Perdida

Nick y yo somos capaces de corrernos en cualquier sitio; ninguno de los dos padece miedo escénico, es algo de lo que ambos nos sentimos bastante orgullosos.

Es Nick, relajado y tranquilo, listo y divertido, sin complicaciones. Feliz, no se tortura. Amable. Buen pene.

Los amigos ven la mayoría de los defectos de los demás. Los cónyuges ven hasta el último detalle.

Hay una diferencia entre amar realmente a alguien y amar la idea de ella.

Supongo que estas preguntas nublan cada matrimonio: ¿Qué estás pensando? ¿Cómo te sientes? ¿Quién eres tú? ¿Qué nos hemos hecho el uno al otro? ¿Qué haremos?

La peor sensación: cuando solo hay que esperar y prepararse para la mentira.

Me dijeron que el amor debería ser incondicional. Esa es la regla, todo el mundo lo dice. Pero si el amor no tiene fronteras, ni límites, ni condiciones, ¿por qué debería alguien intentar hacer lo correcto? Si sé que soy amado pase lo que pase, ¿dónde está el desafío?

no es la mirada de un tipo que ha perdido una apuesta de manera honesta. Es la mirada de un hombre que se siente estafado. Pronto podría ser la mirada de un hombre atrapado.

Hazlo porque nunca se sabe. Siempre toma una precaución extra de la que los demás prescinden, porque eso es lo que te define como persona.

No es que el amor sea una competición, pero no le veo sentido a estar juntos si no es para ser lo más felices posible.