Una niñera inglesa ahogada, una gran casa y un laberinto…
Barcelona ,1909. Elsie Thornton, la niñera de los señores Desvalls, aparece muerta flotando en las aguas del lavadero mayor el día siguiente a la recepción que se celebró en el parque del Laberinto de Horta, en la finca familiar. Ossorio, a tratarse de una ciudadana británica, ordena a Ignasi Requesens que sea él, junto a su inseparable Cristóbal, quien se encargue de la investigación.
Vuelve el inspector Ignasi Requesens…
El inspector Requesens vuelve unos meses después de resolver el caso del crimen del Liceo. La investigación tan minuciosa y detallada de la muerte de la Condesa de Cardona ha hecho que toda Barcelona reconozca las dotes detectivescas de Ignasi, y es por ello por lo que el gobernador Ossorio lo reclama para que averigüe que le ha pasado a la señorita Thornton.
Comienza la investigación…pistas…y hallazgos inesperados…
Lo que en un principio parece un suicidio, se va enredando para que salga a la luz las luces y las sombras de todo lo que rodea al Laberinto. Secretos que, aunque ocultos se desvelan con la autopsia y harán dar un giro de ciento ochenta grados a las pesquisas de Ignasi y Cristóbal.
Muertes similares que pasaron años atrás. Miguel un joven poeta andaluz murió en las mismas circunstancias que la señorita Thornton.
Un escenario bello, para unas muertes trágicas. ¿Tendrán relación unas con las otras? ¿Qué secretos ocultaba Elsie Thornton?
Mi opinión:
Un nuevo caso para el inspector Requesens. Cuando el año pasado leí El crimen del liceo lo catalogué como un libro con tintes de las novelas de
Agatha Christie, y ahora con
Muerte en el laberinto me reafirmo en ello. Una puesta en escena idílica, una muerte aparentemente que apunta a un suicidio y un gran elenco de sospechosos que harán que las dotes de gran detective de Ignasi salgan a flote para dar con el asesino del Laberinto.
En una Barcelona convulsa por los días previos a la Semana Trágica en rebelión al gobierno de Maura, Ignasi tendrá que resolver un caso que en principio para ser un sencillo suicidio.
La autopsia revela que la señorita Thornton le suministraron láudano horas previas a su muerte y que estaba embarazada, la cosa cambia totalmente y pone en marcha la suspicacia de Ignasi.
La casa del laberinto propiedad de los señores Desvalls, con su hijo Sergio a la cabeza será el escenario de las interrogaciones del detective para averiguar qué sucedió la noche anterior a la muerte de la institutriz.
Con casi cuatrocientas paginas y dividido en siete capítulos correspondientes a los días de investigación, en Muerte en laberinto asistimos como espectadores a conocer a cada uno de los miembros de la familia, tanto del servicio como de la parte acomodada y a plantearnos que muchos de ellos tenían motivos de ver muerta a la señorita Elsie.
Con una pluma ágil y una narración que te lleva a querer saber que ha sucedido,
Fernando García Ballesteros vuelve a sorprendernos con un nuevo caso del inspector dándole una resolución sorprendente e inesperada a unos asesinatos que están relacionados en el tiempo.
En conclusión, un libro que recomiendo a todos los amantes de una buena novela policiaca con sus similitudes a los casos de Hércules Poirot, pero con la originalidad de estar ubicado en Barcelona y con una detective inteligente y empático con aquellos que lo rodean.
Acércate al lavadero mayor, y mientras miras sus apacibles aguas deja que Elsie Thornton te cuente quien y porque la ha matado. Y recuerda la persistencia es el mejor aliado para un detective.