La memoria mi querida Cecilia, es el diario que todos llevamos con nosotros.
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La memoria mi querida Cecilia, es el diario que todos llevamos con nosotros.
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A excepión de contadas ocasiones la verdad es pura, pero nunca sencilla.
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Es absurdo tener una regla rigurosa e invariable sobre lo que debe y no debe leerse. Más de la mitad de la cultura moderna depende de lo que no debería leerse.
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La verdadena esencia del romanticismo es la incertidunbre.
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LADY BRACKNELL.—No hables irrespetuosamente de la sociedad, Algernon. Eso sólo lo hace la gente que no puede pertenecer a ella. [A CECILIA.] Sabrá usted, hijita, que Algernon no cuenta más que con sus deudas. Pero yo no apruebo los matrimonios interesados. Cuando me casé con lord Bracknell yo no tenía la menor fortuna, pero ni por un instante se me ocurrió permitir que eso se interpusiera en mi camino. Bueno, supongo que tendré que dar mi consentimiento.
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No había ido a verla desde la muerte se su esposo. Nunca había visto a una mujer tan cambiada; parece veinte años más joven.
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No pareces darte cuenta de que en la vida de casado tres es compañía, y dos es nadie.
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En cuestiones de gran importancia lo esencial es el estilo y no la sinceridad.
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!Pero si a mi no me gusta el alemán! Es una lengua que no sienta absolutamente nada bien. Sé perfectamente que parezco feísima después de mi lección de alemán.
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Todas las mujeres llegan a parecerse a sus madres. Esa es su tragedia. En los hombres, ninguno se parece. Y es la suya.
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El nombre completo de Oscar Wilde es: