Tras un suceso luctuoso, como es el fallecimiento de su padre, la protagonista del libro, que es la propia Ernaux, comienza a narrarnos la vida de éste de forma cronológica, a modo de semblanza: un hombre de bajo estrato social y escasa cultura, pero honrado y trabajador. El libro es todo un homenaje a la figura de su padre, con una historia simple, pero con la que se podrán sentir identificados muchos lectores. Por momentos resulta cómica, por momentos tierna, en ciertas partes esboza una denuncia social, en otras reflexiona sobre la ruptura generacional entre padres e hijos... Un libro altamente recomendable que logró conmoverme. |