InicioMis librosAñadir libros
Descubrir
LibrosAutoresLectoresCríticasCitasListasTest
ISBN : 8496694755
440 páginas
Editorial: Verticales (01/11/2007)

Calificación promedio : 4.5/5 (sobre 1 calificaciones)
Resumen:
Aún no tenemos la descripción del editor en nuestra base de datos (contraportada)
Añadir la descripción del editor

También puedes contribuir a la descripción colectiva redactada por los miembros de Babelio.
Contribuir a la descripción colectiva
Comprar este libro en papel, epub, pdf en

Amazon ESAgapeaCasa del libro
Críticas, Reseñas y Opiniones (1) Añadir una crítica
Celia_0504
 30 May 2022
#Retovictorianspirits de la cuenta @victorianspiritsblog, premisa “Un libro de misterio”.

Leer Wilkie Collins siempre es bien. Y ya está.

Tiene novelas mejores que otras, hay en él cosas que no me acaban de convencer, como las situaciones que resultan demasiado forzadas, las coincidencias milagrosas, y el hecho de que siempre haya tenido la impresión de que es demasiado deudor de su buen e influyente amigo Charles Dickens. Pero todas sus obras se leen con la misma facilidad que se bebe un vaso de agua, y que enganchan mucho, con personajes muy bien construidos y un trasfondo de critica hacia la sociedad de su época que se esconde, muchas veces, tras tramas de misterio y romance enfocadas en impactar y resultar intrigantes para el lector . Es un autor que, tras su aparente liviandad, esconde mucho y al que hay tener en cuenta. Y por todo eso siento especial debilidad por él.

Publicada originalmente en 1881 , “La Sotana Negra” es, quizás, una de sus obras más desconocidas para el gran público. Está protagonizada por Lewis Romayne, un rico hacendado de personalidad retraída y nerviosa, que vive centrado en sus estudios y escritos, prefiriéndoles a la compañía de sus semejantes. En un viaje a Francia, se ve envuelto en un trágico accidente que le hará contraer una enfermedad nerviosa. En esas, aparecerán en su vida dos personajes que lucharan por su alma y su felicidad (y sus riquezas): por un lado está Stella Eyrecourt, una hermosa muchacha que se enamorara de él, y en cuyo pasado hay un sórdido secreto. Por el otro, encontramos al retorcido Padre Benwell, un cura que es, además, un destacado miembro de los Jesuitas, él cual buscara por todos los medios convertir a Romayne al catolicismo para que done a la iglesia de Roma sus tierras, las cuales fueron confiscadas en su momento por el rey Enrique VIII durante la Disolución de los Monasterios.

Dentro del reto victoriano de la cuenta @victorianspiritsblog, he puesto esta lectura dentro de la premisa de un libro de misterio. Pero debo decir que aunque lo que es misterio si que lo hay, este ingrediente no es tan prominente como, por ejemplo, en las dos obras más famosas de Collins “La Dama de Blanco” y “La Piedra Lunar”. No obstante, a lo largo de toda esta lectura hay una atmósfera de misterio y de tensión que revolotea en la misma todo el rato. Por eso, y porque tenia que meter a Collins en alguna parte del reto, es que la novela que nos ocupa tiene este puesto. de todas formas, tampoco está tan desencaminado todo esto, ya que las novelas de Collins están inscritas en el genero de las sensational novels.

