En el huerto de las Mujercitas

Leí Mujercitas (y toda la saga, aunque por ese entonces le decíamos "su continuación") cuando era una niña y lo volví a leer, varias veces, porque me parecía encantador.
Hace apenas unos años, me di cuenta que era un libro emblemático y no solo literatura juvenil. Y ahora con este homenaje de Gloria Casañas a Louisa May Alcott, comprendo su verdera magnitud.
La autora recurre a una joven lectora, que descubre Mujercitas, y poco a poco, buscando la prometida continuación del libro, a través de la librería del pequeño lugar en que se encuentra, se pone en contacto con la autora, aunque desconoce su identidad.
Y aquí comienza la historia del libro dentro del libro.
Así descubrimos que Mujercitas es casi una biografía de la familia Alcott, y que Louisa era una escritora empedernida que quería destacar por sus obras más serias, en tanto que esa literatura juvenil le servía para aplacar (económicamente hablando) las necesidades de la familia numerosa, armada por sus padres, muy bien avenida, pero donde el proveedor lógico, su padre, consumía su tiempo en quehaceres altruísticos poco rentables.
Por momentos Casañas relata tres historias:
* la joven lectora, que sufre mal de amores,
* la referencia a Mujercitas,
* La realidad de la familia Alcott.
Está narrada en tiempo real, y con esbozos de la guerra de cesesión de los EE.UU.