Un hombre para un destino

Un Hombre Para Un Destino nos cuenta la historia de Charlotte Darling y Reed Eastwood. Ella es un joven que descubre a su prometido siéndole infiel, tras esto decide vender su vestido de novia y lo hace en una tienda de segunda mano, en donde se enamorará de un vestido de novia de plumas y al probárselo, descubrirá que una preciosa nota. Él es un empresario dueño de una parte de una de las inmobiliarias de lujo más importantes del país y la persona que escribió la romántica nota que Charlotte encontró colgando en el vestido. Dos corazones rotos que no creían que el amor volvería a llamar a su puerta hasta que el destino actúa y lo hace a través de una nota.

Charlotte Darling iba a con intención de deshacerse de su vestido de novia no con la intención de traerse uno nuevo, pero, la bonita nota la ha ganado y ahora siente la necesidad de conocer a la persona que la ha escrito. Se pone a investigar sobre quién se trata la persona que escribió la nota y llega hasta Reed Eastwood, jefe de una inmobiliaria de lujo, decide escribirle para que le enseñe uno de los áticos que tienen.

Ella acude a la cita y aparece ante ella Reed Eastwood no obstante, no se parece para nada a la persona que escribió la nota. Por cosas del destino, ese no será su último encuentro, ya que Charlotte terminará trabajando en la empresa de Reed y este se convertirá en su jefe.

Charlotte está decida a descubrir dónde se ha quedado el hombre tan romántico que escribió esa nota, Reed por su lado hará todo lo posible para que ella no se acerque a él, sin embargo, no todo sucede como queremos, Reed y Charlotte están a punto de descubrirlo.



Este libro está narrado en primera persona desde el punto de vista de ambos protagonistas: Reed Eastwood y Charlotte Darling. Nos encontramos con una novela que consta de 319 páginas con 38 capítulos y un epílogo, los cuales son cortos. El ritmo de lectura es muy ágil ya que contiene bastantes diálogos y cuando es necesario, aparecen descripciones en momentos puntuales que nos sirven para conocer más a los personajes. Es una novela adictiva donde existe una gran tensión entre los protagonistas, tenemos muchos tiras y aflojas que logran sacarte más de una carcajada. La trama nos habla de dos personas que han sufrido por amor, ambos se encuentran reticentes a volver a creer en él. Es una historia de superación personal donde ambos deben luchar contra sus propios demonios para dejar el pasado atrás y darse una nueva oportunidad para creer en el amor.

Charlotte. Nuestra protagonista femenina es dulce, trabajadora, un poco torpe y perseverante. Tras finalizar su relación amorosa se ha dado cuenta de que durante el tiempo que estuvo con su pareja se había perdido a ella misma y ahora que todo ha terminado, lucha por recuperar la persona que era antes. Es un personaje que me ha encantado, desprende mucha fuerza y te hace ver que no debes hundirte, sino luchar por lo que quieres.

Reed. Nuestro protagonista masculino es reservado, arisco, responsable y un poco prepotente. Se ha refugiado en sí mismo para no volver a sufrir después de recibir un golpe de la persona con la que se suponía que iba a pasar el resto de su vida. Es un personaje que me ha gustado muchísimo porque no es para nada lo que aparenta a simple vista, asimismo vemos como va evolucionando y cómo nos deja ver porque se comporta de la manera en que lo hace.

Otros personajes que aparecen en la novela son: Max y Iris. Me han encantado ambos, pero, sobre todo Iris, es maravillosa 😍

Por último, había leído con anterioridad a ambas autoras por separado y me había gustado mucho como escriben, Encontrarme con esta novela escrita por las dos ha sido un verdadero lujo, he disfrutado mucho leyendo la historia de Charlotte y Reed. Hacía tiempo que no me enganchaba de esta manera a una novela, y ya lo echaba de menos, te mantiene tan atrapada que no te das cuenta de la rapidez en que la lees. Me lo he pasado genial leyéndola y me ha tenido bastante intrigada con respecto a Reed, y eso ha logrado que no pudiera parar de leer. El epílogo me ha parecido maravilloso, debo decir que no me lo esperaba y me ha encantado, me he emocionado leyéndolo porque es perfecto. Es un libro que esconde muchas moralejas y nos deja un claro mensaje que es: vivir, disfrutar de todo lo que se nos presenta y no renunciar a los sueños o pequeñas cosas. Nosotros somos los dueños de nuestro tiempo y nosotros decidimos hacer con él lo que queramos.



