Especie

“Especie” es la segunda entrega de la saga (porque será saga en un futuro) de “Progenie” de Susana Martín Gijón. Si la primera parte tiene acción, tensión y crímenes, esta segunda no se queda atrás.
Susana Martín Gijón nos trae un thriller que no va a dejar al lector indiferente. Además de entretener, que ese es el principal objetivo de una novela de ficción, va a remover conciencias y sentimientos. Porque el argumento de “Especie”, como su título y su portada sugiere, está encauzado hacia los animales, más bien hacia el maltrato animal, tanto en la vida doméstica como en la industria cárnica.
El tema es muy delicado y yo en más de una ocasión he tenido que dejar de leer unos instantes, no por las escenas de sangre, que las hay, sino por la angustia que he llegado a sentir.
En relación con los personajes, seguimos con los mismos principales que en la primera parte, más los propios que exige la trama. Veremos la continuación de sus vidas, sobre todo de Camino Vargas, quien llevaba una vida un tanto caótica en la primera parte. del resto del equipo vamos viendo también sus avances tanto personales como profesionales.
La ambientación está muy bien conseguida. La autora coloca al lector de lleno en la historia. Como lectores sabremos del caso igual que los investigadores, aunque la autora nos va dando pinceladas que pueden guiarnos por el camino correcto… o no. “Especie” es un libro coherente, Susana Martín Gijón no se va por las ramas inventándose finales increíbles sacados de chisteras. Es un “lo ví venir” pero sin tener la convicción, ya que durante la historia vamos a tener candidatos a asesino más que capítulos, casi.
En resumen, “Especie” es un libro adictivo, con una buena trama y buenos personajes. Una segunda parte muy a la altura, incluso supera a la primera. Y deseando seguir leyendo próximas entregas.

Hola a todos!

Vuelve la Inspectora Camino Vargas y su equipo de Homicidios,es la continuación del anterior libro "Progenie",aunque esta vez trata un caso distinto,seguimos con los mismos personajes y una incorporación nueva al equipo.
Son casos independientes y se pueden leer por separado pero recomiendo mucho leer el anterior para no perder detalle de los personajes.

Seguimos en Sevilla y en plena ola de calor,han aparecido 3 cuerpos y todo apunta a un asesino completamente despiadado,no hay forma de leer este libro sin que te golpee la crudeza de los detalles y más cuando entras de lleno en el maltrato animal,ha sido difícil de digerir,te hace pensar y darte cuanto de lo cruel que es el ser humano.

El listón que ya dejó alto en el anterior libro esta vez lo supera,no solo por lo explícito,sino en general,me gusta la pluma de la autora y ese saber envolver en una trama tan difícil y a la vez tan realista,la Inspectora me sigue encantando,y quiero ver mas casos de ella con su equipo.

Me ha gustado mucho aunque recomiendo que si sois de estomago sensible quizas esta novela os haga pasar un mal rato.

Esta novela consta de 464 páginas divididas en 4 partes más epílogo, narrados en tercera persona.

El calor es sofocante en Sevilla y la brigada de homicidios donde Camino Vargas sigue siendo la inspectora, ya que el inspector Arenas sigue de baja, no tienen ningún caso. Todo está tranquilo, cuando de golpe aparecen a la vez y en diferentes puntos, tres cuerpos sin vida, uno desollado, el otro molido a palos y el último inflado de comida hasta reventar.

Evita Gallego es una joven que entra nueva en el equipo y que a primeras no cae muy bien, pero parece ser la única que sabrá leer el mensaje del nuevo asesino en serie que anda atemorizando a la ciudad de Sevilla. El equipo de Homicidios tendrá que trabajar a contrarreloj para salvar dos vidas que están en peligro una vez han sido secuestradas.

Desde que leí la primera parte de esta serie me quedé maravillada, así que cuando descubrí que iban a ser una serie de libros de los casos de la inspectora Camino Vargas me puse a buscar si habían más libros publicados y me topé con Especie. Son libros completamente auto conclusivos, no es necesario haber leído el anterior pero yo que tengo un TOC terrible para estas cosas siempre tengo que leer en orden por muy auto conclusivos que sean. Vargas se enfrenta a un nuevo caso, mucho peor que el de progenie, aquí se está secuestrando a personas para torturarlas y posteriormente asesinarlas, siguiendo un rito que obviamente no voy a deciros. Contará con la ayuda de su equipo y de la nueva incorporación Evita Gallego, una joven que no es muy bien recibida pero que parece entender mejor que nadie el modus operandi y los motivos del nuevo asesino en serie que acecha Sevilla. Una de las cosas que me gusta mucho de esta serie es que por una parte los personajes son muy reales, con problemas cotidianos y por otra que los temas que se tratan son de actualidad, en el anterior se enfocaba el mundo de la fecundación in vitro y el ser madre soltera, en este nos adentramos en un mundo que me ha tocado mucho, el del maltrato animal por parte de las comercializadoras, cada vez como menos carne pero después de este libro me lo planteo más el hacerme vegetariana. Una lectura fluida que vas pasando páginas sin apenas darte cuenta con un tema duro y un final abierto para una continuación. Solo me queda decirla a la autora ¿Para cuando el tercero?

