Todos los veranos del mundo de Mónica Gutiérrez
—Ahora sé que te he querido sin paréntesis, sin períodos de tiempo. Desde la primera vez que te vi sola sentada en la fuente, con tu pelo de princesa de cuento recogido en dos coletas y tu vestido amarillo de tirantes de niña buena. El primer verano en el que comprendí que ibas a ser protagonista de todas mis aventuras. —Me regalaste un mundo —
|