Destrózame

Adam es como un baño caliente, una respiración corta, 5 días de verano concentrados en 5 dedos que escriben historias en mi cuerpo.

Adam hace que me entre hambre de cosas que nunca pensé que podría tener.

El colapso de nuestra sociedad no debería sorprendernos. Lo hemos provocado nosotros mismos.

Intento comprender la confianza que ha depositado en quien cree que soy y me doy cuenta de que su seguridad es lo único que me impide sumergirme en el pozo de mi propia locura.

—Creo que nunca te había oído reír.
Es tan espantosamente correcto que no sé cómo responder salvo con la verdad. Mi sonrisa forma una línea recta.
—La risa proviene de la vida. —Me encojo de hombros, intento sonar indiferente—. Nunca había estado viva de verdad.

A falta de relaciones humanas, forjé vínculos con los personajes del papel. Viví el amor y la pérdida a través de los relatos tejidos en la historia, experimenté la adolescencia por asociación. Mi mundo es una red entrelazada de palabras, encadenadas de un miembto al siguiente, de hueso a tendón, pensamientos e imágenes juntos. Soy un ser compuesto de letras, un personaje creado con frases, un producto de la imaginación formado a través de la ficción.
Quieren borrar cada signo de puntuación de mi vida en esta tierra y creo que no puedo dejar que suceda.

la verdad es una amante celosa y viciosa que no duerme jamás

-Yo solo mato gente si lo necesito
-que generoso
-mas que la mayoria

-por lo menos soy honesto
-acabas de admitir que eres un mentiroso
-por lo menos soy honesto acerca de ser un mentiroso

siempre me pregunto a cerca de las gotas de lluvia.
Me pregunto acerca de como estan cayendo siempre, tropezando con sus propios pies, rompiendo sus piernas y olvidando su paracaidas mientras caen justo fuera del cielo hacia un incierto final. Es como si alguien estuviera vaciando sus bolcillos sobre la tierra y no pareciera importarle donde cae el contenido; no parece importarle que las gotas de lluvia revientan cuando caen al suelo, que la gente maldiga los días en que las gotas se atreven a dar golpecillos en sus puertas.
Soy una gota de lluvia