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Deseo de Navidad de Lighling Tucker
Era un plan absurdo, tenía más fisuras que el Titanic antes de hundirse y casi podía sentir el frío iceberg que acababa de fisurar su lateral.
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Conquístame si puedes de Lighling Tucker
(…) Por mucho que trataba de comprender a su dragón interior, no descifraba porqué se comportaba así con Lisel. Era protector hasta el punto de querer matar al resto del mundo solo por ella.
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No beses al Devorador: Especial Navidad de Lighling Tucker
Él estaba en su cabeza, en su alma y en su corazón. Como si su amor hubiera estado destinado desde el primer momento en el que cruzaron sus miradas, como si nunca hubiera importado lo mucho que lucharon por alejarse el uno del otro en un principio.
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Eternos de Lighling Tucker
No llegó contestación alguna, pero los silencios muchas veces hablaban más que las palabras.
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Conquístame si puedes de Lighling Tucker
Se sentía como si fueran polos extremos de un mismo imán, condenados a atraerse de forma irremediable.
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Huyendo de Mister Lunes de Lighling Tucker
(…) yo no soy perfecto. Yo quiero ser un lunes, pero no un lunes cualquiera. Voy a ser un lunes con categoría. Lucía cabeceó un poco antes de levantar el rostro y mirarlo para sentenciar: —¡Claro! Vas a ser mi Mister Lunes. |
Huyendo de Mister Lunes de Lighling Tucker
(…) contuvo el aliento cuando descubrió que aquel desconocido caminaba hacia ella. Y, por primera vez en toda la noche, no quiso desaparecer. Deseaba ser real.
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Huyendo de Mister Lunes de Lighling Tucker
(…) Los lunes se habían hecho para odiarlos y nadie lograría hacerle cambiar de opinión.
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Conquístame si puedes de Lighling Tucker
No fue capaz de confesar que hacía años que no estaba con nadie. Que su piel ya no recordaba el tacto de otro ser que no fuera el suyo propio. Su cuerpo se había olvidado de lo bien que se sentía.
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Conquístame si puedes de Lighling Tucker
-Y créeme, puede que para ellas seas insignificante, pero para mí eres ese oasis en el desierto que nunca creí que existiera. Deja que beba un poco más antes de volver a verme rodeado de soledad.
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Huyendo de Mister Lunes de Lighling Tucker
...te deseé lo mejor, porque eso es el amor, querer que la persona que mas sea feliz
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Huyendo de Mister Lunes de Lighling Tucker
-Por supuesto. Yo seré tu príncipe verde, porque el azul no es el color que mejor me sienta, pero siempre podrás contar conmigo. Mi amistad es para siempre te guste o no.
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Huyendo de Mister Lunes de Lighling Tucker
Lucía no lo miró, únicamente contuvo el aliento cuando descubrió que aquel desconocido caminaba hacia ella. Y, por primera vez en toda la noche, no quiso desaparecer. Deseaba ser real.
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No soy tu rosa ni tu tulipán de Lighling Tucker
-Creo que alguien te ha hecho el suficiente daño como para necesitar que otra persona te haga recordar lo hermosa que eres
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No soy tu rosa ni tu tulipán de Lighling Tucker
-No puedes irte. Si te emborrachas en mi bar, duermes en mi cama y me amenazas con una sartén, mereces desayunar antes de volver al mundo.
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No hables con el Devorador de Lighling Tucker
Justo entonces soltó su rostro para dejar que su pulgar borrase las lágrimas que derramaba por su culpa, las aceptaba todas y cada una de ellas con la esperanza de intercambiarlas por sonrisas algún día.
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No hables con el Devorador de Lighling Tucker
-Si pudieras verte con mis propios ojos sabrías de lo que eres capaz.
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Gregorio Samsa es un ...