Próxima estación de Mónica Gutiérrez
Una vez, mi abuela me dijo que no tuviese miedo si a mi alrededor de pronto se hacía la oscuridad porque quien lleva tanta luz en su interior no necesitas focos.
|
Próxima estación de Mónica Gutiérrez
Una vez, mi abuela me dijo que no tuviese miedo si a mi alrededor de pronto se hacía la oscuridad porque quien lleva tanta luz en su interior no necesitas focos.
|
La librería del señor Livingstone de Mónica Gutiérrez
-¡Pero si no hace ni una semana que os conocéis! - Como si el amor tuviese algo que ver con el tiempo. |
La librería del señor Livingstone de Mónica Gutiérrez
-¿Qué es eso de "feelgood"? -Novelas en las que los protagonistas jamás comen acelgas. |
La librería del señor Livingstone de Mónica Gutiérrez
Había empezado a comprender que la felicidad surge de los brotes más pequeños e inesperados.
|
La librería del señor Livingstone de Mónica Gutiérrez
Somos mucha cosas, Agnes. La complejidad del ser humano es casi infinita. No puedes andar por la vida repitiéndote que no eres más que una arqueóloga porque entonces el resto de cosas que hagas o sientas no te supondrán más que rutina y tristeza.
|
La librería del señor Livingstone de Mónica Gutiérrez
Pues en este mundo hay libros que siempre se leen con el entusiasmo y la ilusión de la primera vez.
|
La librería del señor Livingstone de Mónica Gutiérrez
No se trataba de un apasionamiento vocacional sino de una cuestión de supervivencia: el señor Livingston entendía mejor a los libros que a los seres humanos.
|
Todos los veranos del mundo de Mónica Gutiérrez
—Estoy tan cansado que no puedo ni pensar. Pero dime que te quedarás todo el otoño, todo el invierno, toda mi vida.
|
Todos los veranos del mundo de Mónica Gutiérrez
—No todas las historias suceden como nosotros deseamos —le advierto—. Pero eso no significa que, pese a todo e inesperadamente, no puedan tener finales felices.
|
Todos los veranos del mundo de Mónica Gutiérrez
Un niño de alma generosa e inquieta que fue capaz de cruzar la plaza bajo el sol tremendo del mediodía y sentarse a mi lado para arrullarme con su voz —mi faro en la tormenta— la primera de un millón de veces.
|
Todos los veranos del mundo de Mónica Gutiérrez
—Ahora sé que te he querido sin paréntesis, sin períodos de tiempo. Desde la primera vez que te vi sola sentada en la fuente, con tu pelo de princesa de cuento recogido en dos coletas y tu vestido amarillo de tirantes de niña buena. El primer verano en el que comprendí que ibas a ser protagonista de todas mis aventuras. —Me regalaste un mundo —
|
Todos los veranos del mundo de Mónica Gutiérrez
Te he querido siempre —pronuncia con voz ronca—. Lo sabes, ¿verdad? Me he condenado a esta vida sin ti, convencido de que acabaría olvidándote. Sin ponerme en contacto contigo, huyendo del pueblo cada vez que intuía que tú estabas. Con miedo de encontrarte al girar una esquina de piedra y descubrirte feliz de la mano de otro. Porque pensaba que era demasiado tarde y porque te conocí demasiado pronto.
|
Todos los veranos del mundo de Mónica Gutiérrez
—Le sorprendería las cosas tan extrañas que se pueden aprender durante el verano. —En eso le doy la razón, mi verano está resultando extrañamente… revelador. —¿ Qué ha descubierto? —Que no importa lo lejos que corras a esconderte, la vida acaba por encontrarte. |
La librería del señor Livingstone de Mónica Gutiérrez
El mundo era gris y sólo si se aprendía a mirar se volvía uno capaz de percibir algún retazo de colores brillantes. Había esperando a comprender que la felicidad surge de los bordes más pequeños e inesperados. Y se preguntaba si era posible que todas las cosas buenas de la vida cupiesen en una librería.
|
La librería del señor Livingstone de Mónica Gutiérrez
El mundo era gris y solo si se aprendía a mirar se volvía uno capaz de percibir algún retazo de colores brillantes. Había empezado a comprender que la felicidad surge de los brotes más pequeños e inesperados. Y se preguntaba si era posible que todas las cosas buenas de la vida cupiesen en una librería.
|
La librería del señor Livingstone de Mónica Gutiérrez
El hogar es el lugar donde guardamos los libros.
|
La librería del señor Livingstone de Mónica Gutiérrez
Somos el pasado. Pero también somos el compendio de un millón de aportaciones del otro, porque nadie es impermeable; y que todos esos pequeños añadidos constituyan una galaxia de buenas y enriquecedoras intenciones depende de quién nos acompañe en el camino.
|
La librería del señor Livingstone de Mónica Gutiérrez
Es una verdad universalmente reconocida que toda historia de amor que valga la pena empieza con una invitación a tomar el té.
|
|
El noviembre de Kate de Mónica Gutiérrez
El dolor forma parte del complicado proceso de seguir viviendo.
|
¿En qué año se publicó?