Un Hombre Para Un Destino es una historia ligera y adictiva que te sorprenderá, tiene unos protagonistas que lograran enamorarte, sacarte muchas carcajadas y emocionarte. Es una novela que se cuece a fuego lento que nos enseña a vivir cada momento con intensidad y a dejarnos llevar por lo que sentimos en cada instante.
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Esta novela absolutamente maravillosa es autoconclusiva, está bien escrita y es muy fluida. Contada desde el punto de vista de los dos protagonistas y, a pesar de ser tomo único, espero sinceramente que haya un libro dedicado a Max.

La suerte parece haber abandonado a Charlotte Darling últimamente. Ella pensó que tenía un novio cariñoso, un buen trabajo, una boda que organizar, pero tuvo que despertar abruptamente cuando descubrió que su futuro esposo la estaba engañando, y de repente perdió todo lo que tenía. Ahora está sin trabajo y se ve obligada a vender su vestido de novia en una tienda de segunda mano para ganar algo de dinero, pero tiene claro que no es su momento cuando le dicen que no recibirá dinero pero si vales para gastar en la tienda. Luego ve otro hermoso vestido de novia y decide probárselo, encontrando una tarjeta azul cosida en el forro con una magnífica frase de amor escrita por el novio llamado Reed Eastwood. Charlotte queda impresionada y decide averiguar cuál es la historia de ese vestido, por lo que descubre que Eastwood es un importante promotor inmobiliario de Manhattan y decide intentar conocerlo. Pronto descubrirá que Reed ya no es el novio enamorado que escribió esa nota, es un hombre desencantado, frío y cínico, pero también es el hombre más guapo que jamás haya visto. Cuando una extraña dama que conoció en un baño le ofrece un trabajo, descubrirá que acaba de convertirse en la asistente personal de la familia Eastwood, y su determinación de averiguar qué pasó para que su nuevo jefe se convirtiera en lo que es hoy, pronto se unirá a la abrumadora atracción que siente por él, un deseo que parece ser correspondido, incluso si Reed continúa rechazándola. Charlotte se convierte así en una mujer con una misión, quiere saber por qué a toda costa.

Desde las primeras lineas me ha atrapado, me ha transportado a otra dimensión.

Mientras procedía a leer, a medida que la trama avanzaba está se volvía cada vez más compleja, los personajes adquirieron mas profundidad sorprendiéndome línea tras línea, página tras página, y cuando llegué al giro de la trama simplemente me enamoré más de la historia. al final, las autoras pusieron la guinda al pastel con uno de los epílogos más hermosos que he leído en mucho tiempo, verdadero, dulce sin ser meloso, tierno y conmovedor.

Reed es un personaje al que en esta reseña ya sé que no podré hacerle justicia, es frío, irritante, cínico, desencantado, un hombre herido que no tiene intención de ablandarse, que tiene impulsos que reprime, que retiene todos sus sentimientos. Baste saber, en su defensa parcial, que tiene sus buenas razones que yo no puedo decirte y que al final, como es obvio, sucumbirá, y cuando lo haga, el trueno producido por su rendición será fuerte y perturbador.

La protagonista es una mujer que sueña y no tiene miedo de hacerlo, valiente hasta el límite de la imprudencia tiene la fuerza y al mismo tiempo la fragilidad de sus propias certezas e inseguridades, está hecha de fuego y viento y lucha por derrotar a un dragón con corazón de hielo y liberarlo de su hechizo con sonrisas y amor. En un intento por seducir a Reed también crecerá como mujer, enfrentará sus deseos, sus miedos, será golpeada pero no se rendirá, lamerá sus heridas y empezará a volver a su objetivo, mucho más decidida y resuelta de lo que inicialmente podría parecer.

