En busca de Perséfone

AY, SANTA CACHUCHA, QUE ESTO VA DE LOBOS!

Bueno, de lobos y de algo más🤭, y ese algo más es una pasada!

Pero empecemos por el principio, que me conozco y me pierdo solita🥴. ¿A quién no le apetece leer un retelling de la bella y la Bestia ambientado en la regencia😍? Vamos, a mí muchísimo, y si además le añadimos un duque arrisco, una mansión oscura y silenciosa, un bosque tenebroso y una Bella increíble, pues ya tenemos montado el sarao del siglo.

Y qué sarao! de esos que te calientan el corazón mientras los lees, de los que te dibujan una sonrisa en los labios y te hacen suspirar y reír. Es más, si esto es una muestra de lo que nos espera en el siguiente libro de esta bilogía, pa'mañana es tarde! Y es que estoy deseando leer más historias de esta autora❤️!

Adam duque de Kielder tiene que casarse y elige a Perséfone porque su familia está arruinada y el es su salvación. No se conocen pero la fama del duque le precede, es arisco y tiene mal genio entre otras cosas.
Se casan y cuando llega al castillo donde vivirá Perséfone descubre un lugar frío y rodeado de un bosque tenebroso con lobos.
Poco a poco la dulzura y bondad de Penélope calaran en el corazón de Adam y la cosa comenzará a cambiar.
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Me ha encantado este libro, por un lado tiene un toque de la bella y bestia, mi cuento preferido y por otro lado tiene un toque de mitología muy chulo, es genial.
La historia es muy entretenida, engancha desde el principio, no podía dejar de leer y también tiene momentos muy divertidos, una delicia de libro en todos los sentidos.
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Me han encantado ambos protas pero es que Adam me ha super encantado, me he reído con el muchísimo, tiene unas conversaciones con su mejor amigo geniales, de estas personas que quiere ir de malote pero es un buenazo y bueno genial y muy buenos esos momentos.
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En general una maravilla de libro en todos los sentidos, os lo recomiendo un montón.
Deseando de leer el siguiente libro de esta saga o trilogía no sé qué será, por cierto son historias independientes.

El mito de Hades y Perséfone se cruza con La bella y la bestia para crear este precioso y dulce romance de época. Suave, tierna, risueña, la novela recrea los hitos de ambas historias para deleitarnos con un duque huraño y una damisela en apuros que se enamoran al amparo del castillo de Falstone.

Conozco a la autora de las redes sociales y me alegra muchísimo que por fin sus novelas empiecen a publicarse en español. Mi debut con ella me ha agradado especialmente por su prosa límpida, la atmósfera candorosa y la evocación de la bella y la bestia.

El duque de Kielder se presenta intimidante, casi un ogro enclaustrado en su castillo inmisericorde. Sufre de enfados petulantes y, en un arranque de arrogancia, lanza un plan descabellado de concertar un matrimonio a la carta con una joven lo bastante desesperada como para ignorar las cicatrices que marcan su rostro. A partir de ahí, es puro disfrute asistir a la convivencia de esta pareja de desconocidos tan opuestos en el castillo en medio de un tétrico bosque.

Perséfone es una dama compasiva, benevolente y abierta al cariño. Así que supone un reto para el implacable duque mantener su armadura intacta ante la influencia de su adorable esposa. Me he sentido muy arropada en este romance doméstico que se basa en la relación que paulatinamente va abriéndose camino en los corazones de sus protagonistas. al duque se le van cayendo las murallas que ha construido inadvertidamente para soportar el rigor de su puesto social, el abandono familiar y la lacra de su deformación. En cuanto a Perséfone, lucha contra su aparente ineptitud en su calidad de esposa de tan ilustre personaje.

En esos malentendidos radica el hechizo de la novela. El trato es muy puro, lo que confiere todo el peso de la relación a un lento acercamiento, a atisbos de vulnerabilidad y ternura. Me encantaba la hosquedad del duque rebotando contra la delicadeza de su esposa porque se producen encuentros interesantes en los que se van conociendo, las emociones afloran, el duque va comprendiendo mejor su propia naturaleza y el matrimonio de conveniencia se va transformando en un romance inspirador. Entre mis escenas favoritas están las conversaciones jocosas con su amigo Harry, la dedicación de Perséfone a su situación marital, un drama intenso de peligro y emoción en la última parte del libro y, sobre todo, el momento de epifanía tan mitológica que marca una encrucijada en el amor de la pareja.

Recomendable para caprichos de amor platónico, redentor y encantador. Ya me he apuntado la siguiente novela, La dama y el plebeyo :o)
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Un duque de mal genio, que se "sacrifica" escogiendo la única opción posible, a fin de que sus familiares más cercanos no hereden sus tierras de Falstone. Es por ello que termina casándose con Perséfone, hija mayor de un barón en evidente bancarrota, y que, a diferencia de su marido, goza de un carácter dulce y empático. Dicen que los polos opuestos se atraen... y esta, no será la excepción.

