Adán y Eva. Eva y Adán

Sergio Ruiz del Moral nos acerca a un futuro donde la Humanidad está cerca de su extinción, pero antes deciden colonizar un planeta casi gemelo a la Tierra.
En un primer momento se piensa en llevar a parejas humanas, las cuales apoyadas por la tecnología consigan la hazaña de reproducirse en el espacio y después de 150 años, colonizar un nuevo planeta. Pero en esta ocasión el autor pone voz a los psicólogos que desaconsejan esta opción debido a la dureza mental que conlleva esta empresa, que unida a la tendencia a la violencia inherente al Ser Humano, hace inviable esta opción.
Ello hace que el autor desarrolle una teoría sobre cómo iniciar una nueva Humanidad desde 0, con la ayuda y la guía de la tecnología y la robótica para encaminar a los nuevos humanos por caminos donde primen el Amor, la Justicia, la Paz y la Protección a la Naturaleza. Estos mensajes son también una crítica al sistema de vida de la Sociedad actual, en la cual prevalece la ley del más fuerte encubierta bajo el paraguas de justicia igualitaria, el cual no se cumple a ojos de cualquier ciudadano medio ya que siempre se posicionan a favor del poderoso.
Además, abre un debate ético sobre si es posible gestar humanos, o cualquier otro animal, y criarlos, sin necesidad de la presencia de sus padres biológicos, ni ningún otro humano, únicamente con robots androides. Es decir, desde la fecundación hasta el parto, todo de manera artificial y controlado el desarrollo del feto en todo momento por máquinas.
Otro concepto que está presente en la novela es la creación de una religión, aunque los desarrolladores del proyecto no lo quisieran. En este caso, la nueva religión tendría muchas similitudes a lo establecido en la Biblia ya que los humanos que fueran naciendo serían guiados en primera instancia por un ente robótico, que adoptando la forma humana a través de un androide, que vigila desde el espacio todo lo que sucede en el nuevo planeta, asimilado a lo que en cualquier religión hacen los dioses. Pues en la novela, los niños engendrados en el nuevo planeta son educados de tal forma por un superordenador. Este ordenador, como antes mencioné, lo podemos equiparar al Dios cristiano y a la figura de Jesucristo. Su guía y su mensaje es muy parecido a lo que, según los Evangelios y el Nuevo Testamento, promulgó Jesús en sus alocuciones.
Es por ello que esta novela de ciencia ficción me parece que reúne todos los elementos para que reflexionemos acerca de nuestro futuro como especie, al igual que sobre el futuro del planeta y las posibilidades que ofrecen tanto la tecnología como la robótica para conseguir que mejoremos nuestro comportamiento como grupo. En mi opinión es recomendable al 100%.

El libro nos cuenta la situación del planeta Tierra en el año 2300 y cómo se vive el descubrimiento de un planeta con las mismas características de vida que este. Toda la historia se desarrolla en el futuro y en tercera persona.

Los personajes que nos encontramos en los diferentes momentos son muy relevantes para entender la historia y muchos de ellos/as nos enseñan lecciones valiosas para la vida, como es el anteponer el bien común al propio, la solidaridad, el esfuerzo, trabajo en equipo, perseverancia, etc., nos dejan ver un poco de ese lado bueno que también tiene la humanidad.

Por otro lado, me metí de lleno en el libro porque lo que relata el autor, aunque es un posible futuro, parece completamente real. La verdad que está muy bien explicado y sin entrar en detalles engorrosos, lo que hace que la lectura sea ágil. Asimismo, me gustó el final porque cierra las tramas importantes y sigue en la misma línea de principio a fin.

En definitiva, disfruté mucho del libro y me dejó pensando en nuestro futuro ¿qué llegaremos a hacer nosotros/as? ¿actuaremos antes de dejar un 2300 roto a las futuras generaciones?

