Este libro nos cuenta la historia de Lou y de Reid, una bruja y un cazador que están obligados a casarse en contra de su voluntad, aunque evidentemente Reíd ni nadie sabe que Lou es bruja, por qué en esta historia las brujas son mujeres malvadas condenadas a la hoguera por la Iglesia. Pero no creáis que son brujas de pacotilla no, son BRUJAS así en mayúsculas y son capaces de hacerles verdaderas barbaries a los humanos. Por lo tanto nos encontramos en una guerra abierta entre ambos bandos y, en medio, a nuestros dos protagonistas.
La protagonista Lou la ame desde las primeras páginas, tiene una personalidad arrolladora, es sarcástica, impulsiva, decidida y no tiene pelos en la lengua. Creo que es de lo mejor de este libro y a pasado a la lista de mejores protagonistas femeninas para mí.
Por el contrario, nos encontramos con Reíd, el personaje masculino que me ha dejado un poco impávida y cuyas decisiones a veces no se correspondían con sus principios, sobre todo, en el tema amoroso. Es un personaje serio, que lo da todo por la iglesia que lo ha criado y que tiene un carácter que no llega a controlar del todo aunque en ocasiones puede llegar a ser dulce, educado y caballeroso.
Los personajes secundarios que, en mi opinión, están un poco de pasada si que me han gustado, sobre todo Ansel y Coco.
El libro está narrado desde ambos puntos de vista aunque hay más capítulos narrados por Lou, lo que te hace entender mejor ambos personajes y ambos bandos.
Con respecto al ritmo de lectura he de decir que es vertiginoso, engancha muchísimo y no lo puedes soltar.
Otra cosa a destacar es la ambientación, la historia se desarrolla en Francia aunque no una Francia actual, las descripciones están cargadas con ese toque romántico que inspira todo lo Francés.
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