El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde

Todo comienza cuando Mr. Utterson y Mr. Enfield daban un paseo y pasan cerca de una peculiar puerta con la pintura saltada y descolorida; éste último comienza a contar una historia en la que él estuvo involucrado, en donde un hombre de desagradable aspecto caminaba por la calle cuando se topó con una niña a la cual atropelló, pisoteándola e ignorando sus gritos. Inmediatamente se reunieron personas alrededor de la víctima mientras que él, Mr. Enfield, detenía a este extraño hombre; que resultó ser Mr. Hyde.

Lograron cobrar un cheque para la familia de la niña, por una cifra importante.. para ésto Hyde entró en aquella casa con la peculiar puerta y salió con el cheque firmado por el Dr. Jekyll.
Luego de haber escuchado la historia, Mr. Utterson, abogado de Jekyll, comienza a investigar la relación entre éste último y Mr. Hyde... ¿Porqué el Dr. Jekyll tendría como amigo a un hombre como Mr. Hyde?
Bueno, desde acá en adelante todo se lee súper rápido. La historia transcurre en el siglo XIX, de manera muy fluida y sin muchas vueltas. Queda bien en claro el énfasis que pone Stevenson en describir la dualidad del ser humano, del bien y el mal, de la razón contra el instinto de cada uno.

Es un libro, que como dije antes es fluido, se lee rápido y es interesante la pelea constante que tiene el Dr. Jekill consigo mismo para mantener "encerrado" a Mr. Hyde, como así para dejarlo en "libertad" ya que de ésta forma se siente liberado de las presiones que lo atormentan siendo él mismo, como Jekyll. Los personajes no son tantos y cada uno aporta algo especial a la historia.
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Este libro siempre me llamó la atención y debo decir que tenía una idea muy diferente de lo que trataba.
Al principio del relato no tenía idea de en qué punto se unían tanto las historias de estos dos personajes y no entendía por qué Dr. Jekyll cuidaba tanto de Mr. Hyde. Durante toda la historia te van llevando de una forma entretenida, pero para mi la parte final siento que fue demasiado rápida y llegó un punto en que me sentí un poco desfasada y con ganas de saber más de esta historia.

Pocas veces me sorprenden las novelas como me ha llegado a sorprender esta. Sabía que era un clásico, que era parecida a las de terror y que su fama la abalaba, pero jamás imaginé lo que podría llegar a encontrar entre sus páginas.

Reseña completa en el enlace a partir del 18-02-2018
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El señor Utterson, escucha de su amigo Enfield las andanzas de un oscuro personaje llamado Edward Hyde. Para hacer más extraño el caso tal individuo parece muy unido a un buen amigo común, el doctor Henry Jekyll. Su nombre no le es del todo desconocido ya que en su testamento, Jekyll ha hecho beneficiario al tal Hyde en caso de muerte o desaparición. Esto alerta al abogado y acude al doctor para rogarle que se olvide de tal asunto a la vez que decide investigar personalmente a Edward Hyde.

A pesar de conocer parte del argumento ya que es una obra muy conocida y ha sido llevada al cine y al teatro en numerosas ocasiones, no he dejado de sentir curiosidad e intriga durante todo el libro.

Me ha sorprendido que esté narrado en tercera persona, desde el punto de vista del señor Utterson, abogado de Henry Jekyll, lo cual le quita bastante protagonismo al doctor y a Hyde pero le da un aire a novela policíaca que ayuda a mantener la incógnita hasta el final. Tuvo que ser una pasada leerlo en su época sin tener idea alguna de los detalles de la historia e ir descubriéndolos poco a poco de la mano de Utterson.

Toda la novela gira entorno a la dualidad de las personas y a través de Jekyll y Hyde consigue personalizar el eterno conflicto del bien y del mal.

