Mi isla

Lo odié durante un segundo como se odian esas cosas que sabemos que nunca tendremos.

La soledad no depende de la cantidad de gente que te rodee.

En momentos de debilidad es cuando uno se demuestra a sí mismo la voluntad de crecer.

"No tenía sentido encerrarse en una cárcel de cristal y sentarse a observar lo que pasaba fuera porque lo que no me hacía daño tampoco me permitía sentir"

Si algún día tuve opción de olvidarlo, de aprender a no quererlo…, la perdí aquel día.

Que nadie os mienta…, llorar puede salvaros la vida.

No es cuestión de suerte ni de sentirte especial tras una grandilocuente moñada. Sentirse especial se construye minuto a minuto, hora tras hora, día tras día, cuando te conviertes en una prioridad para alguien.

Hay pocas cosas en el mundo que me gusten más que un hombre guapo leyendo.

Aprecié el silencio y aprendí a escucharme. Me di cuenta de que cuando una está bien sola, lo demás da igual.

Si algo he aprendido con los años es que si uno no persona sus propios errores está condenado a repetirlos.