En los días más oscuros tienes que encontrar un punto de luz, en los días más fríos tienes que localizar un punto de calor; en los días más sombríos tienes que mantener la mirada al frente y en los días más tristes debes tener los ojos abiertos para dejarlos llorar. Para dejar que se sequen. Para darles la oportunidad de lavar el dolor para poder ver claramente de nuevo.
|