Debo ser de las pocas personas que no conocía el transfondo de esta historia y decidí ponerle remedio al ver lo corta que era.
Para tratarse de un clásico, es una novela muy sencilla de leer y logra que disfrutes enseguida de lo que te está narrando.

Ambientada en un Londres victoriano recubierto de niebla, se nos presenta una serie de testimonios con el fin de esclarecer quién es Hyde y qué pretende llevar a cabo ya que, tras la muerte o desaparición de el Dr. Jekyll, él sería el heredero absoluto. Esta circunstancia escama al amigo y albacea del Dr. Jekyll ya que jamás ha visto ni oido hablar de dicho personaje.

A lo largo de la trama vamos conociendo lo perverso, ruin, desagradable y cruel que es Mr. Hyde y lo buena persona y amigable que es el Dr. Jekyll. Están muy diferenciadas en toda la narración el bien y el mal, haciendo partícipe al lector de lo que es correcto y de lo que no lo es.

El libro engancha una barbaridad y se hace muy amena su lectura, pero tengo que decir que una vez que se descubre el meollo de la cuestión, el último cápitulo se me ha hecho muy pesado. En esta parte de la narración se vuelve a contar todo lo ocurrido anteriormente, pero en esta ocasión descubriendo cómo se hizo cada cosa y acto ocurrido. No está mal conocer la verdad, pero desde mi punto de vista, volver a leer practicamente todo de nuevo, me resultó un poco repetitivo y pesado.

En cuanto a los personajes principales, tal y como he dicho anteriormente, son el Dr. Jekyll y Mr. Hyde. Ambos personajes están muy bien definidos en su papel de bueno y malo, haciendo que el lector se posicione a favor de uno u otro sin ninguna complicación.

La verdad es que me ha encantado lo bien que muestra la lucha entre el bien y el mal y aunque muchas veces sea más fácil, divertido e interesante ser malvado, hay que ser consciente de lo que puede acarrear dicho comportamiento.

Repetiré seguro con alguna otra novela del autor, ya que con esta he disfrutado mucho y es de estas novelas que son perfectas a modo de transición entre otras más extensas.

Uno de los libros que no puede faltar en ninguna biblioteca. Robert Louis Stevenson usando el desdoblamiento del personaje nos muestra la lucha entre dos conceptos eternos. El bien y el mal. En una confrontación a muerte el Dr. Jekyl y Mr, Hyde, este último, un asesino víctima de las pasiones más pérfidas del ser humano va ultimando gente como un destripador psicópata incontrolable. Todo un clásico que ha influido en inmensidad de lectores y escritores. Con Stevenson el tema del doble comienza un ascenso que dejará en la literatura muchas obras excelentes. Se puede decir mucho de esta novela corta, pero es mejor que cada lector descubra y disfrute el gran estilo de este narrador que conjuntó las aventuras, la historia, la ficción y lo detectivesco en sus creaciones. Oscar Wilde un poco después publicaría su famoso Retrato de Dorian Gray y, a partir de ellos, otras grandes novelas de contenido psicológico y filosófico han enriquecido la literatura universal..

Nunca había llegado a leer este clásico de la Literatura Universal. Sí que leí, hace mucho, La isla del tesoro pero, nunca leí esta otra novela de Stevenson. La Literatura de Terror nunca ha sido de mis favoritas pero, el terror psicológico sí que es más de mi agrado, así que disfruté mucho esta novela. Me encanta como trata el tema de la naturaleza humana, el del conflicto interno del bien y el mal, y la hipocresía social. Es una clásico de lectura obligada que además de entretenerte te hará pensar.

El señor Utterson, escucha de su amigo Enfield las andanzas de un oscuro personaje llamado Edward Hyde. Para hacer más extraño el caso tal individuo parece muy unido a un buen amigo común, el doctor Henry Jekyll. Su nombre no le es del todo desconocido ya que en su testamento, Jekyll ha hecho beneficiario al tal Hyde en caso de muerte o desaparición. Esto alerta al abogado y acude al doctor para rogarle que se olvide de tal asunto a la vez que decide investigar personalmente a Edward Hyde.

