La vergüenza de Annie Ernaux
La vergüenza siempre lleva consigo la sensación de que, a partir de ese momento, puede sucederte cualquier cosa, de que es algo que no tiene fin, pues la vergüenza se alimenta de vergüenza.
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La vergüenza de Annie Ernaux
La vergüenza siempre lleva consigo la sensación de que, a partir de ese momento, puede sucederte cualquier cosa, de que es algo que no tiene fin, pues la vergüenza se alimenta de vergüenza.
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La vergüenza de Annie Ernaux
La memoria no me aporta ninguna prueba de mi permanencia o de mi identidad. AI contrario, me hace sentiry me confirma mi fragmentación e historicidad.
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La vergüenza de Annie Ernaux
No deseo escribir ningún relato, pues eso significaría crear una realidad en lugar de buscarla.
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La vergüenza de Annie Ernaux
Quizá la escritura convierta en normal cualquier suceso, incluso el más dramático.
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El hombre joven de Annie Ernaux
Pero yo sabía, mirando a esa pareja madura, que si estaba con un joven de veinticinco años, era para no tener ante mí, continuamente, la cara marcada de un hombre de mi edad, la de mi propio envejecimiento. Frente a la de A., la mía también era joven. Los hombres lo sabían desde siempre, no veía por qué me lo iba a prohibir yo.
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Los armarios vacíos de Annie Ernaux
Esos libros no hablan como nosotros, tienen sus propias palabras, sus formulas que advierten de un mundo distinto al mío
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El acontecimiento de Annie Ernaux
Comprendí que se trataba de una chica de unos veinte años que no tenía marido. Había decidido dar a luz, pero no la trataban mejor que a mí. La joven que había abortado y la madre soltera de uno de los barrios pobres de Ruan nos encontrábamos en la misma situación. Quizás a ella la despreciaran todavía más que a mí.
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La vergüenza de Annie Ernaux
Era normal tener vergüenza, como si esta fuera una consecuencia inevitable del oficio de mis padres, de sus problemas de dinero, de su pasado de obreros, de nuestra forma de ser... Para mí, la vergüenza se convirtió en una forma de vida. En el peor de los casos er algo que ya ni siquiera percibía: la llevaba dentro de mi propio cuerpo.
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La vergüenza de Annie Ernaux
La vergüenza siempre lleva consigo la sensación de que, a partir de ese momento, puede sucederte cualquier cosa, de que es algo que no tiene fin, pues la vergüenza se alimenta de vergüenza.
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Memoria de chica de Annie Ernaux
El tiempo se encoge ante mí. Forzosamente habrá un último libro, como hay un último amante, una última primavera, pero ningún signo que me lo indique. La idea de morirme antes de escribir lo que desde hace tanto tiempo llevo nombrando la chica del 58 me obsesiona. Un día ya no quedará nadie para acordarse. Lo vivido por esa chica, ninguna otra lo recordará, quedará inexplicado, vivido para nada.
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No he salido de mi noche de Annie Ernaux
A menudo sueño con ella, tal como era antes de su enfermedad. Está viva, pero ha estado muerta. Cuando me despierto, durante un minuto, sigo convencida de que vive de verdad con esa doble forma, muerta y viva a la vez, como esos personajes de la mitología griega que han franqueado dos veces el río de los muertos.
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Los armarios vacíos de Annie Ernaux
Mis padres, con la misma cara, el mismo cuerpo, pero transformados... Poder amarlos totalmente, no odiar su vida, su comportamiento, sus gustos... Soñaba con ello, los modelaba, y después me tocaba enfrentarme a ellos tal como eran... Ser incapaz de querer a unos padres, no saber por qué resulta insoportable.
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No he salido de mi noche de Annie Ernaux
Me doy cuenta de que me he acostumbrado a su degeneración, a su nuevo rostro, inhumano. Me acuerdo de ese momento terrible en que empezó a "irse".
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Una mujer de Annie Ernaux
Paso mucho tiempo preguntándome por el orden de las cosas que decir, la elección y la disposición de las palabras, como si existiera un orden ideal, el único capaz de restituir la verdad concerniente a mi madre -pero no sé en qué consiste esa verdad -y nada más cuenta para mí, en el momento en que escribo, aparte de ese orden.
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Una mujer de Annie Ernaux
Yo naceré en septiembre. Me parece que ahora escribo sobre mi madre para, a mi vez, traerla al mundo”
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Una mujer de Annie Ernaux
…ella servía patatas y leche de la mañana a la noche para que yo estuviera sentada en un anfiteatro oyendo hablar de Platón.
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Una mujer de Annie Ernaux
Elevarse, para ella, era ante todo aprender (…), y nada era más hermoso que el saber. Los libros eran los únicos objetos que manipulaba con precaución. Se lavaba las manos antes de tocarlos.
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¿Quien escribió el mas grande fenómeno de Wattpad "After"