Se trata de un tipo de obras que nacieron al calor del siglo XIX, cuando los cambios económicos, industriales e ideológicos que fueron los motores de la época victoriana, favorecieron que Inglaterra se convirtiera en “un país de lectores” y que la novela se revalorizada. La alfabetización y democratización de la sociedad, y las mejoras y reducción de costes en el mundo editorial hicieron que la lectura se convirtiera en el hobbie nacional. Empezaron a surgir las llamadas novelas de folletín; publicaciones por entregas a precios módicos que se llevaban acabo en revistas o seminarios. En cada numero salía un capitulo del libro que, posteriormente, saldría publicado en su totalidad, primero en ediciones en tres volúmenes, luego en una sola y, finalmente, en un tomo barato y fácil de llevar, pensado para ser guardado en un bolsillo y así poder ser leído en el tren. Como autor, Collins fue uno de los que mejor entendió los mecanismos de las publicaciones por entregas. Siempre pendiente de las reacciones del público a sus publicaciones, para saber qué es lo que podría gustarles más en la siguiente entrega, en sus trabajos encontramos historias creíbles, argumentos llenos de fuerza y vida, diálogos ágiles y misterios secundarios que lograran enganchar al lector, provocarle la necesidad de saber qué sucedería en la siguiente entrega de la publicación. Vamos, como las series o culebrones de la actualidad. Había nacido un género nuevo, el del suspense.

“La Sotana Negra” es hija de está forma de literatura que tan influyente resulta aún hoy en día. Como he dicho antes, es una novela en la que la tensión se masca desde, prácticamente, su primera página. Los giros, las sorpresas y los descubrimientos no paran de surgir a lo largo y ancho de su trama, y todo está llevado con gran maestría y eficacia por parte de su creador. Es cierto que hay momentos y situaciones que resultan muy impostados, y elementos y personajes que a veces son demasiado melodramáticos (circunstancias que suelen darse en todas las obras de Collins). Pero esto no equivale a que resulten poco creíbles. En esto tiene mucho que ver la técnica narrativa de Collins y sus grandes capacidades literarias. Como viene siendo habitual en sus trabajos, utiliza diferentes recursos narrativos, como pueden ser la voz de un narrador omnisciente, las cartas y los testimonios de algunos de los personajes y fragmentos de diarios. Esta narrativa aporta no solo gran credibilidad y solidez al argumento, también contribuye a agilizar su lectura. Permite al lector ver las diferentes perspectivas que tienen los distintos personajes que aparecen a lo largo de las páginas de esta novela, comprobándose que no hay una única visión, es el lector quien debe tomar partido por alguna de ellas.

Esto también facilita el que se puedan caracterizar de forma realista y cercana a estos personajes. Ninguno es blanco o negro, todos están inscritos en variadas tonalidades grisáceas, pues cada uno tiene sus propias metas y motivos para actuar como lo hacen. Y esto resulta refrescante especialmente en una obra con un sesgo tan profundamente anticlerical. No podemos olvidar los prejuicios existentes en la victoriana Inglaterra protestante contra los católicos y su clero, algo que, por ejemplo se ve muy bien en los trabajos de otra de las grandes autoras de la época, Charlotte Bronte. de ahí, que frente a estos prejuicios, resulte muy refrescante ver como Collins pone la religión como una mera excusa para presentarnos una historia que trata sobre temas universales como la ambición, el poder de la persuasión y las debilidades humanas, la forma en que nuestros pecados y nuestros errores acaban por marcar nuestro destino. Para él es más importante crear una trama sólida y bien hilvanada protagonizada por unos caracteres bien construidos, y que la critica social (que en este caso tampoco falta) no haga perder de vista lo meramente literario.

En este apartado hay que destacar al personaje del padre Benwell, gran antagonista de la historia. Se trata de un hombre lleno de contrastes. Es el malo oficial de la historia, sí, pero al mismo tiempo en el cierta bondad, que queda matizado cuando se nos muestra, con tanta eficacia y claridad, sus procesos mentales y la forma en que cree en que lo que hace es lo correcto. Todo ello sazonado con cierta dosis de retorcimiento, astucia y falsedad. Sin andarse mucho por las ramas, Collins crea con gran simplicidad un personaje realmente complejo, que a mí me ha recordado mucho al inolvidable y perturbador conde Fosco de su, aún hoy en día, obra más conocida, “La Dama de Blanco”.

