El gran Gatsby

L'Editorial labutxaca ha modernitzat la seva publicació de la novel·la clàssica americana per antonomàsia “El Gran Gatsby” de Francis Scott Fitzgerald afegint a la seva versió una sobrecoberta desmuntable que es pot transformar en punt de llibre del pòster de la pel·lícula que fa molt poc s'ha estrenat, un gran encert per portar a un públic més jove una de les novel·les més llegides, estudiades i valorades des de la dècada dels anys quaranta.
Tot i que en el moment de la seva publicació, l'any 1926, no va ser un gran èxit, va despertar molts sentiments contraposats, opinions a favor i en contra, i al cap i a la fi si la gent en parlava devia ser que tenia entre les seves planes una historia que valia la pena explicar. Però a la dècada dels quaranta va revifar com un fènix revifa de les seves cendres.
F.S. Fitzgerald va recrear l'època daurada dels anys vint amb una visió més complexa, el lector pot gaudir de magnifiques festes, d'un ambient d'ensomni, entrar en una vida accelerada on la tragèdia tindrà també la seva oportunitat d'aparèixer.
És innegable el talent de l'autor, la seva prosa marcant un tempo que el lector agrairà i amb el qual serà seduït, els seus diàlegs aporten vivesa i dinamisme i la seva narració és magistral, sense oblidar-nos dels goig de les seves descripcions que transporten al lector al West Egg de la prospera Long Island.
La historia es centra en un jove misteriós, folrat de diners i que respon al nom de Jay Gatsby que viu en una fabulosa mansió i organitza unes festes molt extravagants. Ningú sap ben bé qui és, però ningú es vol perdre l'oportunitat de gaudir de la seva companyia. Però en Gatsby amaga un rerefons tèrbol, molt clàssic de les novel·les de l'època.
En Jay ha perdut el nord per una joveneta força superficial, la Daisy, ella és transforma en la seva obsessió, en la seva bogeria i una passió desmesurada l'arrossega cap a ella. Però com en tota tragèdia al més pur estil grec apareix un tercer en discòrdia i la novel·la girarà en part de la decisió final de Daisy per un dels seus galans, es quedarà amb en Jay o amb en Tom Buchanan, una antiga estrella de futbol a Yale. Una aventura extramatrimonial, un flirteig, uns ulls gelosos i en definitiva el descobriment d'unes banyes fan precipitar el desenllaç de la historia.
El perseguir un ideal, un somni, una fantasia romàntica pot no acabar sempre bé quan és barreja amb una ambició desmesurada
Un clàssic per gaudir amb música suau de jazz, amb unes espelmes i una bona copa de cava. També és cert que podeu anar al cinema i veure'n la ultima adaptació o en DVD l'anterior, però la riquesa de la imaginació de cada un de vosaltres no és comparable amb la d'una sola persona que l'ha decidit enfocar d'una manera determinada. Un consell, primer llegir la novel·la i després gaudir de l'espectacle.
Senyor Gatsby, ens convida a la festa?

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Me gusta este libro y se convirtió en uno de mis favoritos después de reflexionarlo bastante. Creo que le queda mejor una calificación de 4.5.
La escritura de Fitzgerald es clara (el libro se deja leer sin problemas) y el argumento engancha bastante, teniendo al misterioso Gatsby como centro. No pasa lo mismo con los personajes en sí. Sinceramente, los odié, sobre todo a Daisy. Traté de darles una vuelta para ver si había algo más allá del egoísmo y la frivolidad que todos (o casi todos) muestran, pero no hubo caso.
En fin, The Great Gatsby es un buen libro, a pesar de que no haya cubierto todas mis expectativas. Me gustaría releerlo.

Tras leer y descubrir el lado más íntimo de Hemingway en París era una fiesta, y después de conocer un poco más de cerca la amistad que éste profesaba hacia F. Scott Fitzgerald, consideré que mi próxima lectura no podía ser otra que El gran Gatsby, la gran obra del escritor de Minnesota.

Fue así como me zambullí de lleno en la que es considerada como La Gran Novela Americana.

Hay libros que dejas pasar y de los que apenas te acuerdas tiempo después de concluirlos. También los hay que te atrapan y te cuesta desprenderte de su recuerdo. Pero, en un lugar aparte encontramos esos (pocos e inigualables) que se ganan la condición de eternos.

El gran Gatsby ha pasado a formar parte de mi selecta lista de novelas para enmarcar. Con una estructura simple y una narración lineal y progresiva, Fitzgerald fue capaz de crear una obra de arte en apenas doscientas páginas. Con una habilidad innata, exprime su capacidad literaria al completo para transportar al lector a la sociedad americana de los años veinte. Ante una atmósfera de éxito, donde la felicidad abandera la rutina estadounidense, siempre hay un resquicio, por mínimo que sea, que deja paso al azar y la incertidumbre.

