Vientos de conquista

Lo ha vuelto a hacer.
Alan Pitronello y sus musas se ponen de acuerdo, y en perfecta sintonía crean La tercera expedición.

La segunda, opera prima del autor, comparte muchos personajes con quien nos ocupa, de los que os revelaré, los estrictamente necesarios, y, aunque son obras conclusivas, yo recomiendo empezar por la primera.

"Eruditos":
Vientos de conquista es una ficción histórica.
Una novela de aventuras al amparo de la nueva oportunidad que la corona le ofrece a Pedro Alvarado y a sus ansias de reconocimiento y riquezas. Esta vez nos vamos a Guatemala, aunque en un viaje que nos llevará desde Sevilla a Las Antillas.
México, Cuba y La Florida, también estarán presentes mediante historias entrelazadas.

No obstante, la trama está siempre por encima de la exactitud. Si eso buscáis, id a los entretenidos ensayos de historiadores, que por cierto, interpretan y barren como cualquiera, por donde les viene el aire.

Fernando de Cardeña es nuestro protagonista y aquellos que han leído La segunda expedición, el apellido, les suena.

El joven, procede de una familia de comerciantes que se aventuran a apoyar la empresa de Alvarado, pero, al no ser este hombre que pague puntualmente sus deudas, deciden que al viajecito se una la promesa más capaz de la familia.

Y aquí pasamos de lo bueno a lo excelente.
Pitronello, muy bien documentado, hace una brillante recreación del comercio con "las Indias" y sus dificultades al que no le falta detalle.

Pero además, poseído por una brillantez envidiable, nos sumerge en una Odisea particular donde la ambientación es impecable.
Su ruta por las Antillas y las descripciones de sus selvas, cataratas, desfiladeros y paisajes son tan evocadoras como inmejorables.
La negra tinta convertida en imagen de alta definición.

Amor, amistad, codicia, lealtades y un pasado del que nadie escapa, conviven en un presente histórico que Pitronello interpreta con dedos de pianista.

De prosa cuidada, sencilla y directa el autor que ha recorrido medio mundo, nos regala una novela de aventuras a la vieja usanza, pero con el frescor que necesitamos en nuestro XXI.

Otro de esos escritores que progresan adecuadamente.
¿Qué les dais de comer en Pàmies?

Un relato muy recomendable que nos lleva por territorios desconocidos y olvidados por las sombras de grandes conquistas.

Os traigo una nueva novela histórica ambientada el Nuevo Mundo y la Conquista una época dura, bastante cruel y a veces también sangrienta, que nos acerca al legado de los españoles en esas tierras.

Nos situamos en Sevilla, año 1538, cuando Pedro de Alvarado, adelantado y gobernador de Guatemala, regresa a España para buscar el apoyo de la corona y conseguir financiación para la que va a ser su próxima expedición: llegar a las Islas Molucas a través del Pacifico.
En esta ciudad conocerá a los Cardeña, una familia de comerciantes que en su afán de progresar, apuestan toda su fortuna y su prestigio a esa campaña.
Para proteger los intereses de la familia el joven Fernando de Cardeña acompañará a Alvarado como su armador y lugarteniente. Así nuestro protagonista se embarcará en un largo y apasionante viaje desde Sevilla a Santo Domingo, Cuba, Guatemala y México .
A través de sus ojos, los lectores descubriremos la realidad que se vivía en esas lejanas e inestables tierras.

El autor con un lenguaje fluido y una narración ágil, nos sumerge en una historia entretenida y llena de personajes inolvidables. Por la parte histórica nos ofrece una visión de las expediciones españolas y quienes las financiaban. Nos muestra lo difícil que era llevar a cabo dichas campañas y lo que costaba conseguir recursos para ellas, pues la distancia y los problemas entre los conquistadores e indígenas de la zona lo complicaba bastante.

Si la parte de documentación es extraordinaria, y a mí me ha permitido acercarme a una parte histórica que no conocía, la ambientación es también impecable. Las vestimentas, las comidas, el lenguaje con expresiones propias de la época e incluso la manera de pensar de algunos de los personajes, todo nos sumerge en la historia conforme vamos leyendo. Así sentiremos el bullicio del puerto de Sevilla, la brisa del mar en la cubierta de los galeones, la humedad y el calor de la selva, el cansancio de las largas caminatas….

En cuanto a los personajes para mí todos son tremendamente carismáticos y fuertes. Nuestro protagonista Fernando de Cardeña, pese a su juventud tiene claro cuál es su deber anteponiendo éste a su propio bienestar.
A lo largo de toda la historia veremos que pese a todas las situaciones por las que pasa, o tal vez debido a ellas, además de crecer y madurar como persona, nunca renunciará a sus valores y principios. Es un hombre de honor que luchará por lo que es suyo. Cree firmemente que las cosas se pueden mejorar y, en lugar de tratar de imponerlas por la fuerza, se puede construir en esas tierras un espacio en el que todos, españoles y nativos pueda vivir juntos y así crecer y progresar.
Además este viaje le hará descubrir un hecho de su pasado relacionado con Ixchel, una diosa de la cultura indígena de la zona.
Junto a él, tengo que destacar también a Amir el esclavo guineano libre que no duda en permanecer fiel a su lado o Diego de Estrada, capitán veterano de las guerras de Italia que se embarcá en busca de una nueva oportunidad.

Otro personaje que no puedo dejar de mencionar por el gran peso que tiene es Pedro de Alvarado. Un personaje histórico que me ha resultado muy interesante y queda perfectamente retratado a lo largo de toda la novela con ese carácter incontrolable, muy ambicioso y ese ansia de poder.

