La deseo tanto como su jamás nos hubiéramos conocido. Por otra parte, conocerla quizá sea una razón para desearla aún más
|
La deseo tanto como su jamás nos hubiéramos conocido. Por otra parte, conocerla quizá sea una razón para desearla aún más
|
No llegará sino demasiado pronto el tiempo en el que, degradada por la caída, no será ya para mí más que una mujer vulgar
|
Déjeme al menos el tiempo de observar estos conmovedores combates entre el amor y la virtud
|
Debería haber previsto este cambio, por las dificultades que de un tiempo a esta parte hallo para todo. El amor no pone tantos obstáculos
|
Un interés más dulce y no menos cariñoso sucederá a esta violenta agitación; entonces, respirando gracias a su bondad, amaré mi existencia y me diré con el corazón alegre: esta calma que siento, se la debo a mi amigo
|
Por un incomprensible poder, sin conseguir jamás decirle lo que quiero, me pasó el tiempo escuchando lo que no debería oír
|
Una fingida amistad, una aparente confianza, algún proceder generoso, la idea halagüeña que cada cual conserva de haber sido mi único amante, me han valido si discreción
|
¿Cuándo me ha visto apartarme de las normas que me he prescrito o faltar a mis principios? Digo mis principios y lo digo deliberadamente: pues no me han sido dados al azar como a las demás mujeres, ni los he aceptado sin examen, ni los he seguido por costumbre; son el fruto de mis profundas reflexiones; los he inventado yo, y puedo decir que son mi propia obra
|
Insensatas que no saben ver en su actual amante al enemigo futuro
|
¡Cuánta piedad me inspiran sus temores! ¡Cuánto me prueban mi superioridad sobre usted! ¡Ay! Mi pobre Valmont, ¡cuánta distancia hay todavía aún entre usted y yo!
|
Es un poema épico griego compuesto por 24 cantos, atribuido al poeta griego Homero. Narra la vuelta a casa, tras la guerra de Troya, del héroe griego Ulises