, con un diseño bajo la sobrecubierta, un mapa de la región en las guardas y unos capítulos con la extensión perfecta para que la experiencia lectora sea cómoda.

Ken Follet trabajó como periodista tras finalizar sus estudios con honores licenciándose en Filosofía en el University College de Londres. Terminó siendo director adjunto de la pequeña editorial en la que trabajó y alcanzó el éxito en 1978 con El ojo de la aguja. Más de ciento setenta millones de ejemplares vendidos y ser uno de los autores más aclamados por la crítica y el público, le convierten en un referente en el mundo de la literatura, que siempre acoge con los brazos abiertos sus historias.

Los pilares de la tierra se publicó en 1989 y de esta épica narración de la construcción de una catedral se han vendido más de veintisiete millones de ejemplares. Un éxito similar obtuvieron sus secuelas; Un mundo sin fin, publicada en 2007 y Una columna de fuego en 2017.
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Este libro es la precuela de 'Los pilares de la tierra', y hace honor a la saga histórica más famosa que existe.


Esta novela comienza con un ataque vikingo que marcará el devenir de los protagonistas, para bien o para mal. Es un libro que puede leerse por separado o unido al resto de la saga. No necesariamente tiene que leerse en el orden. de hecho, es el último libro de la saga en publicarse. Mi recomendación, para todo aquel que quiera inicierse en la saga, es que comience por el título que le pone nombre: 'Los pilares de la tierra'. Si ese libro no te engancha, no pruebes con el resto.

Aquí, Ken Follet vuelve a dejar claro que es único creando tramas (por algo ha cobrado un adelanto de más de 30 millones de euros). No creo que haya escritores a su altura, al menos no en lo que a trama se refiere. Stephen King, multiventas también, es más costumbrista, más de personajes, y John Grisham es más aburrido (y ni siquiera tengo claro que sus libros los escriba él, tengo entendido que tiene una cohorte de escritores negros para ello). En todo caso, Follet es un maestro de la trama. La teje y entreteje con una facilidad sorprendente. Conecta cada capítulo, los comienza y termina exactamente donde debe. No los alarga innecesariamente como hacen los malos escritores intentando enganchar al lector, cuando lo cierto es que así solo consiguen aburrirle. Es mucho más listo y sutil.

'Las tinieblas y el alba' es una obra maestra de la escritura que no desmerece en nada al libro madre. de hecho, esta novela me ha gustado más que alguno de sus hermanos de la saga, como 'Un mundo sin fin', que no fui capaz de terminar, y eso que soy un amante de la saga. Para mi gusto, este libro es el
segundo mejor de todos, aunque no llega al nivel de 'Los pilares de la tierra'. Los personajes son fieles a los de la saga, los buenos son muy buenos y los malos muy malos. Los modos de actuar son definidos, los diálogos, muy buenos. Los personajes evolucionan y hacen que conectes con ellos desde el principio. Con esta novela me pasa lo mismo que con las precedentes: los personajes femeninos, para mi gusto, son mejores que los femeninos. al menos a mí me han enganchado mucho más. Ragna, en concreto, es sublime. La novela fluye con facilidad, antes de que te descuenta, ya te has leído casi doscientas páginas.

Si buscas una historia que te conmueva, que te enganche y no te suelte, la historia de Follet cumple todos los requisitos.



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