También se enfrentará al amor que pronto comienza a sentir por Reed como algo inevitable a pesar de sus rechazos, como si ya supiera, en el fondo de su corazón, que es una guerra que está destinado a ganar.

La quise mucho, desde las primeras líneas, sin saber siquiera a lo que se enfrentaría después, y luego la amé aún más, de mujer en mujer, porque nunca se rinde, nunca tira la toalla.

Leí este libro casi de una sentada porque me era prácticamente imposible desprenderme de sus páginas, de la trama hipnótica y apremiante, de estos dos personajes tan fuertes y frágiles, tan perfectos el uno para el otro que parecían nacidos para estar juntos. Una novela perfecta inesperada e inolvidable.

Un Hombre para Un Destino nos cuenta la historia de Charlotte, una joven de casi treinta años que, tras pillar a su pareja con otra en la cama, ha roto su compromiso y se dispone a vender su vestido de bodas en una tienda de segunda mano. Allí, se encuentra con un precioso vestido de novia hecho de plumas que, además, lleva cosido una nota de lo más romántica. Impulsada por las palabras del hombre misterioso de la nota, decide llevarse el vestido e investigar sobre qué fue de la relación de aquella pareja y, en especial, del hombre que escribió aquella bonita dedicatoria. Y así, Charlotte termina encontrando al autor de la nota y, para colmo, en un giro inesperado de los acontecimientos, empieza a trabajar para él en la empresa familiar. Pero Reed no es, ni por asomo, el hombre romántico y feliz que escribió esa nota... ¿Qué pasó con aquel hombre para que se convirtiese en lo que es ahora? ¿Será capaz Charlotte de acercarse a él?

Charlotte Darling es un personaje que me ha gustado mucho y con el que he sentido una conexión inmediata. Es una chica que anda un poco perdida tras su último desastre amoroso. Cuando pensaba que la vida no podía ser más color de rosa, descubre a su prometido con otra en la cama y sus planes de futuro se van a la mierda. Sin embargo, pese a ello, es una chica dispuesta a darle una segunda oportunidad a la vida, al amor y, por supuesto, a sí misma. Solo tiene que encontrar las fuerzas suficientes para ello y el destino se las da en forma de nota romántica cosida a un vestido de novia de segunda mano. Charlotte es una mujer dulce, luchadora y valiente, con ese toque de inocencia infantil e ilusión por los detalles y las pequeñas cosas de la vida; y me ha encantado. Se disfruta mucho de sus puntos de vista sobre las cuestiones que se plantea, sobre su forma de ver el mundo y, en especial, sobre su forma de ser y de actuar, siempre fiel a sí misma, sin importarle lo que lo demás puedan pensar de ella por actuar diferente o ser impulsiva y risueña.
Reed Eastwood, por otro lado, es el jefe de una de las inmobiliarias de lujo más importantes del país. Es el típico jefe prepotente y con mal genio, lleno de prejuicios y un tanto cínico y arrogante. Nada que ver con el hombre que escribió aquella nota romántica. Sin embargo, como es habitual, ya sabemos que esta fachada y personalidad ocultan mucho más y, al igual que Charlotte, nos devanaremos los sesos por ahondar en lo más profundo de Reed para descubrir sus secretos y sus miedos. Su evolución es increíble y también nos sorprenderán las razones que lo llevaron a ser así. Nada de pasados oscuros, esta vez se tratará de una verdad que nos llegará al corazón.

Como secundarios tengo que destacar a Iris, la abuela de Reed, una mujer que ha sabido labrarse su futuro en un mundo de hombres y en una época donde era mal visto que una mujer regentara su propio negocio. Es una mujer por la cual he sentido admiración y cariño, es un lindo apoyo para Reed y para Charlotte, con la que congenia desde la primera conversación que tienen como dos completas desconocidas. También tenemos a Max, el hermano pequeño de Reed, todo un donjuán, y que aporta un toque picante y divertido a la historia, incluso sacando a Reed de sus casillas.