A pesar de conocer parte del argumento ya que es una obra muy conocida y ha sido llevada al cine y al teatro en numerosas ocasiones, no he dejado de sentir curiosidad e intriga durante todo el libro.

Me ha sorprendido que esté narrado en tercera persona, desde el punto de vista del señor Utterson, abogado de Henry Jekyll, lo cual le quita bastante protagonismo al doctor y a Hyde pero le da un aire a novela policíaca que ayuda a mantener la incógnita hasta el final. Tuvo que ser una pasada leerlo en su época sin tener idea alguna de los detalles de la historia e ir descubriéndolos poco a poco de la mano de Utterson.

Toda la novela gira entorno a la dualidad de las personas y a través de Jekyll y Hyde consigue personalizar el eterno conflicto del bien y del mal.

Hacía tiempo que tenía este libro en la estantería y nunca encontraba el momento ideal para leerlo.
Tenía ganas de hacerlo porque a los 12 años me leí «La isla del tesoro» y me encantó, sabía que esta novela sería muy diferente, pero aun así es tan archiconocida que quería leerla.

Me sorprendió un poco el formato de la historia, no esperaba que hubiese un personaje, Utterson, que nos contase lo que ocurría desde una perspectiva externa. Creo que Stevenson tiene un estilo muy bueno y cercano para los lectores de hoy en día, así que acercarse a su obra no es difícil.

He visto en la historia cosas que me han recordado a Wilde, con respecto a que la corrupción del alma se refleja en el rostro, también por momentos sentía que estaba ante un misterio de Poe e incluso la dualidad del ser humano me ha recordado un poco a Freud, aunque este fue posterior.

Es una historia corta, que se lee muy bien, que aporta mucho y refleja muy bien la hipocresía de una clase social alta que escondía sus depravaciones durante la noche y luego, durante el día, fingían ser de lo más dignos.

Siento que a la novela intenta ocultar un poco cuales son esas cosas horribles que hacía Hyde pero aun así se ve muy bien la repulsa que despertaba en las demás personas que lo conocían.

Ha sido una lectura interesante y la edición que he manejado me ha gustado mucho porque además de notas (excelentes para lectores más jóvenes) al final incluye unas páginas con fotografías a todo color en las que nos hablan de la vida de Stevenson, de la novela, de su repercusión, influencias y versiones cinematográficas.

Cuando leo un clásico me encanta conocer la contextualización, así que es un apartado que he disfrutado mucho, así como las ilustraciones que acompañan a la historia. No me ha emocionado tanto como en su momento lo hizo «La isla del tesoro» pero esta obra también tiene sus puntos fuertes y merece la pena acercarse a ella.

Nos encontramos ante una novela corta de estilo victoriano escrita por R. L. Stevenson, sí, el autor de la isla del tesoro, un hombre que, a pesar de sus problemas pulmonares, viajó muchísimo hasta que finalmente se instaló en la isla de Samoa, donde los nativos le apodaron Tusitala, traducido como “El narrador de cuentos”.

El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde es una de las obras más conocidas y adaptadas al cine y al teatro de Stevenson, también es verdad que una gran parte de su bibliografía pertenece a los relatos de viajes, poesía y ensayo.
Publicada en 1886, como ya os he mencionado, pertenece a la narrativa de corte victoriano, es decir, pertenece a una prosa más elaborada y en la que predomina la descripción por encima del diálogo, además, se puede apreciar la importancia de la forma ante el contenido. Asimismo, en esta época en la que fue concebido, la finalidad no era solo mostrar la dualidad del hombre o asustar a los lectores, ya que, también, era una novela policíaca, de misterio. El problema es que, después de tantísimos años, ha perdido la gracia principal, a saber, quién es Mr. Hyde y qué relación tiene con el Dr. Jekyll.
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