Así se construye una trama que nos sume en un vórtice de acontecimientos que, pese a la melódica narrativa, acelera el ritmo hacia un final inevitable.

Del estilo destaco la belleza en la manera de escribir de Fitzgerald. Hay en sus palabras una amalgama de lírica, dureza y realidad que confiere a la obra una veracidad cuasi tangible.

Respecto a los protagonistas, la psicología es un factor que nos insiere de lleno en la época. La personalidad de los personajes y su comportamiento son el reflejo imperecedero sobre cómo era convivir en la cultura del consumo.

Ligado a este aspecto, llego al punto que más me ha cautivado e impactado de la lectura; la crítica feroz a una sociedad hipócrita basada en un capitalismo exacerbado. El ansia por poseerlo todo y la ambición son los motores que mueven al mundo. No hay espacio para la amistad y el amor puro. El materialismo ha socavado los corazones y las buenas intenciones y la vida se ha convertido en una lucha desbocada de intereses.

Entre una sucesión de giros inesperados y una aceleración sin freno llegamos hasta el final más vacío que he afrontado nunca.

La idea de que la vida sigue y el destino no espera ni perdona a nadie descuella sobre todo lo demás. No somos más que testigos inermes del paso del tiempo. Por eso, el consejo que parece darnos entre líneas Fitzgerald es que deberíamos alejarnos de la toxicidad de personas que nos hagan mal y establecer vínculos con aquellos que, por mucho que el mundo se vuelva en nuestra contra, estén codo a codo para acometer cualquier tormenta que venga.

Por último, es mi deber hablaros desde el corazón y recomendaros que invirtáis vuestro tiempo en leer lo que es, para mí, una joya de la Literatura Universal.
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Este fue uno de mis libros preferidos del año pasado. de hecho, se ha convertido uno de mis libros favoritos de forma indiscutible.

Hay que empezar por el inicio de esta novela que es uno de los pasajes más citados dentro de muchos ensayos y por numerosas personas:

Cuando yo era más joven y más vulnerable, mi padre me dio un consejo en el que no he dejado de pensar desde entonces.
"Antes de criticar a nadie, me dijo, recuerda que no todo el mundo ha tenido las mismas ventajas que tú".

No cabe duda del por qué es considerado un clásico, pues los personajes estan al servicio de la historia. El Gran Gatsby, ambientada en los años 20's es narrada por Nick Carraway quien se muda a una pequeña casa cerca de la gran ciudad en West Egg. Poco después, conoce a su vecino Jay Gatsby quien es popular por realizar grandes fiestas en su casa, él se acerca para revelar interés por su prima Daisy quien vive justo enfrente, al lado de lado de la bahía: en East Egg.

Fitzgerald al terminar su obra dijo:
"He escrito la mejor novela de los Estados Unidos de America".


Y de hecho, logró estar en lo cierto. Aunque puede no ser la mejor, pero sí estar entre las mejores (pues cada quien tiene sus gustos particulares).
Considero que es una gran obra, puesto que además de que Fitzgerald nos presenta una historia con crítica a su tiempo, también presenta varios simbolismos:

Los ojos del Doctor T. J. Eckleburg: Quien representa los ojos de Dios. Que todo lo ve y sabe.
La luz verde: Los sueños inalcanzables.
El uso de los colores: Blanco (inocencia), Azul (Ilusiones), Gris (Falta de Vida), Verde (esperanza).

"Pero sobre la tierra gris y las ráfagas de polvo inhóspito que soplan incesantemente sobre ella se distinguen, al cabo de un momento, los ojos del Doctor T. J. Eckleburg; son azules y gigantes: sus pupilas casi alcanzan un metro de altura. No miran desde una cara, sino desde unas enormes gafas amarillas que se apoyan en una nariz inexistente. Algún oculista insensato y bromista los debió de poner ahí para aumentar la clientela en la zona de Queens, y luego se hundió en la ceguera eterna, o los olvidó y se fue a otra parte. Pero sus ojos, algo deslucidos por los muchos días expuestos a la lluvia y al sol sin recibir jamás una mano de pintura, siguen meditando tristemente sobre el solemne vertedero".


Además de lo mencionado en lo anterior, en la historia nos hace reflexionar sobre cómo la gente fácilmente puede dejarse llevar por las apariencias; juzgándote, queriendo tu amistad por lo que tienes y no por la persona que eres.


No sólo es una lectura que debe ser imprescindible por ser un clásico de la literatura universal, sino que también por las múltiples referencias que se pueden encontrar hoy en día en diferentes obras literarias.

Con respecto al personaje de Jay Gatsby, les digo que lo llevo en mi corazón por la enseñanza que me dejó debido a que nos muestra la perseverancia para conseguir un sueño. Los sueños no se cumplen sólo porque uno lo sueñe, sino que debemos de esforzarnos por ello. Y eso fue precisamente lo que me dejó el haber leído la parte en que nos muestran el itinerario de Gatsby para mejorarse como persona.

