Realmente, ¿qué pueden decir los condenados a los condenados?
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Realmente, ¿qué pueden decir los condenados a los condenados?
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Y pensé en lo que se extendía delante de mí a lo largo y ancho del mundo y del tiempo, y decidí vivirlo con delicadeza y reverencia, aprender de cada cosa lo mejor.
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Sus labios eran rojos, su aspecto era libre, sus rizos eran tan amarillos como el oro, su piel era tan blanca como la lepra. Ella era la pesadilla, la-muerte-en-vida que espesa la sangre del hombre con el frío. |
(...) vi sus ojos como dos llamaradas oscuras en su rostro blanco. Una muñeca de la que alguien había arrancado cruelmente los ojos y los había reemplazado con un fuego demoníaco.
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(...) porque, aunque era pequeña, ya era una fiera asesina capaz de una búsqueda incesante de sangre con la imperiosidad de un niño.
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(...) su pelo se desenredó y parecía de seda. Era la niña más hermosa que yo jamás había visto y ahora deslumbraba con el fuego frío de un vampiro.
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¿Qué significa morir cuando puedes vivir hasta el fin del mundo?
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El conflicto estalla entre la moral del artista y la moral de la sociedad, no entre la estética y la moral. Pero a menudo esto no es comprendido; y entonces aparece la pérdida, la tragedia.
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La gente que deja de creer en Dios o en la bondad, sigue creyendo en el demonio. No sé por qué. El mal siempre es posible. Y la bondad es eternamente difícil. Pero debes de comprender, la posesión en realidad es otra manera de decir que alguien está loco.
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Mi naturaleza de vampiro ha sido la mayor aventura de mi vida.
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¿Quién es el protagonista de la historia?