Una historia ridícula

La novela nos presenta a Marcial, un hombre autodidacta que no ha podido recibir una educación superior, con don de palabra y cierta extravagancia por no poder acceder a esa clase "superior" intentando de ese modo cubrir esas carencias, es trabajador en una empresa cárnica y critica la superficialidad de todo aquel que le rodea, incapaz de que sus relaciones amorosas lleguen a buen puerto se enamora de Pepita ya en su madurez, ella se encuentra en un perfil superior al suyo intelectualmente hablando y pertenece a una familia acomodada, lo que hará que Marcial se mantenga en un cuestionamiento constante intentando desplegar todos sus encantos para lograr conquistarla demostrando su peculiar forma de ser. Es él mismo el que nos relata la historia de su enamoramiento, nos presenta sus opiniones sobre la vida, reflexiones, situacaiones ridículas tal y como aparecen en el título de la obr
Sinceramente, no es de las novelas que más me han gustado del autor

Delirante monólogo de Marcial, un hombre con un concepto altísimo de sí mismo pero lleno de dudas y resentimientos. Nos relata la historia de su enamoramiento de Pepita, una chica de familia adinerada y sus cada vez más desesperados intentos por conquistarla.
Con un lenguaje ostentoso, el protagonista nos describe su vida desde la infancia hasta la actualidad dejando claro lo mucho que se quiere y lo mucho que desprecia a los demás.
El autor hace un magnífico retrato de un personaje pomposo y engreído con muchos traumas y complejos.
Maravillosa lectura. Repito: Maravillosa lectura.

Desde luego el libro no puede hacer más honor a su título, porque vaya historia más ridícula. En serio, el protagonista es insufrible. Para describirlo de alguna forma, diría que es el típico cuñado que siempre tiene que opinar de todo. Un hombre que trabaja en una empresa de productos cárnicos pero que se cree que sabe de todo, un licenciado en la vida que hasta se cree escritor y filósofo.

En pocas palabras, el libro trata de como este señor llamado Marcial intenta conquistar a una mujer llamada Pepita y en su camino hacia el amor o la conquista, tenemos que “escuchar” su continua verborrea con respecto a distintos temas.

No es un libro que me haya entusiasmado, pero reconozco que la prosa de Luis Landero es ingeniosa y tiene su toque de humor. Es un libro corto, bien escrito e irónico, así que no se puede pedir más. Tenía ganas de leer algo de este autor y decidí empezar por Una historia ridícula y lo cierto es que me ha dejado con ganas de seguir explorando su obra. A fin de cuentas, no todos sus libros tendrán a un Marcial como protagonista (o eso quiero creer).

Me ha encantado, esta novela está escrita con una finísima ironía, con prosa elegante y clara. Muy amena y con sentido del humor.
Realmente es un monólogo de un tipo bastante peculiar muy pagado de si mismo y que se enamora de una mujer del todo inalcanzable, por belleza, posición, cultura... y asistimos al mundo interior del protagonista que es un vulgar empleado de un matadero, y que cree de sí mismo que posee una vasta cultura.

Es la primera vez que leo a Luis Landero y debo decir que me gusta mucho su forma de escribir: clara, concisa y sin retoques que dificulten la lectura.

No imagino un título mejor para este libro: " Una historia ridícula", porque eso es precisamente lo que es, una historia simple, sencilla, contada con un toque hilarante, pero que no lleva a ninguna parte.

La historia está contada en primera persona por parte de Marcial, que expone sus ideas tal cual le vienen a la cabeza, como si los expulsara de golpe y sin pensar, y con muchos momentos divertidos.

Es un libro bien escrito que entretiene, sin más.