El romance está muy bien trabajado, empezando como una relación jefe-empleada en la que abundan más las pullas y las bromas, pasando por una amistad sincera y protectora, y terminando a un romance que, aún construido con alguna que otra mentirijilla piadosa, cuenta con cimientos sólidos y dos personas maduras dispuestas a darlo todo por la persona que aman. Es una historia que ahonda primero en la evolución personal de cada uno de ellos. Los dos vienen de relaciones rotas y necesitas recuperarse y volver a creer en el amor y, por ello, no se lanzan a la aventura a la primera de cambio. Primero tienen que curar las heridas del pasado para poder seguir adelante y ha sido muy bonito y emotivo formar parte de la evolución individual de los dos. Además, cuenta con muchas escenas divertidas y con mensajes motivadores sobre aprovechar el tiempo y disfrutar de cada momento como si fuera el último.

Un Hombre para un Destino ha sido una lectura que he disfrutado desde el principio. Puede parece la típica trama simple y llena de clichés, pero no deja de sorprender y es lo que más me ha gustado; nunca hay que juzgar la historia por lo que nos desvela la sinopsis a simple vista... Es una historia especial y única, con detalles que marcan y hacen mella tanto en el lector como en los personajes. Además, tiene un ritmo bastante ágil y rápido, con narraciones directas y diálogos de lo más ingeniosos y atrayentes para conectar con la historia y los personajes. La historia está muy bien desarrollada y va profundizando en los sentimientos, miedos y secretos de los personajes con delicadeza y emoción. Los capítulos están narrados en primera persona por Reed y Charlotte, alternando sus voces de un capítulo a otro, y es algo que siempre agradezco en historias románticas de este tipo. Por último, el desenlace es bonito, especial y perfecto, dándonos un epílogo al que no se le puede pedir más ♥

En resumen, 'Un Hombre para un Destino' es una novela adictiva y especial. Puede parece la típica trama simple y llena de clichés, pero no deja de sorprender y desarrollar un romance a fuego lento entre dos personas con corazones rotos que han perdido la esperanza en el amor y que, partiendo de una relación de amistad en un entorno laboral, va evolucionando hasta el amor más puro y sincero, aprendiendo en el camino a aceptarse tal y como son y, por encima de todo, a disfrutar de la vida y del día a día sin temor al futuro incierto. Es una novela fresca y muy divertida, pero también toca temas delicados y duros con mensajes motivadores.

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Charlotte Darling acaba de romper su compromiso y necesita un nuevo comienzo. Y lo primero que hace es llevar su vestido de novia a una tienda de ropa vintage, es ahí donde se topa con un hermoso vestido con plumas en cuyo interior hay una nota de amor cosida en el forro del vestido. Está firmada con el nombre Reed Eastwood. A Charlotte le parecen las palabras más románticas que jamás haya leído. Por lo que intercambia su vestido de boda por ese y decide encontrar a ese Reed Eastwood, pero cuando se cruza con el hombre de sus sueños, él no es el príncipe azul que imaginó. Es uno de los hombres más impresionantes que jamás haya visto, pero su actitud arrogante no le gusta un pelo. Pronto el destino los une y se ven obligados a estar juntos a menudo.

En cuanto a los personajes me han parecido muy entrañables. Charlotte es una chica de 27 años, que a pesar de que su novio le fuera infiel poco antes de la boda sigue siendo optimista respecto a la vida y a encontrar el amor de nuevo, es de naturaleza curiosa y cree en el destino y que el destino hizo que tuviera que encontrar esa nota. En cuanto a Reed al principio te parece un poco imbécil por cómo trata a Charlotte, pero cuando se comienzan a suceder los capítulos narrados por él, te das cuenta que ha tenido un año bastante difícil y está intentando protegerse para que no le vuelvan a hacer daño como ya hizo su exprometida recientemente. Su corazón está herido y está decidido a no dejar entrar a nadie.

