Al otro lado del océano

"Temía que, si hablaba o gritaba, la ira sujetaría ambos lados de mi boca abierta y la rasgaría por la mitad. Así que no decía nada"

Estoy harta de intentar explicarle al mundo por qué el racismo es malo ¿vale? ¿por qué debería ser mi responsabilidad?

Ocean me había dado esperanza. Me había hecho volver a creer en las personas. Su sinceridad me había dejado en carne viva, había despegado las capas de ira dentro de las cuales había vivido durante tanto tiempo.
Gracias a Ocean, tenía deseos de darle al mundo una segunda oportunidad

Siempre digo que no me importa lo que piensan los demás. Digo que no me molesta, que me importa una mierda las opiniones de los idiotas, pero no es cierto...No es cierto porque siempre es doloroso. Eso significa que me sigue importando...Nunca deja de doler. Solo se vuelve más fácil recuperarse.

¿Eres racista? ¿O solo estás teniendo un mal día?
Ya no podía distinguir a las personas de los montruos.
Observaba el mundo que me rodeaba y ya no veía matices.
No veía nada sino la posibilidad de sufrir y la necesidad subsecuente de protegerme constamente

Pues no quiero ser interesante...El objetivo de mi existencia no es fascinar a desconocidos. Solo intento vivir. Solo quiero que las personas sean normales cuando están conmigo

No entendía por qué alguien podía estar tan violentamente enojado conmigo por algo que no había hecho, al punto de considerar que tenían motivos para agredirme a plena luz del día mientras caminaba por la calle.
No quería entenderlo.
Pero estaba a la vista

Temía que, si hablaba o gritaba, la ira sujetaría ambos lados de mi boca abierta y la rasgaría por la mitad.
Así que no decía nada

Cuanto más conocía a las personas, más advertía que todos éramos un montón de idiotas asustados que caminaban a oscuras, chocándonos unos con otros, aterrorizándonos sin motivo alguno.

-¿Cómo sabe uno si está haciendo lo correcto?
-Si la decisión que has tomado te ha acercado a la humanidad, entonces has hecho lo correcto.