Él es uno de los vértices de uno de los triángulos más sorprendentes e innovadores que he leído nunca. El amor y la pasión no lo es todo en la relación que se establece entre el cura y los componentes de la pareja protagonista, Romayne y Stella. Hay en este triángulo un componente más potente y drámatico, cimentado en las ambiciones monetarias y concentrado en la lucha por el alma y el destino de Romayne, el premio por el que lucharan enconadamente Benwell y Stella. Y lo harán de una forma en la que todo estará permitido. Esto da a la historia una perspectiva muy interesante, y le otorga gran originalidad. Es una novela en la que se juega con las convicciones y con las perspectivas del lector.En esto también contribuye otro elemento: el auténtico héroe de la historia, tal y como podemos pensar que es este prototipo, tarda en hacer su aparición. Frente al personaje de Winterfield, el gran pecado de Romayne es su falta de fuerza y su carácter voluble, el cual se convierte en uno de los motores de la novela. Romayne, al final, es un personaje demasiado flemático que apenas controla lo que pasa en su vida y a su alrededor, siendo por los intereses y las intrigas del resto de personajes que le rodean los que le mueven sin que se de cuenta. de aquí que, al fin del cabo no sea el auténtico héroe de su propia historia, por más que si sea el protagonista de la novela. En ese sentido, es un protagonista muy de Wilkie Collins.

A todo esto, yo no quiero olvidarme de señalar que una de las cosas que ha hecho tan especial esta lectura ha sido que haya tenido la oportunidad de poder hacerla con la edición de una de mis editoriales favoritas, Cátedra. Es una edición muy cuidada, con una traducción estupenda. El texto está plagado de notas a pie de página llenas de detalles y curiosidades sobre la historia, su contexto histórico y la vida del autor que son muy interesantes y aportan mucho a la lectura. Antes de la novela hay un prólogo que, una vez más, me ha resultado muy esclarecedor. En esta ocasión, especialmente, ya que, aunque a grandes rasgos, conocía la biografía de Wilkie Collins, hay muchas cosas de las que he leído en este prologo que no conocía, y que me han ayudado a tener una mejor perspectiva de uno de mis autores favoritos y a saber más sobre él y el oficio de escritor en su época. En serio os digo que si por mí fuera, me leería todos los libros de literatura clásica sacados por este sello editorial, ya que creo que merece la pena solo por lo que aportan a la lectura.

Para terminar, reconozco que no estoy muy segura de si “La Sotana Negra” es o no una de las mejores obras que ha salido de la pluma de Wilkie Collins. Pero tengo muy claro (desde el mismo momento en que lo cerré) que este libro está destinado a convertirse en uno de mis favoritos de este autor, junto a “Sin Nombre” y “La Dama de Blanco”. Es una novela en la que los tiempos están muy bien llevados, en la cual no paran de pasar cosas y cuya lectura se disfruta totalmente de principio a fin. Una gran muestra del estupendo escritor que era y Collins (en serio, si podéis leer el prólogo de la edición de Cátedra. Ahí se menciona como se esforzaba el hombre en su oficio y lo bien que lo manejaba).Nunca dejará de alegrarme que poco a poco se vaya dándole relevancia dentro del panorama de los escritores victorianas. Desde luego que, para mí, es uno de los narradores más destacables de este periodo , y que se le de la relevancia que se merece me pone muy contenta y me parece justo. Aunque solo sea por lo que el disfrute que supone leer alguno de sus trabajos.
+ Leer más
Comentar  Me gusta         72
Videos de Wilkie Collins (3) Ver másAñadir vídeo
Vidéo de Wilkie Collins
Wilkie Collins; "Armadale". "Wilkie Collins teje una trama envolvente y seductora rebosante de suspense, intriga y golpes de efecto, que brega entre identidades confusas, maldiciones heredadas, rivalidades amorosas, espionaje y asesinatos. Un melodrama que sirve al autor para desarrollar el asunto de la identidad y la amistad".
Libros más populares de la semana Ver más
Comprar este libro en papel, epub, pdf en

Amazon ESAgapeaCasa del libro





Test Ver más

La Metamorfosis

Gregorio Samsa es un ...

escritor
viajante de comercio
banquero
burócrata

13 preguntas
839 lectores participarón
Thème : La metamorfosis de Franz KafkaCrear un test sobre este libro