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OPINIÓN PERSONAL

“Especie” es la continuación de “Progenie”, que os ayudará a adentraros en la vida de la Inspectora Vargas y su equipo aunque no será necesario leerlo previamente porque son dos casos independientes.

La inspectora Vargas se enfrenta ante uno de los casos más difíciles de su carrera. La aparición de tres muertos en 24 horas, y todos relacionados con el maltrato animal de alguna manera, harán que el equipo policial trabaje sin descanso para encontrar pistas que le ayuden a resolver este caso tan difícil.

Todo comienza con la aparición de tres cuerpos: uno desollado, otro sobrealimentado hasta morir y otro molido a palos. Cada uno de ellos abandonado en distintos puntos de Sevilla.

A esta investigación se unirá Evita Gallego, una nueva agente del equipo que será clave para la resolución de este caso, ya que sólo ella sabrá ver en los cadáveres el macabro mensaje del asesino.

Me ha parecido un tema muy novedoso y sorprendente a la vez, ya que con sus detalles descriptivos, en algunas partes del libro, me da la impresión que la autora ha querido denunciar de alguna manera el trato vejatorio al que se enfrentan algunos animales en nuestra sociedad.

Empieza con un ritmo rápido que decae en algunos momentos, pero tiene giros muy interesantes que harán que te enganches y no puedas dejar de leer. Por ello, os recomiendo que si no lo habéis leído aún os animéis a hacerlo porque no creo que os decepcione, aunque habrá partes en las que, si sois demasiado sensibles, sufriréis un poco.

CONCLUSIONES

Libro recomendado para todo aquellos que quieran pasar un buen rato. Y desaconsejado, en cambio, para todos los que sean sensibles con el tema del sufrimiento de los animales.

PUNTUACIÓN: 8/10

Segunda novela con la inspectora Camino Vargas y su equipo de homicidios como protagonistas.
⚠️Se puede leer de forma completamente independiente respecto a la primera ('Progenie')

Si en Progenie el tema alrededor del que todo giraba era la maternidad y la reproducción asistida, en 'Especie' será el especismo (o el antiespecismo, según lo miremos). Estamos de nuevo en Sevilla, la historia comienza con la aparición de tres cuerpos a los que han asesinado de maneras bastante violentas y sádicas. al mismo tiempo un grupo animalista libera una granja de gallinas y empieza una trama trepidante y adictiva que se va a desarrollar en apenas 7 días del mes de octubre. He dicho que la localización es Sevilla, pero a lo mejor en esto también encontraréis alguna sorpresa que me guardo 😝

Estamos ante una novela negra muy bien hilada. El manejo de los tiempos, la intriga y el ritmo están súper trabajados para mantenerte pegada a sus páginas durante toda la lectura. La tensión irá creciendo a medida que avanzamos y cuesta dejar de leer, palabrita.

Algo que me gusta mucho de Susana Martín Gijón es que aprovecha sus novelas para hacer crítica social. Todas tienen perspectiva de género con grandes guiños feministas, empezando por la fuerza de los personajes femeninos. Va desarrollando la trama principal y, sin forzar situaciones ni diálogos, introduze esos elementos de crítica. En Especie van a ser principalmente el especismo más atroz y el antiespecismo más radical, pero también nos hará reflexionar sobre el machismo, la violencia de género, la soledad de los ancianos, las malas condiciones por falta de recursos con las que trabajan muchas veces los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, el tabú y falta de prevención de los suicidios en España, etc.

El desarrollo de los personajes también es algo que Susana hace muy bien. Ellos tienen su misión y presencia en la trama principal, pero la autora introduce subtramas en las que cada uno es protagonista. Los conocemos más íntimamente, sus vidas personales, sus historias, lo que sin duda enriquece la novela y da coherencia al conjunto.
Especie reúne todo lo que me gusta de la novela negra: giros inesperados, capítulos cortos, final trepidante y, sobre todo, no es previsible. Llevo bastante mal los tópicos y clichés, me molesta especialmente ser capaz de ver el desenlace a priori cuando no es la intención de la autora, pero nada de esto me ha pasado nunca con las novelas de Martín Gijón y espero con ansias la continuación de la saga de Camino Vargas.

Si te gusta la novela negra esta es una fantástica opción que además, quién sabe, quizá te haga plantearte otras cuestiones.

Hace algo más de un año os hablaba por aquí de la anterior novela de esta autora. Hoy os traigo su última obra, que sin duda no deja indiferente. No os adelanto nada para que lo descubráis por vosotros mismos. Reconozco que esperaba mucha más crudeza de la que tiene y os adelanto que tiene bastante. Nos sumergimos en un nuevo caso de la inspectora Camino Vargas y su gente. Sevilla, altas temperaturas y la incertidumbre de saber que puede haber un nuevo crimen en la ciudad. No he parado de leer hasta devorarlo y se me ha hecho corto.

“Ante ellos hay un hombre muerto abandonado en el suelo. O, por decirlo con más exactitud, los restos del cuerpo de un hombre muerto. Porque la cabeza no está. Y tampoco los pies ni las manos.” ~ Especie de Susana Martín Gijón.