En cuanto a los personajes secundarios tenemos a Max, el hermano de Reed, e Iris, su abuela. He de reconocer que he amado a la abuela de Reed me ha divertido mucho ver como con sus tejemanejes intenta que Reed vuelva a enamorarse y darse la oportunidad de ser feliz.

La novela está narrada en primera persona alternando el POV de Charlotte y Reed (creo que se reparten más o menos al 50% el peso de la narración). Es la primera vez que leo un libro de ambas autora, he de decir que me habían recomendado mucho sus libros, tanto los que tienen en conjunto como los que tienen a nivel individual cada una de ellas, esas recomendaciones no han defraudad, la historia ha sido entretenida, me ha parecido muy dulce y romántica, divertida y algo loca con tantos tira y afloja entre sus protagonistas esos piques y comentarios que se van haciendo para fastidiar al otro,…. El romance se cuece muy a fuego lento entre ambos, principalmente se debe a todas las reticencias que tiene Reed a enamorarse de nuevo y aunque las entiendo, la verdad es que quizás me ha parecido un poco lento a lo que yo me esperaba porque por otros libros que me han recomendado de las autoras el romance entre los protagonistas suele ser algo más rápido.

Tengo ganas de leer las recomendaciones que me han dado de otros libros de las autoras porque sé que los voy a disfrutar mucho.
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Ha sido toda una sorpresa, pensaba que me iba a encontrar la típica historia erótica entre jefe rico - empleada y nada que ver. Aunque al principio parece que el protagonista es igual que todos (lleno de tópicos), a medida que avanzas se va haciendo más cercano y "humano", restando clichés a la historia.
La protagonista aporta frescura y originalidad.
Una historia a tener en cuenta. Ojalá más publicaciones de estas dos autoras.

Un hombre para un destino es una historia independiente y autoconclusiva. Ya había leído anteriormente y por separado a estas dos grandes autoras y ambas me gustaron mucho, así que estaba deseando ver la magia que han creado juntas y os puedo decir que no me han decepcionado para nada, estoy deseando leer más de ellas.

Charlotte ha roto su compromiso poco antes de la boda al descubrir a su novio engañándola con otra. Para colmo este también era su jefe así que también termina renunciando a su trabajo por lo que sus finanzas tampoco están pasando por su mejor momento, por lo que acude a una tienda de vestidos de novia de segunda mano para vender el vestido de novia que su futura suegra había escogido para ella. Pero una vez allí encontrará el vestido perfecto, y a pesar de que le hace falta el dinero algo la hará quedarse con ese vestido.

Cosida al forro del vestido encontrará una pequeña y misteriosa notita azul que un hombre escribió para su prometida, esta nota le hace pensar que no todo está perdido, que el amor verdadero sí existe y quizá algún día puede aparecer también para ella, pero a la vez picará su curiosidad por saber que pasó con esa pareja, lo que la llevará a investigar al autor de la nota. Pero no es nada recomendable ponerse a cotillear el Facebook de alguien estando borracha por lo que a la mañana siguiente se despertará con una cita para ver uno de los áticos que el autor de la nota se dedica a vender. Pero al acudir a esa cita descubrirá que ese hombre no tiene nada que ver con el hombre dulce y romántico que ella se había imaginado al leer la nota.

Después de ese primer encuentro, y por causas que no os voy a contar porque es mejor que lo descubráis por vosotras mismas, Charlotte acabará trabajando en la empresa de Reed, y no solo eso, sino que tendrá que trabajar codo a codo con él a diario. Pero Charlotte no se deja amilanar por el carácter arrogante y brusco de Reed por lo que los tiras y aflojas entre ambos serán el pan de cada día.

Charlotte se propone descubrir que ha ocurrido entre Reed y su prometida, pero no será fácil ya que no puede preguntarle abiertamente. Conforme lo va conociendo descubre que su vida solo se centra en el trabajo. Charlotte no entiende el por qué, ya que cada vez que toca el tema Reed se cierra en banda. Reed puede llegar a ser un poquito idiota, aunque todo tendrá su explicación una vez descubramos el gran secreto que oculta.