Me ha sorprendido bastante este libro. Es un libro finito que no llega a las 150 paginas, pero que contiene una idea aterradora y bastante realista sobre el futuro de la Humanidad.
Una idea descabellada, de cómo será nuestro final, de cómo la Humanidad puede trabajar unida para conseguir nuestra supervivencia. O quizás no es tan descabellada la idea.
Se ha descubierto un planeta a 150 años luz de la Tierra que es perfecto para habitarlo. Pero aquí comienzan los problemas, ¿Cómo viajamos hasta allí? ¿Quién va a viajar? ¿Quién se queda? Aún no se puede viajar tan rápido.
En un futuro en el que las máquinas están tan desarrolladas, muchas de nuestras ideas y sueños se han hecho realidad y se puede ser madre sin haber tenido al bebe en tu vientre, o permitir que nuestro futuro esté en las manos de una conciencia inteligente.
Este libro es un relato que te hace pensar, que te hace plantearte qué más puedes hacer por alargar la vida del planeta, para no tener que buscar una solución tan desesperada como los personajes de este libro.

Después de lo leído, entiendo el por qué de la portada y también del título, todo ello muy acorde con el contenido. Esa visión de la Tierra y de otro planeta que se le parece me llamó mucho desde el inicio.

El planteamiento del libro me ha gustado, nos sitúan en un momento del futuro, en el año 2300, en el planeta Tierra. Nos cuenta que hace unos años se mandó un grupo de satélites que tenía como misión buscar sistemas solares y planetarios parecidos al nuestro y, encontraron uno. A partir de ese momento, empieza a desarrollarse un proyecto para poder colonizar ese otro planeta, que está a cincuenta años luz. 

Esta novela de ciencia-ficción se lee fácilmente, a pesar de hablar de ciertos tecnicismos, el lenguaje usado es compatible y apto para todos los públicos. 

Podría dividirse el contenido de esta historia en dos, por un lado, tendríamos una primera parte donde nos habla de los problemas que sufre nuestro planeta y como se va gestando el proyecto, llevándolo al final a cabo. La segunda parte cuando ya hemos llegado al otro planeta y lo que ahí ocurre. 

Respecto a la primera, me ha hecho pensar un poco sobre lo que podría ocurrirnos aquí dentro de un tiempo más o menos largo. Pero tengo tan claro que nos estamos cargando el planeta con nuestro egoísmo, ansias de tener siempre más y ganas de destruirlo todo, que todo lo que cuenta el autor me resulta factible.
Respecto a la segunda parte, ya es otra historia. Ahí sí que me ha dado qué pensar, el hecho de como se gestaría la vida en un nuevo planeta, si sería ccomo lo cuenta el autor en el libro. Tiene sus cosas buenas y sus cosas malas, a veces me ha parecido incluso un poco utópico y en otras... me hace pensar si todo es la manera en que el autor nos quiere explicar no solo el origen de un nuevo planeta y la vida en él, sino también la del nuestro en su día. 

Lectura totalmente recomendada, breve, fácil de leer pero con implicaciones que van más allá de su lectura.

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La verdad es que fue una alegría encontrarme el email en el que me comentaban que había sido elegida para participar en Masa Crítica de Babelio. Primera participación y al par de semanas ya tenía mi ejemplar de "Adán y Eva. Eva y Adán" de Sergio Ruiz del Moral en el buzón.

Realmente me había llamado el argumento y el libro, una novela cortita de apenas 130 páginas, empieza muy bien situándonos en el año 2300 cuando la Tierra está bajo mínimos en lo que a recursos se refiere y una serie de científicos tienen un plan para que la humanidad pueble otro planeta similar.

Una gran imposibilidad hará que ese proyecto quede aparcado pero surgirá otro similar y con él la esperanza de que si funciona, en un lugar a muchos años luz de la moribunda Tierra los humanos puedan seguir existiendo desde la creación de dos bebés, una niña y un niño.

Está bastante bien explicado lo referente a la tecnología pero a veces esas explicaciones se hacen muy repetitivas pero en líneas generales me ha gustado lo que el autor cuenta, que incluye algo de crítica sobre lo que estamos dejando en herencia a las generaciones futuras.

Gracias a Babelio por su Masa Crítica y a la editorial Círculo Rojo por la oportunidad.
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