Así es como arranca esta historia de amor que, en más de un detalle, recuerda al clásico de la bella y la bestia. Sobre todo, por cierto incidente que involucra a unos lobos. Pero vamos por partes.

El primero al que tenemos el gusto de conocer, será al gruñón de Adam Boyce, más conocido como el actual duque de Kielder. Y digo gusto, porque desde el primer capítulo podemos disfrutar del cómico planteamiento sarcástico y algo radical del que hace gala nuestro protagonista. Me encanto ese primer diálogo junto a su asesor financiero. Aunque también es cierto que desde ese inicio tendremos ciertas pinceladas del verdadero yo de Adam. Porque sí, no es tan fiero como lo pintan, pero debido a ciertas circunstancias, se vio obligado a adoptar aquel, hacer algo feroz para mantener a todos a su alrededor a raya, y también alejados de él. Algo que, como ya podéis imaginar, tratara de hacer igualmente con su esposa.

Por el otro lado tenemos a nuestra "bella" protagonista, (lo siento, pero tenía que hacer el chiste... XD), que como hija mayor de seis hermanos, y que ama sobre todas las cosas a su familia, incluyendo a su padre, decide aceptar la proposición del duque. Aún consiente de que cabe la posibilidad de ser una completa infeliz junto a un hombre que podría ser, de todo, menos amoroso y respetuoso con ella.

El encuentro entre ambos se da el mismo día de la boda. Sí, así tal cual. Para suplicio de Adam, su ahora mujer es más bonita de lo que esperaba. de hecho, la imaginaba más bien poco agraciada. Y para desconcierto de ella, él se muestra evasivo y parco en palabras. Sin embargo, en cada mínima brecha que le permite vislumbrar al hombre tras el título, hace que se sienta extrañamente atraída por su ahora esposo.

Poco a poco la dulzura de Perséfone ira rompiendo la coraza de Adam, descubriendo que aquel matrimonio fue la mejor decisión de sus vidas.

Personalmente, reconozco que aunque la historia es supertierna y romántica, para mi gusto se me hizo algo lenta. No llegando a un cierto ritmo hasta bien llegado el final. Aun así, me gusto mucho los diálogos y diputas internas de ambos, al sentirse claramente atraídos.

Adam es un personaje de lo más amoroso, cuando al fin se muestra su verdadero yo. Y Perséfone, goza de más valentía y tenacidad de lo que ella misma cree. Ambos personajes me gustaron mucho, y encuentro que, en general, es una buena y entretenida historia de amor.

El primer libro de "Los Lancaster" nos muestra un romance "que se cuece a fuego lento". Dando como resultado a una pareja de lo más dispar, que encuentran a su perfecto compañero, en donde al principio solo había conveniencia.
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Una romántica historia de amor donde una joven bella conquistará el amor de una bestia algo arisca.

En la novela En busca de Perséfone de Sarah M. Eden conoceremos a Perséfone, una joven que deberá traspasar el frío corazón de su esposo, el duque de Kielder.

Adam, duque de Kielder, lleva toda su vida recluido en el castillo de Falstone por las feas cicatrices que surcan su rostro, pero su vida se verá alterada cuando descubra que deberá casarse para dejar un heredero. Perséfone Lancaster se ocupó de sus hermanos como si fueran sus hijos y, por esto y por su precaria situación económica, nunca ha tenido esperanzas de contraer matrimonio, por lo que la repentina propuesta del duque de Kielder la pillara desprevenida. La sorpresa será mayor cuando sea un joven caballero el que la espera en el altar. Desde ese instante algo le intrigará de su esposo, tiene la necesidad de saber que le ocurrió en el rostro y por qué no posa sus ojos en ella. Perséfone se verá rodeada de frialdad tanto por su esposo como por el castillo, el bosque que rodea al castillo es oscuro y encierra peligros, una manada de lobos anda cerca y todas las noches la asustan obligándola a refugiarse en el dormitorio de Adam, una situación tierna que irá ablandando el corazón del duque. Adam descubrirá que cada vez se le hace más difícil apartarla de su lado, Perséfone siente que hay algo más en él por lo que las risas y los momentos que compartirán harán que la joven sienta un cálido sentimiento por él.

Sarah M. Eden nos trae un romance que ha ido formándose con el tiempo y con cada encuentro. Con una pluma fresca y adictiva conoceremos una versión de Regencia del clásico La bella y la bestia. Adam, un joven caballero que ha pasado toda su vida encerrado en su castillo se verá obligado a contraer matrimonio, Perséfone intentará ser una digna duquesa, está segura de que Adam no le infunde miedo, quiere acercarse a él y hacerlo sonreír. Pero no dejar las cosas claras los llevará a equivocaciones que pueden separarlos, aunque no estarán solos ya que contarán con la ayuda de terceras personas que creen firmemente en su amor.

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