La filosofía en el tocador

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La filosofía del tocador del Marqués de Sade (1740-1814)

Novela –Literatura francesa-

Escritor, filósofo y dramaturgo, uno de los autores más controversiales de la literatura universal, subversivo e incitador de un libertinaje que resulta abrumador en la actualidad, influyó notoriamente en figuras como Bataille, Apollinaire, Dostoievski, Breton o Flaubert. Estuvo encerrado casi treinta años, y muchos lo señalaron como un enfermo mental por las depravaciones que contemplan sus textos. Ateo radical, libertario manifiesto, amante de las orgías y las parafilias, además un contundente crítico de las instituciones religiosas, apoyó la Revolución Francesa, pese a provenir de noble cuna, ganando reprobación y rechazo, pues estimaba los vicios por encima de las artificiosas virtudes de la sociedad. Su obra fue incluida en el Índice de libros prohibidos y gran parte de ella fue escrita mientas estuvo recluido en La Bastilla. Sus dotes literarias solo fueron descubiertas después de su muerte.

Esta es una de sus novelas más escandalosas: Eugenia, una jovencita virgen que, tras conocer a la Sra. de Saint-Ange, acuerda ser instruida en su casa durante dos días en las artes amatorias, esperando ser desflorada y sodomizada por uno de sus preceptores, Dolmancé, un hombre conocido por su desbordada lujuria, y prepararse para hacer entrega de su cuerpo al placer que inspire cualquiera que desee sus tiernos muslos, disfrutando del enorme miembro de Agustín y la vista de dos hermanos que se sirven de amantes. Se trata de una apología al sexo que se desentiende de la absurda moral, limitada a la reproducción; en contra de la religiosidad que pregona la mojigatería; aprobando la pederastia; las relaciones incestuosas, bañadas por un néctar embriagador que se extiende llegada la cúspide de los deleites; y el crimen, como depurador de los instintos que son reprimidos por la civilización.

@Juliiann0



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Filosofía en el tocador, una de las novelas de Sade fruto de su desidia durante sus estancias en las cárceles de Francia, otro escándalo para la sociedad de la época y un paso más cerca de ser considerado públicamente enfermo mental por demencia libertina. En esta ocasión el marqués relata en más de 120 páginas una sola jornada en los paraísos de Sodoma, ahora ubicados en la casa de los Saint-Age. Tres preceptores, dos de ellos miembros de familia, se encargarán de reeducar a una joven inocente mediante lecciones intercaladas de amoralidad y sadismo sexual. Se repiten las críticas sociales desde la figura de los antihéroes ahondando en las perspectivas (físicas y mentales) más depravadas. A pesar de proceder de finales del XVIII, las diatribas rondan en torno al poliamor, el libertinaje y la sexualidad abierta. El incesto, el homicidio y la violación son cosa de poco escándalo debido al fuerte nihilismo y ateísmo de los personajes. Se niega la existencia de crímen alguno y se rechaza abiertamente la religión junto con las virtudes. El sistema capitalista y el modelo legislativo son humillados hasta la saciedad en una estancia burguesa repleta de cuerpos desnudos. Una erótica arraigada fuertemente a los placeres más primitivos y egoístas del ser humano. Una obra de teatro irrealizable si se requiere inexistencia de víctimas. ¿La madre proscribirá o prescribirá a su hija la lectura de este libro?