Un hombre, por muy inteligente que sea, no puede ver lo que no sabe ver
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Un hombre, por muy inteligente que sea, no puede ver lo que no sabe ver
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Cuanto menos tenía, más absoluta era la necesidad de ser
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Aquellos hombres no conocían otra relación que la de posesión. Estaban poseídos.
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Por espacio de horas o días vivió en un vacío, una oquedad seca y mísera sin pasado ni futuro. Las paredes se alzaban tiesas a su alrededor. En el otro lado había silencio. [...] El tiempo no transcurría. No había tiempo. Él era el tiempo: sólo él. Era el río, la flecha, la piedra. Pero no avanzaba. La piedra lanzada sería suspendida en el punto medio. No había día ni noche. A veces el doctor apagaba la luz o la encendía. Había un reloj junto a la cama; la manecilla iba y venía sin sentido de una a otra de las 20 cifras de la esfera.
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Pero en un organismo enfermo, hasta una célula sana está condenada
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(Shevek) Pasaba la jornada entera de trabajo esperando la noche para estar a solas y pensar, pero en el instante en que llegaba a la tienda-dormitorio después de la cena, empezaba a cabecear y dormir como una piedra hasta el amanecer, y nunca le cruzaba por la mente un solo pensamiento.
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Siempre había temido esto, más que la muerte. Morir es perder la identidad y unirse al resto. Él había conservado la identidad y había perdido el resto.
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Piensan que si la gente posee muchas cosas se contentará con vivir en una cárcel. Pero yo no acepto eso. Quiero derribar los muros. Quiero solidaridad, solidaridad humana.
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La cuestión de la superioridad y la inferioridad parecía tener gran importancia en la vida social de los urrasti. Si para respetarse a sí mismo, Kimoe tenía necesidad de considerar que la mitad del género humano era inferior a él, ¿cómo harían las mujeres para respetarse ellas mismas? ¿Acaso considerarían inferiores a los hombres?
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Siempre había temido esto, más que a la muerte. Morir es perder la identidad y unirse al resto. Él había conservado la identidad y había perdido el resto.
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Novela de ciencia ficción, escrita por Richard Matheson, en 1975 se titula: "En algún lugar del _________"