Y si hablamos de personajes femeninos, también hay varios destacables como Beatriz del Castillo, Isabel de Bobadilla, esposa de Hernando de Soto, Beatriz de la Cueva, esposa de Alvarado o Juana de Portocarrero una joven con carácter que, por el bienestar de aquellos que quiere tomara una decisión que se tambaleará cuando su vida se cruza con la de Fernando. Esto dará lugar a una historia de amor que perdurará a lo largo de toda la novela.

En conclusión “Vientos de Conquista” es una novela de viajes, de aventuras, de honor y traiciones, de amor y también de desamor. Una novela llena de emociones que sin duda cala hondo cuando llegas al final. Muy recomendable para quien disfrute de las novelas históricas.

Tuve el placer de conocer en persona a Alan Pitronello en la pasada edición de la Semana de la Novela Histórica de Cartagena y me gustó mucho su manera de presentarnos "Vientos de conquista". Me gustó tanto que me marqué entre ceja y ceja la firme intención de leerme la novela pero hasta ahora no la había podido leer por motivos varios: no era el momento adecuado, mi mente me pedía leer otras cosas...y, ahora que la he leído tengo que decir que me ha gustado aunque, también es verdad, me esperaba un poco más. Me he encontrado con pasajes en los que me despistaba con las descripciones de los lugares, con las relaciones entre los personajes, etcétera. (Esta pega, por decirlo de alguna manera, es a nivel personal. No significa que os suceda cuando la leáis).

Entrando un poco en materia, el lector viajará a Sevilla y los territorios conquistados durante el Descubrimiento de América (aunque aquí, en la novela, los personajes tratan de alguna manera de asentarse en los territorios nuevos) durante el año 1538 hasta aproximadamente 1543. Cinco años en los que al protagonista de la novela, que no es otro que Fernando de Cardeña, le sucede un montón de cosas como el lector podrá ver.

La premisa que hace que Fernando de Cardeña tenga que irse de Sevilla hasta el llamado Nuevo Mundo es tratar de que los intereses de su familia, una familia de comerciantes, no disminuyan hasta la miseria. Para tal fin, Cardeña deberá entablar conversaciones de todo tipo con gente muy dispar entre ellas. En su viaje conocerá el amor verdadero, conocerá también la desgracia más absoluta y, sobretodo, se dará cuenta de que la sociedad, en muchos aspectos, es una sociedad muy egoísta (en esto no hemos cambiado con respecto a la sociedad de aquella época).

En definitiva, "Vientos de conquista" es una novela que pone de manifiesto que por mucho que nos organicemos para hacer algo en concreto, queramos o no, siempre habrá algo o alguien que hará que cambiemos nuestro objetivo o nuestro proceder para alcanzar tal objetivo.

Fernando de Cardeña pertenece a una prestigiosa familia de mercaderes afincados en Sevilla. Los Cardeña junto con la familia Bardi, con quien están unidos por matrimonio, están deseosos de ganarse el favor de Su Majestad e ir ascendiendo económicamente. La familia decide apostar sus riquezas a la expedición del adelantado Pedro de Alvarado, quien mantiene buenas relaciones con el rey. Pero tras la muerte del padre de Fernando en las Indias, los planes tendrán que cambiar radicalmente.

Fernando, quien iba a instalarse en Italia para organizar allí las rutas comerciales, tendrá que viajar con su pequeño séquito a las Indias. Allí se encargará de los negocios de su difunto padre, de la expedición de Alvarado y otra más que acepta para beneficiar aún más a su familia. Una revuelta en Nueva España y los muchos enemigos de Alvarado harán que este plan sea cada vez más complicado, cambiando por completo la vida de Fernando. El joven se verá inmerso en un viaje que lo llevará desde las Antillas a México, descubriendo así un nuevo mundo por conquistar.

Sobre los personajes, aunque hay muchos (tenemos una lista al comienzo) van a destacar solo unos pocos. El protagonista es Fernando. Es un joven con mucha inteligencia y temple, a la vez que aventurero en su interior. Es un hombre con ambiciones, pero siempre por el bien de su familia. Es, además, un personaje con mucho honor, respetable, un verdadero caballero cristiano de la época, con unos valores tremendos y que siempre hace lo correcto. Sus hombres de confianza están formados por Diego de Estrada, capitán caído en desgracia pero con unos valores muy marcados también y de una gran fidelidad, y Amir, un esclavo africano comprado por el tío de Fernando y liberado al poco tiempo por orden del joven. Esto hará nacer una unión de por vida y fiel entre ambos personajes. Otro personaje importante es Pedro de Alvarado, adelantado y gobernador de Guatemala, un personaje histórico. Este personaje tiene sus luces y sus sombras y está muy bien reflejado y perfilado, como todos en esta novela.

Es la segunda novela que leo del autor (podéis ver la reseña de la segunda expedición) y vuelvo a confirmar que me encanta. Se trata de una novela bastante ligera, aunque es cierto que al comienzo cuesta meterse en la trama por la cantidad de personajes que hay, pero una vez se conocen la novela fluye con un ritmo muy natural. Es también una novela muy entretenida, llena de pericia y aventuras, de un mundo complejo y cambiante.

El autor se ha documentado muy bien para mostrar al lector cómo era la vida en el siglo XVI, los viajes a las Indias, lo que suponía formar una expedición (tanto en costes temporales como humanos y económicos) y la importancia de las alianzas familiares y lo quebradizo que suele ser a veces. La pluma de Pitronello es muy fluido y claro, alejado de la imitación del habla de la época (aunque habrá alguna que otra expresión). El ritmo es muy continuo, aunque dije que con un comienzo algo más lento, la lectura coge mucho ritmo y es muy rápido de leer. Una trama llena de aventuras, viajes por tierras desconocidas, peligros y conflictos, inteligencia y una gran delicia tras la lectura.
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