Entrevista con el vampiro

Son tu conciencia y tu voluntad las que deben mantenerte vivo.

Estábamos a salvo de él, pero... ¿estábamos a salvo de nosotros mismos?

Lo que esta noche ha muerto en esta habitación es el último vestigio en mí de lo que era humano

Tú me mostraste lo único en que yo podía esperar llegar a convertirme, la profundidad del mal, el límite de frialdad que tendría que alcanzar para terminar con mi dolor. Y lo acepté. Entonces, esa pasión, ese amor que tú viste en mí, se extinguió. Ahora tú simplemente ves un espejo de ti mismo.

Y entonces fui atacado. Pudo haber sido cualquiera. Y yo presentaba una invitación abierta a marineros, ladrones, maniáticos, a cualquiera. Pero se trató de un vampiro

(...) y allí, sobre tu escritorio, apoyada en el conocimiento de los siglos, está una niña pura tan demoníaca como nosotros;

(...) me retorcí y di un paso atrás alejándome de ella, ante el rostro del odio y la furia que anidaba en ella como una bestia dormida, mirando a través de sus ojos.

Para los vampiros, el amor físico culmina y es saciado con una sola cosa: la muerte.

Estelle explicó que el negro era el color de la ropa de los vampiros;

Mata conmigo esta noche -me dijo, con tanta sensualidad como una amante-.