(...) quería ponerte a prueba para ver si te fiabas (y no te has fiado) de que sé de qué hablo, en qué pienso y qué siento cuando pienso en ti.
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(...) quería ponerte a prueba para ver si te fiabas (y no te has fiado) de que sé de qué hablo, en qué pienso y qué siento cuando pienso en ti.
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Por cierto: YO no dejé escapar tu tren, amigo mío. Lo que escribí una vez fue: «Perdimos nuestro tren». No es lo mismo. Tú lo presentas como si yo hubiese rechazado tu tren y te hubiera destinado a la condenación eterna. (...). Y los dos renunciamos a nuestro tren, Leo, fue un profesional trabajo en equipo tras largos meses de duro entrenamiento desaprovechando estaciones. Haz el favor de tenerlo presente.
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Desde que imagino tu cara mientras leo tus líneas, puedo reconocer mucho más rápido de qué humor estás cuando me escribes y qué significan realmente tus palabras cuando sin duda significan algo muy distinto de lo que parece. Imagino tus labios dejando salir las palabras. Imagino tus pupilas veladas comentando el suceso.
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Por primera vez hemos mirado lo que había tras la fachada de nuestra relación: todo estaba mohoso y desolado. Nunca lo cuidamos, ni lo limpiamos, ni lo aireamos, todo estaba en mal estado, con grandes daños. ¿Será posible repararlo?
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Él intenta salvar lo que aún se puede salvar. Yo intento averiguar si aún queda algo por salvar.
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Asunto: Dime solamente… a) …si borras mis mensajes sin leerlos. b) …si los lees y los borras. c) …si los lees y los guardas. d) …si no los recibes. |
Sólo se mira hacia delante el supuesto destino, y no a los costados, donde pasan los momentos por los que merece la pena pagar el viaje.
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¿Quieres que deje de escribirte? (...) ¿Qué significa esto? Significa que: ni tú misma sabes si quieres que te escriba, te da igual que te escriba o no, definitivamente no quieres que te escriba, ya no lees mis mensajes. |
Quizá me desprecias por cada una de las palabras que te he escrito. Quizá me odias por cada una de las letras que sigo enviándote. Pero no puedo evitarlo.
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Porque el hombre de las palabras había salido subrepticiamente de mi vida sin decir palabra.
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Gregorio Samsa es un ...