Una obra que recomiendo mucho, y espero que ustedes puedan leer pronto.

Este es uno de esos libros en los que no pasa gran cosa pero que, aun así, tiene algo de interés. Te puede encantar o dejarte totalmente indiferente, pero creo que los temas de los que trata se apreciarían mejor tras una relectura. Es un libro de amor, traición, costumbres sociales y del sueño americano.

Es curioso cómo el libro está narrado en primera persona por Nick pero éste realmente no actúa sobre los hechos. La impresión que me ha dado es que es un mero espectador en la vida de los demás, como si hiciera de puente entre el West y el East Egg. Casi toda la narración se centra en Gatsby, su pasado, su persona. Raro es el capítulo donde no se mencione o no esté presente, al menos, en la mente de Nick. Y es que apenas se ahonda en sus pensamientos o sentimientos. Se puede deducir, sí, pero pierden importancia en comparación con esa focalización en Gatsby y en su vida de lujos.

Antes os decía que es uno de esos libros en los que no pasa gran cosa... Bueno, sí que pasan en momentos puntuales. El resto, es un poco difuso. Te deja caer cosas como quien no viene a cuento en vez de decirte claramente lo que ha pasado. Yo prefiero que no me dejen las cosas en el aire, porque ahora me como la cabeza pensando si de verdad ha pasado esa cosa o no (me refiero sobre todo a la manera en que Gatsby consiguió su fortuna. Yo voto que sí que). El paso del tiempo tampoco queda demasiado claro. Nick te cuenta lo justo y necesario y poco más. Eso sí, todo contado muy bonito y con un estilo muy evocador.

Lo que me ha transmitido el libro es un poco la superficialidad y la hipocresía de la clase alta. La gente se ve atraía por el lujo, no por la clase humilde. Vamos, que si no hay lujo, no hay tu tía. Y con respecto al sueño americano, lo que quería la gente era vivir un idilio: tener un matrimonio perfecto, casa propia propia, los niños, un perro, permitirse cosas materiales como un coche... Bueno, pues aquí no vemos matrimonios felices ni perfectos: vemos la realidad, lo interesadas que pueden llegar a ser algunas personas. al final, casi todo se reduce al "qué dirán", a mantener las apariencias y a elegir el camino que más le convenga a uno aunque eso signifique darle una puñalada trapera a quien intenta darlo todo por ti.
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En cuanto a la trama, me ha sorprendido gratamente que a parte de profundizar en la sociedad de los años 20, también se nos muestra una de las mejores historias de amor que yo he podido leer jamás y todo ello sin ser romántica ni pretenderlo.

Me encanta la evolución que tiene la historia a medida que avanzamos en ella. Comencé la lectura un poco perdida, sin entender muy bien qué estaba ocurriendo, qué misterios rodeaban a Gatsby y quién era él realmente, y cuando me quise dar cuenta estaba prejuzgando al personaje de Gatsby y a su vida, y es que todas las personas tendemos a prejuzgar a otras a pesar de no poseer todos los datos de su vida.

El narrador de la historia es Mr. Carraway, un ciudadano que llega del Oeste y se muda a la casa de al lado de Gatsby con el que congeniará bastante bien. Desde el principio, el narrador nos va contando todo lo que ve y lo que él va pensando sobre Gatsby y su misteriosa vida.

El personaje de Gatsby irradia una fuerza desgarradora en cada una de sus palabras con un carácter que atrae desde el minuto uno la atención del lector, y es que Gatsby es un hombre hecho a sí mismo, que vive por y para lograr un sueño en el que piensa desde hace años, es un hombre idealista y me ha parecido de los mejores personajes de la literatura que me he podido encontrar.

Otros personajes principales que aparecen, y que tienen peso en la trama, son el matrimonio Buchanam, formado por Tom y Daisy. Ambos son ambiciosos en cuanto a que para ellos el dinero vale más que cualquier otra cosa en el mundo, y en el caso de Tom, es el personaje que peor me ha caído de todos los que van apareciendo ya que es arrogante, engreído, la típica persona que ni come ni deja comer, que siente envidia de todo el mundo pero aun así hace ver qué el es mejor en todo y su vida es mucho mejor que la de cualquiera.

Por otra parte, el final de la obra me ha gustado mucho, ya que me ha sorprendido el giro que dan los acontecimientos. Yo particularmente no me esperaba ese final para nada y, pese a que no me ha parecido un final muy justo, si me ha parecido un final perfecto para toda la historia y todo lo que rodeaba a El gran Gatsby.
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Leí la novela después de ver la película, por increíble que parezca me alegro de haberlo hecho, creo que fue gracias a que vi como se desarrollaría la historia que pude sacar adelante la molestia que el personaje femenino ejercía en mi como lectora, sin lugar a dudas es uno de los personajes mas desalmados que he leído jamas...