Pero con el trato diario esa animosidad irá dando paso a la amistad, que poco a poco irá evolucionando a sentimientos más complejos para ambos que ninguno de los dos quiere aceptar por miedo a ser dañados de nuevo.

Reed es un hombre cínico y arrogante al que el destino no le ha repartido las mejores cartas, por lo que ha creado un muralla a su alrededor para que nadie pueda volver a hacerle daño. Los sentimientos que le inspira su nueva asistente no son bienvenidos y una relación entre ellos resulta imposible, por lo que suele actuar por impulso y llega a ser bastante borde con Charlotte para mantenerla alejada, aunque siempre se arrepiente de inmediato de esos arrebatos, pero a su vez no puede evitar el estar pendiente de ella, cuidarla y protegerla siempre que le es posible.

Charlotte es una mujer enérgica y decidida que no se deja amilanar por nada ni nadie. Tiene problemas de abandono, pues aunque ha sido feliz en su infancia el no conocer a sus padres biológicos y saber el motivo por el que la abandonaron hace que se sienta incompleta. A raíz de su ruptura necesita volver a conocerse a sí misma por lo que se está replanteando su vida y sus decisiones, para ello realizara una lista de todas las cosas pendientes que siempre ha querido hacer y que nunca se ha atrevido, e intentará hacerlas realidad cada vez que se presente la oportunidad. Así pues Charlotte decide tomar el toro por los cuernos y pedirle una cita a Reed, pero este se niega y se resiste a todos los avances de Charlotte.

La evolución de los personajes y su relación es lo que más me ha gustado en esta historia. Ambos tienen inseguridades que les hacen cerrarse a los demás, vienen de relaciones que les han hecho mucho daño y no quieren volver a poner en riesgo su corazón. Página a página vamos viendo que la animosidad inicial va dando paso a una amistad que irá creando la base para una relación que se irá cocinando a fuego lento.

Como personajes secundarios tenemos a Iris, la abuela de Reed y Max su hermano, aunque este no tiene demasiada relevancia en la historia es un pícaro donjuán que me ha caído muy simpático. Sin embargo Iris sí que tiene más relevancia ya que actuará como hada madrina y celestina de la pareja sin que estos se den cuenta.

El libro tiene trescientas veinte páginas divididas en treinta y ocho capítulos más epílogo. La narración corre a cargo de ambos personajes protagonistas, aunque la perspectiva de Charlotte tiene un mayor peso en la trama, ya sabéis que este tipo de narración me encanta pues nos permite conocer mejor a los personajes y sus sentimientos y motivaciones. Los capítulos son cortos lo que hace que el ritmo sea bastante ameno y fluido. A pesar de ser una historia escrita a cuatro manos no se nota nada, al menos yo no he notado el cambio de autora. Mantiene un ritmo ágil y ameno con una historia que engancha mucho y que no puedes parar de leer, los últimos capítulos son geniales llenos de emoción y sentimientos y un final digno de las mejores películas románticas.

La química entre los protagonistas es increíble desde el minuto uno, aunque esperaba más erotismo, pero la tensión sexual entre los personajes es continua a pesar de la falta de escenas de sexo. Tiene escenas muy sensuales, pero que no llegarán hasta bien avanzado el libro, y a pesar de que a primera vista pueda parecer un libro erótico no lo es, es una historia romántica, aunque claro también tiene alguna escena de sexo pero estas no son lo importante en la trama.

En Un hombre para un destino vamos a encontrar una historia tierna, llena de amistad, amor y esperanzas de futuro. Una maravillosa historia de segundas oportunidades en la que los protagonistas tendrán que enfrentarse a sus miedos y abrir el corazón para encontrar el amor verdadero.
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Divertida, fresca, adictiva, sorprendente y muy fácil de leer. Novela perfecta para leer entre lecturas más densas porque se lee sola, engancha muchísimo, sus personajes son geniales, tiene toques de humor geniales, el toque justo de erotismo y las escenas de cama necesarias, sin abusar. Perfecta.