La jaula del rey

Los que saben qué es vivir en la oscuridad, harán lo que sea para permanecer en la luz.

Que eres una sombra de la persona que es tu sol.

Y por más que me den ganas de gritar, sé que no debo hacerlo. La voz de Maven siempre será más fuerte que la mía.

Lo beso por lo que pudo ser, por lo que podría ser, por lo que será... por última vez.

-No estás solo - la esperanza en sus ojos cala hondo - Tienes tu corona.

Nació para ser rey. Esto es para lo que fue hecho. Se le forjó para desear eso.

-Tiberias... Escógeme a mí.
-Mare, escógeme a mí.
Elige una corona. Elige la jaula de otro rey.

La corona está en su corazón y los corazones no cambian.

Fueron solo palabras, jamás pudo separarse de ella. Resultó simple empujarlo por ese camino y descarriarlo, el equivalente de agitar una bandera roja frente a un toro. Ella era su tormento y cada empellón lo hundía más en el ojo del huracán.

-Sé que es sólo un sueño, Mare. La ventana que teníamos, por pequeña que fuera, ya desapareció.
-Fue culpa tuya.
-Sí - y repite más bajo, admitiéndolo - , sí.