Especie

Esta novela consta de 464 páginas divididas en 4 partes más epílogo, narrados en tercera persona.

El calor es sofocante en Sevilla y la brigada de homicidios donde Camino Vargas sigue siendo la inspectora, ya que el inspector Arenas sigue de baja, no tienen ningún caso. Todo está tranquilo, cuando de golpe aparecen a la vez y en diferentes puntos, tres cuerpos sin vida, uno desollado, el otro molido a palos y el último inflado de comida hasta reventar.

Evita Gallego es una joven que entra nueva en el equipo y que a primeras no cae muy bien, pero parece ser la única que sabrá leer el mensaje del nuevo asesino en serie que anda atemorizando a la ciudad de Sevilla. El equipo de Homicidios tendrá que trabajar a contrarreloj para salvar dos vidas que están en peligro una vez han sido secuestradas.

Desde que leí la primera parte de esta serie me quedé maravillada, así que cuando descubrí que iban a ser una serie de libros de los casos de la inspectora Camino Vargas me puse a buscar si habían más libros publicados y me topé con Especie. Son libros completamente auto conclusivos, no es necesario haber leído el anterior pero yo que tengo un TOC terrible para estas cosas siempre tengo que leer en orden por muy auto conclusivos que sean. Vargas se enfrenta a un nuevo caso, mucho peor que el de progenie, aquí se está secuestrando a personas para torturarlas y posteriormente asesinarlas, siguiendo un rito que obviamente no voy a deciros. Contará con la ayuda de su equipo y de la nueva incorporación Evita Gallego, una joven que no es muy bien recibida pero que parece entender mejor que nadie el modus operandi y los motivos del nuevo asesino en serie que acecha Sevilla. Una de las cosas que me gusta mucho de esta serie es que por una parte los personajes son muy reales, con problemas cotidianos y por otra que los temas que se tratan son de actualidad, en el anterior se enfocaba el mundo de la fecundación in vitro y el ser madre soltera, en este nos adentramos en un mundo que me ha tocado mucho, el del maltrato animal por parte de las comercializadoras, cada vez como menos carne pero después de este libro me lo planteo más el hacerme vegetariana. Una lectura fluida que vas pasando páginas sin apenas darte cuenta con un tema duro y un final abierto para una continuación. Solo me queda decirla a la autora ¿Para cuando el tercero?

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