La dama de blanco

Tenía muchas ganas de leer a este autor y pensé que el libro se trataba de un misterio con una investigación policial, y nada que ver
Aún así me sorprendió y me gustado bastante. Es denso, no lo niego, y está escrito con el lenguaje de otra época, pero a la vez lo hace diferente y muy interesante. Está narrado de forma epistolar y vemos los pensamientos de cada uno de los protagonistas. Los personajes están muy bien caracterizados y son la gran baza del libro, unos personajes para recordar.

El misterio queda bien resuelto y explicado y es un libro que recomiendo sin duda.

No sé porque tenía la idea de que era una novela de miedo. No lo es. Sin embargo, me he encontrado con una intriga bastante interesante y un personaje entrañable.
Está escrito a modo epistolar, o de diario, y va cambiando de personaje y, por tanto, de perspectiva, para hilar una historia curiosa y coral.
El libro es larguísimo y en ocasiones se hace tedioso. Quizá si no lo hubiera leído en grupo, no lo habría acabado.
Cómo contrapartida tiene trozos graciosos y muy entretenidos.
Lo mejor del libro, en cuanto a personajes, son los secundarios. Los protagonistas son bastante insulsos, la verdad.
En resumen, un clásico, original en su época, sin duda. Hoy día ya ampliamente superado.

A lo largo de mi vida lectora he leído muchas novelas clásicas. La dama de Blanco es una de ellas. Volviendo a ordenar libros apareció de nuevo y no dude en trasladarla al interminable montón de relecturas Nos encontramos ante una obra epistolar de la literatura gótica inspirada en hechos reales durante la Inglaterra victoriana, S. XIX. Escrita en 1859, avanza sinuosamente en 800 páginas de descripciones pulcras, perfectas, visuales, muy precisas y con un aire muy Dickens en sus líneas. 

El punto dramático-emocional en esta obra son sus grandes virtudes y aunque puede resultar un poco “pesada”, vale la pena leer por su gran riqueza lingüística.

Dicen grandes escritores que “La dama de Blanco” pertenecen a la estirpe de los libros inolvidables y es considerada una de las primeras novelas de misterio, hoy sería un thriller.

A través de una narración en primera persona se va creando una atmósfera de misterio e intriga. Su protagonista se inmiscuye en un mundo misterioso generado por una atracción prohibida, cayendo en una red de maldad insalvable.  

El juego de narradores que cimenta el relato nos permiten obtener información de los sucesos desde diferentes puntos de vista, serán sus personajes los que le pongan la guinda a la trama.

Su prosa es dinámica y elegante, te traslada a un ambiente de sospecha y de duda en el que inteligencia está al servicio del mal que poseen algunos de sus personajes. 

Manipuladores maestros y sin ningún tipo de remordimientos llevan a nuestros protagonistas al borde de la desesperación. Contiene giros sorprendentes y la tensión va creciendo hasta el final.

Hay misterio y romanticismo, investigación y secretos, personajes bondadosos frente a personajes malvados, la presencia del bien contra la existencia del mal.

Hay libros de los que se lleva hablando tanto tiempo que parece que no queda nada que contar.         Me ha encantado releerlo y en vísperas de Todos Los Santos más. 

A mí me ha transportado de nuevo a esa primera vez que lo saque de la librería de casa de mis abuelos.

¿Conocías esta novela? 

¿Pero cómo no he leído esta obra antes? ¡Qué delicadeza! ¡Qué intensidad! ¡Qué deleite al pasar las páginas! Y es que el ritmo de su trama, al principio, pensé que era como un mar en calma y despues me vi naufragando (¿exagerada? sí soy).
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Está estructurado en diversos testimonios que van revelando cada uno de los personajes a través de cartas, manuscritos y diarios.
¿Hablamos de los personajes? Hablemos:
Todos y cada uno de ellos están brillantemente perfilados. Tanto que podía ponerles voces en mi cabeza, imaginarme sus voces, su tono, su timbre, sus gestos, sus ironías y sus cambios de humor. Quiero recalcar que incluso los más secundarios están totalmente ligados y dan pistas importantes; son como las piezas perfectamente encajadas de un puzzle.
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Cositas que quiero destacar:
- Marian al comienzo de la historia (si lo habéis leído igual pensáis como yo).
- EL MARAVILLOSO DIARIO DE MARIAN.
- El amor que profesa Marian.
- La inteligencia y temple de Marian.
- El villano tan magnífico. SOBERBIO.
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En conclusión, todo lo anterior junto con una ambientación fantástica y los temas sociales de la época (siglo XIX) que abarca, se ha convertido sin duda en una de mis lecturas favoritas en lo que va de año. Amo los clásicos victorianos y si son policíacos más aún. de verdad, echaba de menos leer una obra así. He quedado totalmente atrapada en cada una de sus páginas.
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"Mi hora del té son las cinco y media, y mis tostadas con mantequilla no esperan a nadie."

Un clásico de la literatura que tenia pendiente desde hace dos años, y ahora que lo terminé no puedo creer porque me demoré tanto en leerlo, para mi fue una historia realmente atrapante, me tuvo en suspenso todo el tiempo, creo que los personajes están muy bien desarrollados y la historia evoluciona muy bien, el climax de la trama me hizo sentir ansiosa y frustrada por todo lo que pasaba, quería saber que mas seguía y me costaba trabajo dejar el libro; tal vez el desenlace se me hizo mas largo de lo que hubiera querido, ya que hizo que se enfriara un poco la emoción que venía llevando la historia hasta que alcanza su cima; sin embargo sigo considerando que esta muy bien llevada la trama, se maneja un suspenso en asenso la mayor parte del tiempo y adicionalmente me pareció tan bien escrita, cada oración, cada dialogo, cada pensamiento de los narradores, todo formaba parte de la historia, no me pareció que exagerara en descripciones, y aquí es donde uno es capaz de admirar la maravillosa prosa con la que escribían la mayoría de escritores de la época. El final creo que es redondo, cierran muy bien todos los personajes y eso no siempre es fácil de conseguir; al menos a mí me gustó, hay personajes que aprecias y otros que son realmente fastidiosos pero que se mantienen en su roll. Definitivamente, deseo leer más de este escritor.