Los investigadores del equipo de la inspectora Camino están hastiados investigando desapariciones hasta que los cadáveres comienzan a aparecer. Todos asesinados de forma diferente y parece que no hay un patrón común entre los crímenes hasta que la nueva incorporación al equipo, Eva Gallego, parece dar con la clave. El que la “nueva” lo tenga tan claro levanta sospechas entre los investigadores que en seguida ven que no es oro todo lo que reluce.

Dos dias me ha durado esta entrega de la inspectora Camino. Me han gustado los casos a resolver aunque he de decir que algún capítulo me resultó desagradable por realista que es. Lo que sí no he entendido bien qué pintaban unos capítulos extraños en el medio que no quiero describir para no desvelar nada.

En líneas generales me ha tenido pegada a las páginas desde el comienzo al final. La línea la misma que la anterior: capítulos cortos y con una frase de entradilla que sirve de puesta en escena. Un recurso que me gusta.

Sevilla, tres cadáveres que aparentemente nada tienen que ver entre sí aparecen en la ciudad. Solo la inspectora Camino Vargas y su equipo podrán establecer la causa de estos asesinatos.

Susana Martín Gijón lo ha vuelto a hacer, nos ha ofrecido una novela que atrapa con unos personajes que también enganchan. Me declaro fan incondicional de la inspectora Vargas y de su equipo, especialmente Pascual Molina y Lupe Quintana.

Como ya hizo en Progenie, la historia vuelve a girar en torno a un tema controvertido. La investigación avanza y al mismo tiempo lo hacen las vidas de sus protagonistas. Volvemos a toparnos con unas páginas ágiles y adictivas.

Me encanta la sencillez con la que la autora narra lo que acontece y cómo plasma la cotidianidad del lugar y su gente. Además creo que Camino Vargas es un personaje potente que tiene mucho recorrido por delante. Espero con ganas una tercera aventura de esta inspectora y su grupo.

Me ha gustado muchísimo, me encanta la personalidad de la inspectora y como nos llega la información poco a poco a lo largo de la historia. Es un libro con mucha intriga de lectura muy rápida que además me ha enseñado muchas cosas sobre animales que no sabía y que quizå hubiera preferido no saber.

Vuelve la inspectora Camino Vargas, la misma que nos atrapó en una lectura endiablada y sobresaliente con Progenie, aquel caso que tenía lugar en Sevilla en plena ola de calor, y lo hace como no puede ser de otra manera para subir el listón con una nueva entrega en la que no faltará ningún ingrediente para devorar casi quinientas páginas llenas de intriga, de denuncia social y con esa pizca de humor con la que Susana siempre borda sus novelas.

Especie llega con una trama bien elaborada que aborda, desde el género negro, un tema de actualidad como es el maltrato animal, con un enfoque de denuncia social que hará que sin querer nos cuestionemos muchas cosas mientras vamos descubriendo como durante una semana un asesino pondrá patas arriba una Sevilla que sigue sufriendo los rigores del calor y que pondrá a prueba una vez más al equipo que acompaña a la inspectora Camino Vargas que sigue al frente, a su pesar, del departamento de homicidios.

No escatima Susana en detalles, por escabrosos o incómodos que sean, para describir el horror que se genera en algunas situaciones, haciendo que por momentos seamos algo más que lectores alejados de los hechos. Y Camino Vargas se ha propuesto que nadie siga dejando cadáveres mutilados en lugares del centro histórico de Sevilla. Para ello tendrá que lidiar nuevamente con sus superiores, con algunos miembros de su variopinto equipo y hasta con una recién llegada a su departamento que en principio no cae bien, algo que generará situaciones bastante incómodas.

En este caso estarán más presentes las relaciones personales, tanto de la propia inspectora con Paco Arenas como de los miembros de su equipo. Ello conlleva un acercamiento más profundo al carácter de los personajes y que entendamos mejor la tensión o los conflictos que pueden generarse en el transcurso de la investigación. Camino sigue siendo esa mujer impulsiva y decidida, a la que nadie dice como hacer las cosas, que piensa en voz alta lo que le viene a la cabeza, con los problemas que a veces ello le acarrea, pero que no dudará en poner todo cuanto esté en su mano para resolver los casos.

Como es habitual los capítulos son cortos, dando así un ritmo rápido a la trama, que se va tornando cada vez más negra. La voz en esta historia será la de un narrador omnisciente que alternará según el personaje, incluido un capítulo con uno “muy especial”. Los giros de la trama harán que no dejemos de asombrarnos con la capacidad de Susana para llevarnos hacia donde ella quiere y que no nos adelantemos hasta llegar a un final casi de infarto.

Progenie llega para corroborar que estamos ante una escritora que se mueve en el género negro con una soltura aplastante, que lo regenera con cada caso y que hace que los lectores disfrutemos con una prosa que reúne calidad, agilidad y entretenimiento, salpicada con algo de humor y dosis de denuncia social siempre de actualidad. Si te gustó Progenie seguro que Especie no te defraudará.
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