InicioMis librosAñadir libros
Descubrir
LibrosAutoresLectoresCríticasCitasListasTest

Mauro Fernández Alonso de Armiño (Traductor)
ISBN : 8420636959
144 páginas
Editorial: Alianza (30/11/-1)

Calificación promedio : 4/5 (sobre 1 calificaciones)
Resumen:
Aún no tenemos la descripción del editor en nuestra base de datos (contraportada)
Añadir la descripción del editor

También puedes contribuir a la descripción colectiva redactada por los miembros de Babelio.
Contribuir a la descripción colectiva
Comprar este libro en papel, epub, pdf en

Amazon ESAgapeaCasa del libro
Críticas, Reseñas y Opiniones (1) Añadir una crítica
Guille63
 06 March 2023
“Yo no amo la vida, sino la JUSTICIA, que está por encima de la vida.”

Las creencias basadas en dogmas suelen estar blindadas frente al razonamiento, digamos que funcionan como mundos lógicos cerrados imposibles de traspasar. La duda no se admite y se persigue implacablemente pues actúa como una bomba interior capaz de hacer explotar ese mundo en mil pedazos.

Camus plantea en su obra el dilema de la violencia como medio legítimo y útil para alcanzar unos fines.

El fin está claro: un mundo mejor, más justo. Un fin cuya posibilidad Camus no cuestiona.

“Llegará un día en que… Todos seremos hermanos y la justicia hará transparentes nuestros corazones.”

Su posibilidad exige la destrucción del mundo antiguo…

“… matamos para construir un mundo en el que nadie mate nunca más. Aceptamos ser criminales para que la tierra se cubra por fin de inocentes.”

… La violencia es un camino, quizás el único para conseguirlo.

“Sólo la bomba es revolucionaria.”

Admitidos estos dogmas, los enemigos dejan de ser personas para ser encarnaciones de un poder a destruir.

“No es a él a quien voy a matar. Mato al despotismo… le mataré. ¡Con alegría!”

Al mismo tiempo, el propio individuo se funde con la causa, la vida solo es concebible a su servicio, la muerte aparece como forma de dignificar la vida.

“¿Comprendes por qué he pedido arrojar la bomba? Morir por la causa es la única manera de estar a su altura. Es la justificación.”

Este sacrificio por un mundo mejor librará al individuo de una existencia absurda, sin propósito, un camino entendido como un destino prácticamente ineludible.

“La libertad es también un presidio, mientras exista un solo esclavo en la tierra,”


“Comprendí que no bastaba denunciar la injusticia. Era menester dar la vida para combatirla. Ahora soy feliz.”

Stepan representa el ideal terrorista, una mente monolítica, libre de dudas, donde solo cuenta el fin.

“STEPAN: No hay límites. La verdad es que vosotros no creéis en la revolución. Vosotros no creéis. Si creyerais totalmente, completamente, en ella, sí estuvierais seguros de que con nuestros sacrificios y nuestras victorias llegaremos a construir una Rusia liberada del despotismo, una tierra de libertad que acabará por cubrir el mundo entero, si no dudarais de que entonces el hombre, liberado de sus amos y de sus prejuicios alzará al cielo la cara de los verdaderos dioses, ¿qué pesaría la muerte de dos niños? Admitiríais que os asisten todos los derechos, todos, ¿me oís? Y si esta muerte os detiene es porque no tenéis seguridad de estar en vuestro derecho. No creéis en la revolución.”

Aunque, en última instancia, quizás sea un ideal contradictorio con la consecución de su objetivo, …

“STEPAN: El día en que nos decidamos a olvidar a los niños, seremos los amos del mundo y la revolución triunfará.
DORA: Ese día la humanidad entera odiará a la revolución.

… y no solo con la consecución del objetivo, con el objetivo mismo pues sería derribar una tiranía para imponer otra.

“STEPAN: Qué importa, si la amamos (la revolución) lo bastante para imponerla a la humanidad entera y para salvarla de sí misma y de su esclavitud.
DORA: ¿Y si la humanidad entera rechaza la revolución? ¿Y si el pueblo entero, por el que luchas, se niega a que maten a sus hijos? ¿Habrá que castigarlo también?
STEPAN: Si es necesario, sí, hasta que comprenda. Yo también amo al pueblo.”

Una vez la duda entra su avance es imparable y se llega a cuestionar todo, no solo los límites del terrorismo, sino el terrorismo en sí.

“Yanek está en la cárcel y la cuerda es fría. Quizá ha muerto ya para que los otros vivan. ¡Ay, Boria!, ¿y si los otros no vivieran? ¿Y si muriera por nada?”
+ Leer más
Comentar  Me gusta         00
Videos de Albert Camus (20) Ver másAñadir vídeo
Vidéo de Albert Camus
Cuando la medicina se empeña en alargar la vida de un individuo más allá de su consciencias o de su bienestar, ¿es lícito pedir la muerte? ¿Es moral? ¿Se puede hablar de homicidio o de suicido? "No hay más que un problema filosófico verdaderamente serio, y ese es el suicidio", escribió Albert Camus. A falta de solución, la ley legisla según las sociedades y la ética en boga.
Jorge Linares fue fundador y director del Programa Universitario de Bioética (2012-2017) y director de la FFyL de la UNAM (2017-2021)
Libros más populares de la semana Ver más
Comprar este libro en papel, epub, pdf en

Amazon ESAgapeaCasa del libro


Lectores (1) Ver más




Test Ver más

La Metamorfosis

Gregorio Samsa es un ...

escritor
viajante de comercio
banquero
burócrata

13 preguntas
828 lectores participarón
Thème : La metamorfosis de Franz KafkaCrear un test sobre este libro