El llanto más antiguo de la historia del hombre es el llanto de amor.
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El llanto más antiguo de la historia del hombre es el llanto de amor.
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...y que en cualquier lugar en que estuvieran recordaran siempre que el pasado era mentira, que la memoria no tenía caminos de regreso, que toda primavera antigua era irrecuperable, y que el amor más desatinado y tenaz era de todos modos una verdad efímera.
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Úrsula tuvo que hacer un grande esfuerzo para cumplir su promesa de morirse cuando escampara.
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Cuando Úrsula se dio cuenta de que José Arcadio Segundo era gallero y Aureliano Segundo tocaba el acordeón en las fiestas ruidosas de su concubina, creyó enloquecer de confusión. Era como si en ambos se hubieran concentrado los defectos de la familia y ninguna de sus virtudes.
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En el centro del círculo de tiza que sus edecanes trazaban dondequiera que el llegara, y en el cual solo él podía entrar, decidía con órdenes breves e inapelables el destino del mundo.
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Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo.
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Apártense vacas que la vida es corta
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Uno no es de ninguna parte mientras no tenga un muerto bajo la tierra.
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Úrsula comprendió entonces que no lo tendría en casa por mucho tiempo. "Si no es la guerra --pensó-- solo puede ser la muerte". Fue una suposición tan nítida, tan convincente, que la identificó como un presagio.
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Úrsula preguntó por dónde se habían ido los gitanos. Siguió preguntando en el camino que le indicaron, y creyendo que todavía tenía tiempo de alcanzarlos, siguió alejándose de la aldea, hasta que tuvo conciencia de estar tan lejos que ya no quiso regresar.
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¿Con qué frase empieza esta novela?